Secreto al descubierto

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Los 3 llegamos a la escuela. Rosa está actuando bastante normal considerando lo que pasó algunos días. Pensando lo mismo, Viviana también. Tal vez no les gustaría fijarse en tiempos oscuros. No las culpo, no puedo evitar recordar sus eventos traumáticos. Los 3 nos dirigimos al club, teniendo cuidado de no tirar los cupcakes. Pongo los cupcakes en el escritorio cerca de la puerta.

-Hey, Silvana

Rosa corre a hacia Silvana y le da un abrazo y parece incomodarle como siempre

-¡A-ah! ¡Rosa! L-Lo siento, me asustaste... ¿Dónde habían estado ustedes 2? ¿No te sentías bien?

-Si, no me sentía bien estos últimos días. Estaba muy enferma

-¡Y-Yo también! (afirma Viviana)

-Bueno, estoy contenta de que volvieron sanas y salvas

-¡Si!

-Pero Viviana... ¿Y tu uniforme?

-Oh, uh... está sucio y no tuve tiempo de lavarlo

-Pero tendrás problemas si los profesores te ven sin tu uniforme aquí...

-Bueno, por eso me salté todo el día de clases

Silvana mira a Viviana dudando. En lugar de seguir preguntando, cambia de tema.

-Por cierto, tengo una sorpresa para todos ustedes

-OHHHHHH

-¿Qué es?

-Por algo es una sorpresa, Rosita. Solo espera un momento, se los mostraré cuando Bárbara llegue

-Marcelo y yo decidimos, desde que me he estado sintiendo mejor, que podríamos hacer cupcakes, ya he faltado la mayoría de clases esta semana, así que ¿Qué importa un día más? ¡Especialmente si significa que voy a cocinar!

Viviana toma la caja de cupcakes y levanta el papel de aluminio, mostrando nuestro trabajo

-Un tono tan profundo de azul, se ven deliciosos (dice Silvana)

-¡Gracias!

-Eeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeee- ¡No puedo esperar, estoy hambrienta!

-¡Yo no! ¡Yo estoy llena!

-¿A qué te refieres?

-Yo-uh... Cuando fui a la casa de Marcelo para cocinar, me hizo un desayuno

-¡Aww! Marcelo, eres muy dulce

-Jej... gracias, Rosa

-En realidad, estoy sedienta... Volveré en un segundo

Rosa sale de la habitación del club girando hacia la fuente en el pasillo. Momento después, Bárbara entra al salón del club desde la otra puerta y decido saludarla

-Hola Bárbara

-Wow, parece que todos se molestaron en aparecer hoy

Viviana se muerde la lengua, Silvana entierra su cabeza en su novela otra vez. Me quedo solo inquieto con mis manos

-Sí, supongo

-Ya era hora

Todavía parece molesta por lo del festival, espero que los cupcakes sean suficientes para calmarla. Rosa regresa, con un jugo de manzana en la mano

-Hola Rosa ¿Qué pasó el Lunes? ¿Estabas enferma?

-Pues sí, Marcelo tuvo que llevarme al hospital

-Hmmph, Marcelo, ¿Creía que dijiste que era una emergencia familiar?

-Lo era, mas o menos, La conozco por años, básicamente es de mi familia en este punto. Sentía que tenía que asegurarme de que esté bien

El estudiante: Mente débil y brillanteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora