Capitulo 24: Pero me hacia falta escuchar de nuevo tu respiración

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Una vez que el entrenamiento termino Paulo estaba dispuesto a hablar con Giuliana de nuevo,

sin embargo ella se marchó antes de que pudiera hacerlo así que el solo decidió irse junto a Gonzalo su amigo le había ofrecido salir con el a algún lado, quizá a tomarse unos tragos o simplemente conversar por alguna razón Gonzalo tenia bastantes preguntas que hacerle.

Gonzalo: Y bien, porque te esfuerzas tanto en hacer que Giuliana te perdone? – Pregunto curiosamente bebiendo de su trago

Paulo; Es mi amiga Gonzalo, no me gusta estar mal con ella lo sabes – Contesto

Gonzalo: Los amigos no llevan rosas, pidiendo perdón como un perro moribundo vamos paulo sé que hay algo más allí - Dijo intentando sacarle más información a su amigo.

Paulo; No te equivoques Gonzalo, son solo alucinaciones tuyas yo aprecio mucho a Giuliana pero no en la manera en la que tu lo ves – Contesto.

Gonzalo no quiso seguirle preguntando más nada, aunque sabía perfectamente que su amigo mentía muy en el fondo él sabía que tras tantas disculpas tenía que haber otro motivo para afincarse tanto para ganarse el perdón de la castaña que todavía no quisiera decírselo, no era del todo cierto las razones por las que paulo insistía tanto con las disculpas.

Gonzalo: Entonces que harás? - Pregunto

Paulo: Aún no lo sé, sabes que Giuliana es bastante terca como para perdonarme a la primera - Contestó

Gonzalo: Si creo que vas a tener que esforzarte algo más que un poco, a pesar de que no son nada en cuanto a lo amoroso según tú son amigos y déjame decirte que si para eso la quieres ella es una de las mejores amistades que podrías tener - Contestó

Y en eso Gonzalo tenía razón; a pesar de su carácter Giuliana era una persona especial y eso Paulo lo sabía.

Paulo: tú qué consideras que debería hacer? - Le pregunto una ves más.

Gonzalo: Pues pedirle perdón, cuantas veces sea necesario y no es necesario ningún obsequio pídele perdón así ella no quiera oírte y si sólo quieres hacerlo una sola ves está bien, en algún momento se le pasará el enojo - Contestó

Paulo: Gracias por los consejos Pipita, en realidad no se porque sigues hablándome después de todas las mentes que me hice con Giuliana - Le dijo el cordobés observándolo.

Gonzalo: A pesar de que fuiste un completo imbecil también eres mi amigo, y no puedo evitar querer ayudarte - Respondió a su pregunta.

Después de dos rondas más que tragos de tragos Gonzalo decidió despedirse de Paulo, dejándolo solo en aquel bar con un vaso de whisky en mano pensando en que hacer para conseguir perdone que ya no te Ili después de dos rondas más que tragos de tragos Gonzalo decidió despedirse de Paulo, dejándolo solo en el que el bar con un vaso de whisky en mano pensando en que hacer para conseguir el el perdón de Giuliana.

Último momento el cordobés se decidió a ir al edificio donde residía la joven para pedirle disculpas una vez más, claro que tenía unos tragos encima pero aún así continuaba consiente de lo que hacía y decía. Se subió a su auto, después de pagar para manejar hasta aquel. Edificio una ves que llegó tocó la puerta repetidamente hasta que una Giuliana bastante despeinada le abrió.

Giuliana: que se supone que haces aquí?-Dijo confundida.

Paulo:  Sabes perfectamente a lo que vengo - Contestó al instante.

Giuliana: no me digas que viniste con tus falsas disculpas otra vez - Respondió amargadamente.

Paulo: Por qué eres tan cruel conmigo? - Pregunto

Me va a extrañar Donde viven las historias. Descúbrelo ahora