2.3 Los Dias De Las Cajas De Carton

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Diviertete mucho. Estos son los buenos viejos dias que vas a extrañar en los años por venir.

-Anonimo.

Las cajas de carton jugaron un papel significativo en mi infancia. No me interpretes mal; los jueguetes tambien fueron maravillosos, pero nada podia superar a una caja de carton, junto con algunos niños, en especial mis dos mejores amigos y vecinos, Chris y Nick, dos hermanos que vivian a trea cuadras de distancia.

El verano siempre fue la espoca ideal para tener una caja de carton. Los largos y lentos dias ofrecian tiempo suficiente para experimentar la verdadera esencia de una caja y para relacionarnos a fondo con ella. Sin embargo, para relacionarnos con una caja, primero teniamos que encontrarla. Los tres amigos nos encaramabamos en la parte trasera del camion de mis padres, peleandonos antes un poco por sentarnos sobre los cotizados neumaticos, y despues cantabamos la cancion de " Na Na Na" (cualquier cancion de la que somo supieramos algunas palabras pero que de cualquier modo cantabamos) mientras esperabamos a que mi mama encontrara sus llaves. A ninguno se nos ocurriria sugerir viajar adelante; eso era para los timoratos.

Un dia, despues de un sinnumero de canciones de "Na Na Na", mama nos llevo a un lugar donde habia cajas, ¡y ahi estaba! La caja mas hermosa que jamas hubiesemos visto. Era una caja de refrigerador, definitivamente la mejor. Las cajas de refrigerador podian viajar a lugares muchos mejores que cualquier otra caja, y su capacidad de ser cualquier cosa era sencillamente fenomenal. La muebleria y sala de exhibicion habia arrojado este glorioso obsequio fuera de sus puertas traseras como algo inutil. Llegamos junto q tiempo para reacatarla de las nefastas quijadas de un camion de basura.

Estabamos a la expectativa mientras veiamos a mama deslizar la caja dentro de la parte posterios del camion. Nos deslizamos dentro de la caja para el regreso a casa, protegidos del viento y de los insectos, los que parecian atinarle a nuestras gargantas de algun "Na".

El regreso al vecindario fue una experiencia que nos hizo sentir que eramos lo maximo. Todos los que estaban afuera pudieron vernos, y pronto se corrio la voz de qie Nick, Chris y Eva poseian una caja de refrigerador. Sabes, quien poseia una caja de refrigerador adquiria una posicion muy especial. Nos volveriamos leyenda. Llevariamos a nuestra caja a donde ningun niño hubiera ido antes.

Descargamos nuestro tesoro y lo llevamos con mucho cuidado al patio trasero. Chris dijo que deberíamos guardar unos minutos de silencio para reflexionar, y entonces podríamos discutir nuestras ideas respecto a esta magnífica adquisición. Lo hicimos unos cinco segundos, y de pronto, como si una fuerza desconocida hubiera activado nuestras cuerdas vocales, empezamos a cantar

Na na na na
Nuestra caja es excelente
Na na na
¡¡Y nosotros también!!

Está bien, era una canción muy corta, pero era hermosa. Y estoy segura de que conmovió el corazón de todo aquel afortunado que la escuchó.

Llegó el momento de tomar una decisión. "Vamos a Zo en nuestra caja", exclamé.
"¿Quien?", Nick y Chris me miraron con extrañeza.
"A dónde ir o a dónde no, esa es la cuestión", respondí.
Nick me dijo que no tenía sentido lo que decía, y les expliqué que era muy  sencillo, que el y Chris solo necesitaban aprender a pensar al revés. Chris decidió que Nick tenía razón, que lo que yo decía no tenía sentido.

"Zo es Oz al revés, ignorantes. Vamos a ir a Zo y vamos a hacer todo lo que Dorothy hace en Oz, pero al revés." Se lo dije gritando porque sabía que ellos tenían más capacidad de la que estaban usando.

Chris me miró primero, y después a la caja, al comprender mi brillante idea. Yo me preguntaba si Chris y Nick estarían seriamente enfermos porque ya deberían de saber para entonces, por nuestras anteriores experiencias, que las cajas (especialmente ésta) podían llevarnos a cualquier parte. Podíamos ser o hacer lo que quisiéramos por la fuerza de la Todopoderosa caja de refrigerador. Y también en eso podíamos ir al revés.

Sopa De Pollo Para El Alma Del AdolescenteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora