Enigma

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La actitud del Uchiha era extraña como siempre, así que los que lo conocían le restaban importancia, sin embargo, Ko, Daisuke, Kiba, Juggo y las gemelas sabían que algo más pasaba, ellos habían sentido algo más al llegar a las fronteras del país, algo turbio y sucio pero también eso mismo los había obligado a ir hacía dentro del país del Fuego.

No sentían que fuese una presencia humana o normal, aunque, no debían descartar nada, pero, aquello no se había movido ni un solo segundo desde que se percataron de ello, era como si aguardase algo o a alguien y como suponían, Sasuke se encargaría de eso fuese lo que fuese.

Sasuke sentía algo raro, sabía que sus hijos se habían percatado de ello, algo lo esperaba y no sabía que era, tal vez el verdadero villano o un oportunista, avanzó con cuidado hacía la presencia y..., se detuvo abruptamente casi al llegar, retrocedió varios metros y se puso en posición de ataque, empero no hubo respuesta alguna.

Una gran masa negra se encontraba justo frente suyo, lanzó un kunai hacía allá pero éste regreso a él con más violencia y velocidad de la empleada, descubrio su frente dejando a la vista su ojo del Rinnegan y lo que vió lo dejó sin habla, era como si una grieta de espacio-tiempo se hubiese abierto y no solo eso, de ahí emanaba algo que no podía considerar chakra pero que tenía su consistencia, era como si esa masa emanara vida.

Dispuesto a averigüar que era se acercó más a eso hasta que estaba a punto de tocarlo, siguiendo cada detalle con su poder ocular, no obstante, al hacerlo, aquella masa lo engulló sin poder hacer nada paralizándolo en el proceso...

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Aquellos eran ninjas expertos en espionaje, se dirigían con mucha cautela hacía donde se suponía estaba la monarca, sin embargo, no había ningún mapa ni documento que les diese una buena visión de aquel lugar y, al entrar se sorprendieron de las edificaciones y construcciones que encontraron, creyendo que hallarían una aldea rústica y llena de cadáveres o algo diferente a lo que realmente era, así que solo siguieron su camino teniendo en mente la descripción de su objetivo.

Su excursión no era lo que esperaban, las personas parecían felices y dispuestas a ayudar a todos sus compañeros, preguntándose si realmente esa era la tierra de sangre y horror de la que tanto les habían comentado y advertido.

Pasó el tiempo y no encontraban nada y se estaban desesperando pues no había ningún lugar que pareciera ostentoso para ser la morada de un rey, ni algo que les dijera que estaban cerca, habían puesto sustitutos en la mesa de autopsia pero sabían que para un buen observador aquello no les iba a servir mucho tiempo.

El riesgo de ser encontrados aumentaba a cada segundo, hasta que, una mujer con la descripción aparecía, en sus brazos llevaba algunas bolsas seguido de dos niños, "esa" era su presa o, esto parecía, ya que la mujer que buscaban era peliazul no castaña, así que al seguirla pudieron observar estructuras que no conocían en sus aldeas y al seguir el camino de la castaña se dieron cuenta de que uno de los niños los miraba con suma atención, aunque, pensaron que ésto era un simple error, pues la criatura parecía no tener más de cinco años.

De pronto, la castaña se detuvo frente a una especie de escuela donde finalmente aparecía la mujer que buscaban y en sus brazos una niña asomaba su cabeza, ellos sonrieron con malicia, pues ya la habían encontrado.

Sin dudar se escabulleron hacía ellos, la escuela parecía estar desierta así que era tiempo de atacar; la castaña no les importaba, no lucía como ninja, ni ninguno de los presentes, así que sacaron sus armas y atacaron, pero..., no esperaban lo que ocurriría a continuación...

Itachi volteo su rostro hacía ellos sonriendo a la vez que la mirada penetrante de Neji seguía cada detalle de sus movimientos, los había visto, siempre los vió, aunque, pensaban que igual no importaba y su muerte sería inminente.

Neji aún no podía usar su poder ocular como se debía, pero..., si podía anular las técnicas ninja de aquellos sujetos de manera eficiente, sorprendiendo a los hombres que no pudieron hacer ni un solo jutsu ante esa mirada taladrante y sus armas quedaron inutilizadas ante la rápida reacción de las hermanas y de Itachi que todo el tiempo los vió con su byakugan, aunque, solo en el perímetro del rango de visión que en ese momento podía manejar, por lo que la vista de Neji se complementó con la de él, no obstante, ninguno de los niños se inmutó ante el ataque, guardando la calma.

Hanabi por su parte no tuvo que usar su byakugan en ningún momento fingiendo no saber nada, sus sobrinos le informaban todo, aquellos tipos eran muy buenos escondiéndose pero habían fallado en un pequeño detalle que los descubrió, algo insignificante pero significativo para los habitantes de la Lluvia ya que cualquiera que pasaba a formar parte del país tenía un sello característico que solo los habitantes podían identificar y un extranjero no pasaba desapercibido ante su gente a través de su flujo de chakra, simplemente decidieron dejarlos seguir para ver que buscaban y saber su objetivo y/o misión.

Hinata de la nada sacó un polvo dirigiéndolo a los asombrados hombres paralizándolos en el acto, a la vez que niña se removía en los brazos de su madre aferrándose a su pecho.

-Nee, Nee-chan ¿puedo acabar con ellos?-, la castaña los observaba con burla y jugando con su cabello

Hinata la miró y suspiró:-pronto vendrán los estudiantes, dejémoslo en manos de Orochimaru-san; por favor, salga ya, sé que mis hijos mayores ya han visto cadáveres pero los menores aún no quiero que lo hagan, no puedo detenerlos de hacerlo, pero lo retrasaré lo más posible-.

-Muy bien, creí que podrían ser más interesantes, pero, supongo que solo son unos conejillos de indias muy aburridos, que lástima-, dijo Orochimaru saliendo de la nada, ya que se había mimetizado con el entorno sin ser descubierto por los enemigos todo ese tiempo desde que salieron del laboratorio.

Hanabi infló sus cachetes resignada cruzándose de brazos:-¡ya que!, vaya, no son nada inteligentes, pensé que me seguían a mí por mi padre pero al parecer solo querían morir, menos mal que mi cuñado no está o ya habría una pintura abstracta por aquí-, dijo sonriendo divertida.

-¡Hanabi!-, la mayor le recriminó a su hermana por su actitud tan despreocupada y simplemente soltó:-por favor lléveselos y haga lo que tenga que hacer Orochimaru-san-.

El mayor sonrió y se lamió los labios sonriente:-muy bien, ahh..., Sasuke mando un mensaje, van a tardar un tiempo, ya acabó todo pero al parecer tus hijos le ganaron o tal vez haya algo interesante allí, lástima que no pude ir, espero me traiga algún regalo, bueno, me voy-, sin más hizo un par de sellos y una serpiente apareció engullendo a aquellos hombres, marchándose de ahí.

-Que asco-, Hanabi se abrazo a ella misma con clara mueca de asco y después de unos segundos se lanzó a los brazos de su hermana contándole lo que hicieron en su trayecto hacía aquella edificación a la par que los infantes hacían como si nada yendo con su madre y recogiendo lo que anteriormente estaba en sus manos muy calmadamente como si aquel suceso no hubiese ocurrido, algo muy raro para su edad pero debido a las historias de sus hermanos, tíos y su padre aquello no había sido nada perturbador, volviendo a su rutina sin saber lo que ocurría en el país del Fuego e ignorando aquel panorama...

Luna Y Oscuridad, RECUERDOS DEL PASADO Donde viven las historias. Descúbrelo ahora