Capitulo 5

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- Afrodita, sabes que no puedo llevarte a clases- Le digo por millonésima vez.

Él escribe rápidamente en su cuadernito, después deja el plumón y levanta el cuaderno para que pueda leer.

-"Prometo no hacer ruido ni distraerte, pero no me dejes solo" ¿Como sé que lo cumplirás?- Me cruzo de brazos.

Vuelve a escribir y levanta nuevamente el cuaderno.

-"Lo prometo en nombre de la Diosa Athena"- Levanto una ceja.

Deja el cuaderno y me súplica, hasta se hinca y junta sus manos en señal de súplica... Si sigue así no podré decirle que no.

- Vamos Ami, deja que vaya contigo... ¿Que puede pasar?- Dice Sam poniéndose a un lado de él.

- Si lo llegan a ver ¿Que voy a decir? ¿Que es un muñeco robótico?- La miro con seriedad.

- Di que es un proyecto que estamos haciendo entre tú y yo, así se explica el que se pueda mover y que su textura sea como la de la piel- Dice mientras le toca su cabello.

Afrodita la mira y después me mira, da saltitos mientras mueve su boca. Supongo que está diciendo "Por favor" para que lo deje ir... Maldita sea.

- De acuerdo, irá conmigo pero estará en la mochila y no podrá salir para nada...- Miro a Dita quien está sonriendo de oreja a oreja-... ¿Entendiste?

Él asiente y comienza a saltar por toda la mesa, alza los brazos empuñados como en señal de victoria. Se parece a esos futbolistas cuando logran meter un gol antes del intermedio.

- Entonces vámonos a clases- Dice Sam agarrando su mochila y caminando hacia la puerta.

Afrodita asiente y corre hacia mi, agarró mi mochila y la abro, él entra rápido y cierra la bastilla desde adentro. Me cuelgo la mochila y me voy con Sam a la escuela.

Punto de vista en tercera persona

Ami había llegado a la escuela, ella y Sam habían acordado que entre clases Afrodita iría con una y luego la otra. Para así no atiborrarlo de información que él tal vez no necesitaría en un futuro cercano, además, conocería más horizontes muy interesantes... Como el diseccionar a una vaca.

Afrodita estaba en la mochila de Sam, ya había estado en dos clases donde estudiaba Ami, ahora estaba con Sam en el laboratorio de la materia de "Biología" y ese día iban a abrir una vaca o más bien... Un estómago y clasificar toda la materia que estaba dentro.

-¡Aquí hay más!- Gritó Sam con el tubo de ensayo.

Dita miraba todo con asco y mareado, el ver sangre, viseras y otros fluidos le causaba asco y ñañaras (Sentir que tu estómago se revuelve) pues jamás creyó ver algo así.

Él quería salir del lugar, estaba seguro que vomitaría. Salió de la mochila sin ser visto, fue a uno de los lavabos a fingir que vomitaba. Ya mejor se reincorporó y miro su alrededor con atención, aparte de los intestinos que estaban en la mesa vio una escultura muy rara y de color negro.

Se acercó a paso lento hasta quedar enfrente de esta, pero como dicen "La curiosidad mató al gato"...

-¡¿Que es eso?!- Gritó alguien asustando a Dita.

Se quedó inmóvil por miedo, ni si quiera se movió o mostró vida aparente... Casi se desmaya.

Sam escucho el grito y fue a su mochila por instinto, al no encontrar a Afrodita sintió un mini ataque cardíaco.

- Ami me va a matar...- Dijo en un susurro.

Vio a lo lejos a una de sus compañeras tocando con un agitador de cristal a una figura que brillaba, ese brillo era de tono dorado... Esperen ¿Dorado?

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