Naruto asi como todo elemento o caracteres utilizados en este fanfic pertenecen a kishimoto y sus respectivos creadores.
Todos los derecho de fanfic le pertenece a kurai-sho.Capitulo 12: Cuando cubre la niebla
Naruto paseaba por las deterioradas calles de nami no kui (no estoy seguro del nombre si estoy mal háganmelo saber por favor), a donde volteara solo podía ver tristeza y decepción, la mayoría de las personas se refugiaban al verlo pasar, y eso no degustaba nada, cuanto llevaba caminando no tenia idea ala distancia podía ver ocultos entre los callejones a algunos huérfanos en busca de comida, esto le traía tantos recuerdos, quien podía ser tan cruel pero sobretodo quien podía ser tan maldito como para reducir a un hermoso pueblo a algo tan decadente y deprimente.
Camino por quien sabe cuanto tiempo hasta que al fin entro en una vieja y algo deteriorada tienda de comestibles, no había mucho que ver unas cuantas latas por aquí y por allá unas pocas manzanas quizá algo de pan en un anaquel pero era todo no había mas, el dueño un hombre mayor de cabello canoso y rostro arrugado miro al rubio y abrió los ojos de temor
-por favor… ya les di todo lo que tenia ya no me queda nada no me haga daño- dijo suplicante mientras cerraba los ojos y esperaba el golpe de la espada cuanto paso no estuvo seguro.
Finalmente abrió los ojos solo para ver sus anaqueles vacíos, pensó que al ya no tener dinero se habían llevado sus pocas cosas miro decepcionado la barra del mostrador topándose con un pequeño montón de dinero, en la puerta el rubio estaba inmóvil mirando al hombre con una sonrisa eso era quizá 3 veces lo que costaba lo que llevaba, el hombre agradeció con lagrimas en los ojos mientras el rubio salía a la calle, camino despacio hasta llegar al mismo callejón donde un pequeño grupo de niños lo moraba asustados no habían tenido buenas experiencias antes.
Había algo extraño en esos raros ojos se veían inquietantes pero la forma en que los miraba les decía que confiaran en el, una pequeña de no mas de 6 años camino hasta el y se le quedo mirando el rubio sonrío y le dio una manzana la niña sin dudarlo la tomo y comenzó a comerla de inmediato los otros corrieron hacia el rubio quien apenas completo para todos, con la promesa de tratar de conseguirles mas y volver a jugar con ellos volvía a la residencia de Tazuna a tiempo para la cena
-¿Dónde te has metido todo el día Naruto? te perdiste el entrenamiento- dijo una curiosa Yumi mientras se sentaba para cenar
-si es cierto Kakashi_sensei hizo algo genial caminando en un árbol sin usar las manos-le apoyo Jin sonriente casi al punto de que sus dientes brillaran, esto ya había pasado y en esas ocasiones el rubio se preguntaba que clase de pasta de dientes usaba el chico o quizá se los enceraba no tenia idea
-enserio hizo eso- pregunto curioso el rubio a lo que la chica comenzó a contarle la historia
Al parecer había decidido enseñarles control de chakra mientras la aun lastimada Anko cuidaba al constructor, al principio habían sufrido mucho para lograrlo pero al parecer solo Sakura había logrado llegar a la punta ese día mientras que Yumi y Kasumi solo habían llegado a la mitad, el rubio lanzo una mirada discreta a la pelirroja que solo mascullaba algo sobre niñas sin nombre que la ponían en vergüenza y cosas sobre un mal control de chakra heredado de su madre, por su parte Jin apenas estaba como a la cuarta parte del árbol mientras que el Uchiha no había llegado a ese nivel por lo que el moreno estaba para variar molesto en un rincón.
-ya viste baka soy la mejor mujer en control de chakra ni siquiera la princesita puede igualarme- dijo arrogante la pelirosada haciendo a Kasumi mirarla con odio
-sabes yo no estaría tan jactancioso si fuera tu nameraka_chan (lisita)- dijo Naruto atrayendo una mirada iracunda de la pelirosada, - teme_chan podría enojarse si te empiezas a creer mas que el- ahora fue Sasuke quien le lanzo una mirada molesta y Naruto solo sonrío al parecer el Uchiha no estaba de buen humor aunque la verdad nunca lo estaba pero comenzaba a manejar mejor su ira eso significaba que necesitaba un apodo nuevo, ya pensaría en uno.