Demian Welling, un millonario Neoyorquino, castaño y ojos verdes. Casado con una modelo desde hace dos años. Anna Bolteri es una bella modelo de 24 años. Morena de ojos marrones, se casó con Demian no conforme con sus padres, aunque a ellos les va m...
Dedico este capítulo a un hermanito que cumple años fran_nikone_. Felicidades y espero que te guste este capítulo. Mil besos para todos mis hermanos y hermanas de WhatsApp, Laurapoza25amairanysantosCristinaBrenesAutora @A tod@s en general.
ÁNGELA
Han pasando dos meses.
Buenos días Blanquita, hoy es un gran día para mí, hoy me darán mi doctorado, podré ejercer medicina y sobre todo la que a mi siempre me ha interesado, neurología. Saber del Alzheimer y por qué sufren tantas personas estas enfermedades. Mi madre se fue a causa de esa maldita enfermedad y la vi consumiéndose por momentos. Podré investigar más y saber si tiene posibilidad alguna que Demian pueda ver. Hemos estado mucho tiempo juntos y me entristece que el no quiera ser valiente y seguir adelante. Varias noches he tenido que salir corriendo para su casa por sus crisis. Su hermano no se separa de él y está muy preocupado de que haga alguna locura.
(....)
Después de la reunión y de tener ya mis cosas bien claras me dirijo a la mansión Welling. Tiene mucha arboleda y un gran muro, cuando me acerco a la verja donde hay cámaras, las puertas se abren de inmediato, ya conocen mi moto y no hace falta ni que me quite el casco. En cuanto llego a la puerta de entrada veo mucho nerviosismo, veo salir a Adrián con los ojos enrojecidos por no haber dormido bien. En cuanto me ve se abraza a mi como un koala as su árbol.
_ ¿Que sucede Adrián? _ Demián ha desaparecido, ha salido solo de la casa y nadie lo ha visto. Mis manos tiemblan, y solo se me ocurre buscar como ellos lo hacen.
_ ¿Hay algún lago cerca de aquí?
Adrián me asiente y me dice que me llevará hasta el. _ No, solo dime por donde y yo misma iré. Me lo indica y me dispongo a salir, cuando unas manos me sujetan y veo que me extiende en las manos una linterna, pues está oscureciendo y por esa parte no hay luces. Solo se escuchan los sonidos de los animales y de mis pisadas.
_ ¡Demian!, Demian por favor, estoy asustada, no conozco este sitio y solo puedo ver árboles. Al fondo hay un claro, piso algo que me hace caer y me doy un golpe en la cabeza que me hace marearme por un tiempo, abro los ojos y lo veo. No se como lo hizo pero me arrastró hasta el agua y me moja la cabeza con... ¿Su camisa? _ ¿Que haces aquí, Ángela? _ ¿Como has sabido que era yo? _ Conozco tus andares y tu olor es inconfundible. _ Huelo mal, y por eso me conociste. Ríe con mi sarcasmo y me acerca a su cuerpo. Está frío, puesto que ha mojado su camisa para ponérmela en la cabeza. Me levanto muy despacio y me acerco para darle calor. Se siente muy bien así. _ ¿Estás bien? Su aliento lo tengo frente a mi boca. Tengo ganas de besarlo, pero creo que se apartará de mi. Sus ojos verdes me traen loca, el acaricia mi espalda con su mano y me acerca más a él. La otra mano busca mi cara y sus dedos mi boca, doy un beso en sus dedos . La mano que tenía en mi espalda ahora me atrae más a él y su boca choca con la mía y me da un beso, no un beso cualquiera, si no el beso más tierno que nunca me han dado.
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Nos levantamos y nos acercamos a una cabaña que tienen ellos instalada, no la usa nadie, pero servirá para poder pasar la noche de frío. _ Sabes muy bien, me gustan tus labios y tu lengua. _ Tu sabes a menta y tu lengua también me gusta. _ Creo que será la mejor noche que he pasado en mucho tiempo, me encantaría verte, aunque sentirte no está tan mal. Busco una manta y la tiro sobre una alfombra frente a una chimenea, Le digo que se espere ahí sentado mientras Le acomodo y pongo algo de fuego. Cuando ya está todo listo Le acerco mi mano para que me siga, nos sentamos frente a la chimenea y Le comunico que ya soy doctora y que no pararé hasta que sus ojos vuelvan a ver la luz del día.
_ Solo necesito ver tus ojos, pero ahora quiero sentirte mía. Sus palabras me hacen mojar mis braguitas. Sus ojos verdes tan de cerca me intimidan tanto que no me controlo, el me coge de la camisa y la va desabrochando, yo me dirijo a sus pantalones, y los desabrocho. Con mucha sensibilidad me quita la blusa y me deja en sostén. Me acaricia por todo el cuerpo. Me quita el sostén y me quedo desnuda de cintura para arriba, me quito los pantalones y hago lo mismo con el. _ Como me gustaría ver tu cuerpo desnudo, Ángela. _ No lo verás, pero si lo podrás tener solo para ti. Estamos desnudo los dos, yo me siento encima pero el no me deja, me pone la espada a la manta y comienza a saborear cada parte de mi cuerpo, comienza por el cuello y baja hasta mis senos, saborea mis pezones y me arqueo de la sensación que me da. Mientras Le acaricio su espalda, la que tiene bien trabajada y me acerco con mis manos hasta sus pectorales. Estamos tirados en la manta delante de chimenea se acerca desde el borde de mis braguitas hasta otra vez me da un dulce beso
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Mil sensaciones pasan por mi cuerpo, me baja las braguitas con mucha delicadeza y se posiciona justo encima, siento su ereccion en mi centro y baja con mucha sutileza, doy un respingo.
_ Estás muy prieta, pero también te digo que no voy a hacerte daño, ¿Es tu primera vez? _ Que vergüenza contigo, sí. Es la primera vez que me hacen el amor. Nunca estuve con nadie. Dolor en mi bajo vientre, se convirtió en puro placer en pocos segundos. Demian sabe muy bien lo que hace hasta que siento como el suelta su simiente dentro de mí. Sale muy despacio de mí y se queda besando mis muslos y eso hace que estalle de éxtasis. Los dos nos quedamos dormidos uno junto al otro. Despierto y lo veo a mi lado tan tranquilo y a mi me parece un sueño tenerlo conmigo. Me muevo para poder ir al baño para lavarme y darme una ducha, digo si se puede. No conozco la cabaña y no se lo que tienen aquí dentro. Se mueve cuando no me siente a su lado.
_ Ángela, dime que no ha sido un sueño, dímelo. _ No, ha sido la mejor noche de mi vida. Y tu eres el único culpable. Sonríe y me doy cuenta de que no hemos llamado para que estuvieran tranquilos. _ ¿Te pasa algo?. _ Si, es que no llamamos y se preocuparan por nosotros. _ Verdad, debemos llamar. Pero no digas donde estamos. Quiero disfrutar más de tus besos y de tu cuerpo.