Capitulo 14: Confusión

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Narra (Escritora):

Una ves que Paulo llegó a casa, Antonella lo esperaba con los brazos cruzados y bastante molesta.

Antonella: Y bien vas a decirme que hacías con ella? - Pregunto

Paulo: Bueno Antonella yo no puedo mentir sabes, no soy una persona deshonesta. Y si estoy contigo es porque quise, y porque aquí te quiero a pesar de que hayamos peleado. Había peleado contigo y me sentía molesto y perdido así que si decidí ir a su casa necesitaba hablar con alguien ella simplemente me abrió la puerta me dio café y galletas a pesar de que quiso que me fuera yo no quise no me sentía bien para volver. Y a parte no hicimos más nada, solo me dormí ella se acostó y lo del abrazo fue un impulso - Conteste

Antonella: Tan mal te sentías como para irte con ella? En ves de venir e intentar resolver las cosas conmigo - Contestó

Paulo: Si me sentía bastante mal, y no Antonella no iba a venir porque seguro me gritarías terminaría marchándome quien sabe a dónde te molestaría aún más y estoy se pondría todavía peor entre nosotros dos. Dime si quería eso fuese venido de nuevo a pelear para que me digas, que soy un desconsiderado y que solo pienso en mi - Conteste.

Antonella: Sabes que no sería capaz de decir eso - Contestó

Paulo: Vamos anto seguro que si, nadie mide sus palabras cuando esta molesto si? Y precisamente, no estamos lo suficientemente bien como para decir que lo nuestro es Perfecto - Conteste

Antonella: Que quieres decir con todo esto? Paulo - Pregunto

Paulo: Que nuestra relación no es tan perfecta como todos dicen, tenemos nuestras diferencias y a veces decimos cosas que no queremos decir. Y quizá no por maldad, el enojo nos consume, ademas estoy seguro que no estás lo suficientemente feliz conmigo - Contestó

Antonella: Tengo que empezar a mejorar mi actitud cierto, no podemos estar peleando cada ves que me moleste por una estupidez además guiliana ya es alguien del pasado no debería estarme preocupando tanto por ella - Contestó abrazándolo.

Paulo decidió no responder en aquella ocasión porque a parte de que lo Antonella había dicho no le había cuadrado mucho, no estaba muy seguro de sus palabras. Una persona no podía cambiar tan drásticamente o si? Habría que averiguarlo después de esto.

Mientras estos dos se abrazaban Giuliana se encontraba más confundida. A causa de los sucesos de la noche anterior, estuvieron cerca de darse un beso esta mañana, como era posible? Se sentía culpable ante eso, quería alejarse Paulo pero cómo hacerlo? Era el amor de su vida, y esas cosas no se olvidaban tan rápido.

De pronto recibió una llamada alejándola completamente de sus pensamientos por el sonido. En grande en la pantalla decía el nombre de su jefe lo cual le pareció bastante raro.

*LLAMADA*

Si diga - Hablo al instante

Giuliana necesito hablar contigo - Contestaron

Para que? No me vayas a decir que me metí en problemas justamente ahora - Respondí

Solo ven por favor, necesitamos hablar de algo importante así que por favor ven rápido a mi oficina - Contestó

*FIN DE LA LLAMADA*

Eso lo dejo bastante confundida aunque igualmente decidió ir al estadio a ver qué sucedía, una ves que llegó el estadio se encontraba bastante vacío aunque se sabía que su jefe estaba allí por el ruido que provenía de su oficina.

Toco la puerta dos veces, y se escuchó un pase por parte del hombre. A lo que la chica entró, saludándolo y después tomando asiento.

Giuliana: Que quería decirme? - Pregunto

Allegri: Señorita Giuliana, la llame aquí para hacerle simplemente una pregunta...Que es lo que sucede con Paulo? Ustedes están juntos? O planean estarlo? - Pregunto directamente

Giuliana: Que? Primero que todo Paulo es mi ex, y no pensamos estar juntos. El tiene su novia y yo simplemente no estoy con nadie y eso está bien, entre nosotros no pasa nada. - Conteste sería

Allegri: Y por qué fue a su departamento entonces? - Pregunto

Giuliana: Mire si él fue allí, fue porque se le dio la gana no porque yo sé lo pedí. Y no hicimos absolutamente nada de que piensa, si quiere pregúnteselo a él y no se crea los chismes qué hay en la  Web que bastante a ellos les gusta meterse en la vida de los otros - Contestó

Allegri: Está bien cálmese, yo solo le pregunto porque muchas personas prefieren a Antonella, como su novia mientras que otras te prefieren a ti - Contestó

Giuliana: Bueno quien sabrá porque - Respondió

Allegri: Habla con Paulo, Giuliana, alguna respuesta tiene que a ver - Respondió

Giuliana simplemente asintió, y se retiró sin decir absolutamente nada más.

Al salir de allí se topó con él antes nombrado, sus ojos la miraban con diversión al ver su cara de confusión.

Paulo: Parece que nos quieren juntos e nuevo - Contestó

Giuliana: También te llamo, para hablar de eso...- Dijo

Paulo: Lógicamente que si. Supongo que cuando fui a tu apartamento eso se regó - Contestó

Giuliana: debe ser eso - Dijo caminando hacia las gradas para sentarse.

Paulo: Me acuerdo, cuando venías a mis entrenamientos. Todos te conocían con la debilidad de la joya, no te pérdidas ni uno solo - Contestó

Giuliana: Si era lindo ver cómo te apasionaba tanto lo que hacías - Contestó

Paulo: Aún me apasiona, me acuerdo cuando así fuera un partido amistoso Te emocionabas, y gritabas como una niña de cuatro años - Dijo sonriendo

Giuliana: Nunca pensé que podría gritar tan fuerte - Contesto sonriendo

El joven de ojos verdes la miro por unos segundos, y luego hablo.

Paulo: Me equivoque Giuliana - Contestó

Giuliana: En que? - Pregunto con cierta curiosidad.

Paulo: En que en algún momento de mi vida, no me iba a parecer cautivadora esa sonrisa, Federico tiene suerte entonces - Contestó haciendo reír a la castaña

Giuliana: No seas payaso - Contestó aún entre risas.

Paulo: Entonces sí te gustan los chistes malos...- Contestó acercándose a la castaña al punto de tenerla tan cerca que podía ver sus ojos cafés con solo pestañear.

La castaña tenía ganas de sonrisa ante aquella cercanía, mas no lo haría. Pues sentía una ves más que lo que hacía no estaba correcto, y nuevamente se separó.

Giuliana: Debo irme, te veré después - Contestó levantándose de donde yacía sentada para después despedirse del  argentino  con un sutil abrazo.

Odiaba tenerlo tan cerca, pero no podía tenerlo lejos.

Una ves que salió del estadio se dispuso a caminar, sin apuro alguno disfrutando de las calles perdida entre sus pensamientos y entre todos los acontecimientos de estos días. Algo que llamo su atención al momento  de mirar por una vitrina, de un restaurante.

Pudo notar a Federico y Antonella conversando en una de las mesas, sin percatarse de su presencia.  Que estaba pasando? Por qué estaban hablando? Todo estaba tan confuso ahora.

Que sabía que algo raro pasaba.

MIS AMORES! ❤️ Arregle el orden de los capítulos, ya que me percaté que estaban un poco desordenados. En fin espero que les guste!

Me va a extrañar Donde viven las historias. Descúbrelo ahora