Llego un momento en el que dormí en medio de mi llanto en los brazos de Jack, pero las pesadillas no tardaron en aparecer.
Imágenes de la muerte de mi padre me atormentaban, el día de la muerte de Jack volvió a aparecer en mi mente y reviví la dolorosa muerte de mi madre, una voz baja acompañaba todos aquellos recuerdos amargos.
-Todo aquel que te conoce acaba muerto Valerie, estás maldita.
Desperté entre lágrimas de nuevo en uno de los camarotes. Estaba completamente sola y todo estaba oscuro, me levanté de aquella cama intentado controlar mis sollozos y mis temblores y salí en dirección al único lugar en el que me sentiría segura en estos momentos. Una vez delante de aquella puerta llamé y esperé hasta que la abrieron.
Jack abrió sus ojos al verme en aquel estado, temblorosa y entre sollozos y no dudó en abrazarme mientras ingresábamos en su camarote. Aquella habitación me traía muchísimos recuerdos, todo olía a él.
-Valerie, por Dios, ¿qué te ocurre?. Jack me acunaba entre sus brazos mientras me apoyaba en la enorme cama roja.
-Estoy maldita Jack. Como pude le contesté entre sollozos.
-¿Pero qué dices?, no estás maldita pequeña.
-Todo el mundo que me conoce muere Jack, mi madre, mi padre , incluso tú. No podía controlar mi llanto y Jack intentaba calmarme mientras tocaba delicadamente mi pelo.
-Valerie, estoy aquí, contigo. Elevó mi barbilla haciendo que fijase mi vista en él. –No estoy muerto y no pienso irme a ningún lado, ¿vale?. No detuvo en ningún momento su toque en mi cabello. –Lo de tus padres fue un horrible desenlace, pero tú no eres la culpable de nada, quítate esa tontería de que estás maldita. Dirigió su mano hacia mi mejilla. –Tú eres Valerie Swann, la chica más hermosa ,terca, valiente y decidida que he conocido en toda mi vida. Besó delicadamente mis labios y mis sollozos poco a poco se detuvieron. –Le haremos pagar a Beckett por todo, te lo prometo. Me acostó sobre la cama mientras besaba mi frente y encontré por fin la calma. – Ahora descansa, encanto. Aquella palabra la dijo con una sonrisa en su boca, cuando intentó levantarse lo sujeté por la camisa.
-No te vayas, quédate conmigo. Jack me observó dulcemente antes de acostarte junto a mi y estrecharme entre sus brazos. –Gracias. Poco a poco el sueño me fue venciendo.
-Estás volviéndome loco pequeña. Noté la sonrisa en el rostro de Jack ante de caer dormida.
Cuando desperté Jack me observaba desde su escritorio.
-Buenos días Val.
-Buenos días. Me desperecé suavemente antes de levantarme de la cómoda cama.
-¿Te encuentras mejor?. Recordé mi ataque de pánico de anoche y la voz de mis pesadillas y un escalofrío recorrió todo mi cuerpo pero me calme al instante al notar la mano de Jack sobre la mía. -¿Val?.
-Sí, no te preocupes. Sonreí en su dirección. –Gracias Jack. Lo abrazé mientras el deslizaba su mano por toda mi espalda.
-Me preocupaste mucho Val. Junté nuestras miradas.
-Lo siento.
-A partir de ahora, dormirás siempre conmigo. Aquello me tomó por sorpresa y Jack lo notó y sonrió de forma pícara. –Quiero asegurarme de que no te ocurre nada como lo de ayer otra vez, aunque si tu quieres también podemos hacer otras cosas, puedo ser muy creativo, encanto. Le golpeé el hombro suavemente mientras me separaba completamente roja.
-¡Jack!. Él se rió por mi reacción mientras sujetaba mi cintura.
-Yo solo digo, soy un hombre Valerie, tengo necesidades. Jack no paraba de reír mientras yo me colocaba las botas sonrojada.
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Piratas del Caribe: En el fin del mundo.
FanfictionHabía una cosa que Valerie Swann tenía clara y era que tenía que traer de vuelta a Jack costara lo que costara. Aunque eso implicase viajar con el pirata que tiempo atrás atentó contra sus vidas. Valerie es consciente de los peligros de esta aventur...