Memorias de Camila II

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-¿En qué piensas?

Camila se dio cuenta de que estaba recordando uno de los momentos más emotivos de su vida.

La noche ya había llegado y estaban desde hace un buen rato así, sin decirse nada porque no era algo necesario, hasta que a Lauren se le hizo ensordecedor el silencio de Camila.

-¿Ah?

-¿En qué piensas tanto?- reiteró la ojiverde dándole una sonrisa relajada, la castaña le dio otra.

-En Em, específicamente en cuando me dijo mamá por primera vez- le respondió la morena acariciando el cabello de su hija, la cual estaba abrazada a Lauren.

La pelinegra se puso incómoda y la menor se dio cuenta.

-No quise hacerte sentir... Incómoda.

-No, no, sólo no puedo dejar de lamentar haberme perdido tantas cosas.

-Lauren...

-No, Camz, está bien, quiero hacer todo para poder estar en su vida- dijo Lauren con cierta nostalgia.

-Yo pensaba que hoy iba a ser un gran día, pero ya ves cómo hemos terminado.

-También yo, Camila. Pero mañana será otro día nuevo...- la animó la mayor-... Y mañana podemos intentarlo denuevo.

-Eso estaría genial, Lolo. No sé qué haría si ahora no estuvieras aquí...- Camila comenzó a soltar lágrimas silenciosas y aprovechó que estaban en total oscuridad para hacerlo.

No había tenido la instancia de desahogarse. 

-Seguirías haciendo todo excelente, no soy nadie para decirte estas cosas, pero lo has hecho siempre bien, no me necesitas para nada, Camz, eres un ejemplo para esta cosita hermosa de acá- abrazó a Julianne aún más contra sí misma.

-Yo... Tuve tanto miedo de perderla, Lauren- Camila sorbeteó por la nariz- Just... I love her so much and I can' t lose her, after you left I promised myself that I wouldn' t lose anyone else. (Sólo... La amo mucho y no puedo perderla, después de que te fuiste me prometí que no perdería a nadie más).

Lauren tomó la mano de Camila por encima de su hija.

-Nunca pensé que volvería a sentir esa angustia que te deja un nudo en la garganta y te hace sentir ahogada- confesó la pelinegra.

El ambiente no estaba pesado, al parecer les faltaba esta charla a media noche.

-Tienes que contarme más sobre ella- le exigió calmada la de tez pálida.

-Me parece que me estás dando una orden, Jauregui.

-No, es que... Sólo quiero saber todo, lo último que recuerdo fue cuando me hizo pis encima.

A Camila se le pasó rápidamente la tristeza al recordar esa situación tan épica.

Flashback

-No, no,¡Lauren! Así no...

Camila le enseñaba a Lauren a cambiar un pañal, tenían a Emily recostada encima de una manta y a la mayor se le dificultaba todo porque la niña era muy inquieta con ella.

-Esto pasa porque eres la que más tontea con ella- dijo Camila pasándole una toalla húmeda a la niña para limpiarla.

-Conmigo eres muy inquieta, ¿verdad, bebé? Es porque soy la más divertida- le habló Lauren a la bebé, quien le sonrió en respuesta.

Camila la ignoró por completo y rodó los ojos.

-Sabes, mejor tómala.

Lauren tomó a la bebé casi desnuda, porque tenía el body subido.

-Voy a votar el pañal al baño, espera un segundo- dijo la morena y se dirigió a hacer lo que había dicho.

-Jul es una niña muy linda, ¿cierto? Ay, te quiero mucho, sweetie- Lauren le besó la cabecita y la niña babeó un poco su hombro.

-¿Desde cuándo que hay sales de baño en tu baño?- preguntó la castaña entrando a la habitación.

-No te lo había dicho, pero quiero probarlas contigo- le informó Lauren con la bebé en brazos.

La castaña entrecerró los ojos en su dirección, como asusándola de algo.

-¿Qué?

-Esa es su cara de hacer pis...- observó Camila y se acercó a ambas. Lauren puso su cara de pánico y miró a la pequeña, quien estaba despreocupada mirando a su alrededor.

-Dios... ¡Verdad, es su cara de hacer pis!- exclamó entrando en pánico y alejando a la bebé de sí.

-¡No vayas a soltarla!

-¡No la soltaría!

-¡Te conozco!

-¡Hay que llevarla al baño!

Las dos adultas se apresuraron a llevarla al baño.

-¡Se va a hacer!- alertó Camila.

-¡No, no! ¡Abre el puto...

Demasiado tarde.

Lauren sintió una humedad calentita en su blusa y un líquido recorriéndole el torso.

Camila no supo si reírse o no, pero al final terminó lanzando carcajadas algo reprimidas al ver la cara de la otra mujer.

-Ahora es una mala niña- dijo la pelinegra mirando  a la ojiazul.

-No la culpes- la defendió la morena- Dámela- enseguida Lauren le pasó a Em y siguió a Camila de vuelta a la pieza.

Volvió a dejar a la infante encima de la manta para terminar de cambiarla.

-No le hagas, caso, Em, Lauren es una tonta, debió haberte cambiado el pañal más rápido- dijo tratando de provocar a la mayor, que miraba con los brazos cruzados la escena.

-¿Osea que me lo merecía y ha sido culpa mía?

-Ah- balbuceó la niña cuando Camila ya le cerraba el pañal.

-A ella no le gusta usar esa cosa, se la saco y ¿qué ganó?, que me haga encima, ese no era el trato Jul.

Bajo el mismo techo (Camren)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora