Luna Y Oscuridad, RECUERDOS DEL PASADO

Retorno Parte 2

La luz cegadora volvió a ser presente envolviendo el cuerpo de aquel que anteriormente fuese llamado "el último Uchiha", desapareciendo tan pronto como se había presentado, solo dejando a su paso a aquel hombre.

Sasuke no alcanzaba a ver nada, todo estaba muy borroso para él e inmensas ganas de vomitar lo asaltaron haciendo que diera arcadas y finalmente devolviese lo poco o nulo que llevaba en su estómago tratando de calmarse, su mente se sentía muy revuelta y el cansancio lo asediaba, estaba palidéciendo y maldiciendo aquel Jutsu, cayendo de rodillas al suelo mientras la respiración se le dificultaba.

Aquel Jutsu le había pasado una factura más cara esta vez pero sentía que no tenía tiempo que perder, no obstante, su cuerpo no le respondía, era como si cargase peso muerto, trató de infligir alguna especie de daño en él pero no parecía poder hacer nada en su estado, así que frustrado maldijo aún más a la vez que las arcadas volvían y devolvía lo que había en el interior de su estómago.

Sabiendo que no podía hacer nada hasta que aquellos efectos pasarán trató de relajarse y descansar, sabía que podía pasar cualquier cosa y que si había alterado algo del futuro podían atacarlo, pero no podía resistir más, su cuerpo le pedía a gritos descanso, ortorgándole tregua finalmente...
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No supo cuanto había dormido pero al despertar se percató de que el lugar no podía reconocerlo alarmándolo en sobremanera; había despertado porque un ave picoteaba su cabello y otras más cantaban estridentemente sacándolo de su sueño, todo el cuerpo le dolía pero ya podía moverse y al hacerlo un crujido se escuchó en todo su ser, trató de aclarar su mente y estirarse un poco justo cuando vio a una niñita con una canasta, él trató de hablarle pero ella salió huyendo, se levantó y el temor lo inundó pues tal vez había cambiado todo el futuro.

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Entre más caminaba más se preocupaba y se daba cuenta que no conocía el sitio, sin embargo, su cabeza estaba revuelta y no podía ir más rápido pues su cuerpo no se lo permitía, estaba muy desorientado y su cabeza dolía horrores, tomó aire y siguió su camino hasta que se encontró con una anciana quien se asustó de solo verlo por su ropaje y el estado en el que estaba, no obstante, Sasuke trató de verse más amable de lo usual y tratando de usar un tono amable le preguntó en donde estaba él, sorprendiendose de la respuesta, pues estaba más lejos de su objetivo de lo que pensaba ya que tal parecía que en el enfrentamiento con Orochimaru y tal vez en uno de sus desvíos para evitar ser detectado se había alejado del lugar al cual pretendía llegar, eso aunado a que la geografía del mundo Shinobi había cambiado con la guerra lo había llevado a desviarse del camino y terminar en otro sitio.

Al saber dónde estaba trató de pensar en cómo llegar a su hogar, pero aquel dolor de cabeza no lo dejaba en paz; la anciana lo observó y apiadandose del hombre le ofreció ayuda, Sasuke no iba a aceptarla pero aquel martilleo lo estaba atormentado de más, así que muy a su pesar decidió aceptar su ayuda.

La anciana le ofreció comida y después consigo trajo algunas hierbas que le servirían para ayudar a curar a aquel desconocido.

Sasuke sabía que no podía confiar en ella plenamente pero en ese momento no se encontraba nada bien y solo quería deshacerse de aquel agonizante sensación en su cabeza.
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Sintió que la luz golpeaba su rostro sin piedad y se levantó de golpe al recordar todo lo que había pasado, no podía concebir que se hubiese quedado dormido, pero, su mente ya no estaba revuelta ni tenía dolor, observó en todas direcciones pero no había nadie a su alrededor y fue que con horror se dió cuenta que le habían robado, sí, aquella anciana lo había curado pero también lo había saqueado, así que molesto pero ya repuesto, invocó un halcón y subió en él buscando el rastro de chakra de la mujer.

Fueron varios minutos de búsqueda hasta que la encontró en un claro, donde la enfrentó, ella abrió sus ojos lo más grande que pudo al observarlo pero tratando de lucir imperturbable habló:-pago por pago, te cure y me cobre, es justo, además no son cosas de valor-.

Sasuke avanzó hacia ella desenvainando a Kusanagi (su espada) para intímidarla a la vez que le decía:-pero son mis cosas-, cada paso aterraba más y más a la anciana quien estaba decidida a enfrentarlo, pero, antes de poder hacer algo, su cuerpo no respondio, pues ya estaba en un genjutsu.

Sasuke tomó sus cosas y se marchó dejando a la anciana en medio de aquel claro, dándose prisa para llegar a su objetivo.

Cuando pudo por fin orientarse avanzó más aprisa, había perdido mucho tiempo y debía llegar y saber que todo estaba tal y como lo dejó, saber que ella estaba bien y, al llegar por fin a la frontera con la Lluvia, el suspiró tranquilo pues aquella entrada sombría que habían creado hace tiempo aún estaba ahí, así que sin demora entró a sus territorios, llegando a su hogar, pero, lo que vio le robó el aliento pues su esposa se veía muy pálida, tal y como si fuese un cadáver, a la vez que se notaba más delgada de lo que recordaba temiendo lo peor, buscó a Orochimaru con la mirada y éste sólo volteo el rostro a la vez que le decía:-¿trajiste el pergamino?-.

Sasuke asintió sabiendo que el ex-sannin no diría más, entonces Sasuke sacó aquel objeto que les traería el milagro de la vida y al abrirlo se quedó atónito pues las letras que antes estaban se habían borrado, maldiciendo presa de la frustración a la vez que exclamaba:-¿Cuánto tiempo a pasado?-.

Orochimaru no respondió pero Hiashi quien iba llegando si lo hizo:-tres semanas, casi cumple el mes-, sin más se acercó y arrebató el objeto a la vez que le integraba chakra y se hacía legible:-lo conseguiste, pudiste traerlo, sin embargo, queda poco tiempo, esto avanza más rápido de lo que esperaba, ahora todo queda en ti, el ritual de preparación del Jutsu es largo y cansado pero sé que podrás manejarlo, solo un usuario de Senjutsu puede hacerlo-.

Sasuke asintió y aunque temió preguntar lo hizo:-¿Qué pasó con mi bebé?-, Hiashi paró en seco y evitó mirarlo a los ojos desviando la mirada:-es fuerte como sus padres, pero, solo tiene siete meses, tuvieron que realizar una cesárea y, las posibilidades son nulas, sin embargo, Karin y los demás hacen todo lo posible-.

Sasuke evitó derramar lágrimas pero ya era tarde su rostro estaba inundado de ellas a la vez que hacía otra pregunta:-¿y mis hijos?-.

-Se encuentran con Shino, Gea y Hanabi, todos están conscientes de lo que pasa a excepción del pequeño Neji y el pequeño Itachi que extrañan a su mamá, pero, están bien, por ahora hay que preparar todo, no hay tiempo que perder-.

Sasuke asintió, tomó la mano de su esposa y la besó e inmediatamente se marchó con su suegro; la traería de vuelta cueste lo que cueste y con esa resolución salieron de aquel sitio, dejando las lágrimas y los lamentos para después...