Capitulo 1

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Desde que estoy en la Universidad de Canadá me siento más adulta, no es broma, me siento independiente. A parte de que es muy fácil mi vida ya que no estoy siendo "vigilada" por mis padres, ahora puedo hacer las cosas más relajada, excepto por el pequeño detalle de que mi compañera de cuarto me da órdenes a cada rato.

Antes de hablar de ella les diré sobre mi, soy Amelia Salazar Kyo. Pero todos me llaman Ami, mi padre es mexicano y mi madre es japonesa. Así que yo soy una combinación de ambos; mi pelo es chino y negro, mi piel blanca, mis ojos no son tan rasgados como los de mi mamá más bien, son más como los de mi papá. Son de color almendra y mido 1.68, y soy delgada por naturaleza.

Mis gustos musicales los saque de mi papá, no en el sentido de que me guste la banda, el reggaeton o los corridos. Si no más bien, las canciones en español y algunas en inglés. Pero lo que si saque de mi mamá es mi fanatismo por el anime de Saint Seiya, eso sí, tengo muchas cosas relacionadas con ese anime. Lo único que no tengo son figuras de acción, pero mañana me llegará una... Sip, al fin pude comprar una con mi dinero ¡Aaaa! Me siento orgullosa de mi misma.

Ahora, a si, mi compañera de cuarto o casa (Porque vivimos en una casa pequeña dentro de la universidad) se llama Samantha y es 100% canadiense así que no hay razón para profundizar con su físico. A ella se le da bien el hablar en español, así que puedo sentirme casi en casa. Solo que a ella no le gusta mucho Saint Seiya pero, me tolera cuando me pongo a hablar de ellos como loca.

En este momento me encuentro en mi cama, apenas son las 7:13 de la mañana. Mi primera clase es a las 8 así que aún tengo tiempo para seguir un rato aquí, a menos que...

-¡¡¡Ami ya levantate si no quieres que yo vaya y lo haga!!!- Grita Samantha desde su cuarto.

Me levanto despacio, si no quiero sufrir un ataque de cosquillas por parte de Sam mejor me visto. Me pongo una blusa de manga larga azul oscuro, un pantalón blanco con unos botines de color café. Me peino como puedo para después agarrarlo en una coleta alta, mi cabello me llega hasta la cadera, estoy pensando seriamente en cortarlo.

Ya lista acomodo mis libros y útiles en mi mochila, en eso la puerta se abre y volteo sin preocupación.

- Si te levantaste después de todo- Dice Sam caminando hacia mi.

- Era eso o sufrir un ataque de parte tuya- Digo antes de volver a lo que hacía.

- Eres muy inteligente Ami-.

- Gracias- Cierro la mochila y la levanto.

Sin decir más, bajamos hasta la cocina para desayunar algo, después yo lave los platos mientras Sam terminaba su tarea que no quiso hacer ayer por culpa de la flojera.

- Ami ¿Cuál es la raíz cuadrada de 81?- Pregunta mientras juega con su lápiz.

- Nueve, deberías de estudiar otra vez las tablas de multiplicar- Digo limpiándome las manos.

- Oye, no es mi culpa que tenga tanta información en mi cabeza- Sonríe y me mira.

- No, es por guardar cosas que no necesitas- Río un poco.

Ella me enseña la lengua y sigue con lo que hacía, miro el reloj, son las 7:35 apenas. Dentro de diez minutos me iré para llegar a tiempo a mi clase, estoy estudiando para ser una artista o ingeniera en mecatrónica por lo menos. Así que siempre termino las clases a las 4 de la tarde, muchas clases y muchos apuntes que hacer... Ahora imaginen eso multiplicado por diez veces, esa cantidad es el número de tareas que me dejan. Gracias a Athena solo quedan dos años para terminar, ya después me iré a vivir a otro país.

Me siento en el sillón de la sala, aquí tenemos tres sillones en U y en la parte vacía está la televisión de plasma. Tenemos un Xbox, Wii, Play Station 4 y un DVD tanto de Blu-ray como uno normal. La mayoría de las cosas las compramos Sam y yo, lo único que le pertenece al campus es la televisión.

Los pequeñosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora