Chapter VI

122 15 1
                                    

‘’Misteriosa chica roba el teléfono al miembro de la banda One Direction, Harry Styles o algo más… El cantante de rizos nos confiesa después de una entrevista que sabe quién es esta chica y que le parece muy divertida, traviesa, atractiva, y que no le importaría volver a quedar con ella después de que le devuelva el teléfono. Al parecer le han robado el corazón a Harry y no solo el teléfono.  ‘’Solo espero que me lo devuelva pronto. De aquí una semana es el aniversario de bodas de mis padres y me gustaría poder felicitarles’’ nos cuenta divertido el chico. ’’

El corazón me palpitaba a mil por hora. Sin dudarlo ni un minuto cogí el teléfono de Harry y llamé al número de Niall. Me levanté de la cama donde estaba sentada y esperé a que alguien contestara desde el otro lado. Al cuarto pitido una voz somnolienta habló:

-¿Diga?- no era Niall, seguro. Esa voz era más grave y además se apreciaba un marcado acento que definitivamente no era irlandés.

-Hola, ¿Está Harry?

-emm… claro, ¿pero sabes que este es el número de Niall, no?

-sí, ¿y tú sabes que no eres Niall verdad? ¿Qué haces con su móvil?- desde el otro lado de la línea se escuchó una carcajada.

- Touché. Ahora mismo busco a Harry, ¿de parte de quién?

-Doris, gracias.

-¡Doris!- di un respingo ante su exclamación- No sabes en el lío en el que te has metido. La prensa no para de preguntar por ti. Vayamos donde vayamos siempre estás allí.  Y si no es un periodista quién saca el tema del robo es el estúpido de Harry recordándonos lo hermosa y divertida que le pareces. Es un auténtico pesado. Chica, ¿Qué le has hecho?

Encogí mis hombros, pero luego me di cuenta de que no podía verme por lo que decidí contestar. Yo ya estaba en frente de mi ventana. Estaba tan nerviosa que necesitaba aire fresco. Desde allí podía ver la parte trasera de mi hogar: el jardín con la mesa de plástico donde mi madre solía poner flores todos los sábados, la piscina y la barbacoa donde Ben invitaba a comer a sus compañeros de trabajo algunos fines de semana. Daba la casualidad que ninguno de sus compañeros tenían hijas de mi edad, solo niños pequeños o alguno un par de años mayor que yo pero que nunca se había dignado a venir. 

-Además de cogerle el teléfono, nada en absoluto.

-Liam, ¿con quién hablas?- Preguntó Niall desde la otra línea. Tenía la voz agotada.          ‘’ ¿habrán dormido esa noche?’’ me preguntaba mientras continuaba observando el jardín.

-Doris pregunta por Harry. ¿Sabes dónde puede estar?

-¿Quién me llama?-preguntó el chico antes de que le fuese entregado el teléfono. Permanecimos en silencio unos segundos. -¿Diga?

-Harry. Soy Marilyn. ¿Puedes explicarme qué mierdas estás haciendo?- mi voz empezó a adoptar un tono elevado y enfadado. Había dejado ya la ventana de mi habitación para dirigirme a la mesa donde, encima de ésta, había unos cuantos libros y la revista en la que aparecía en portada la entrevista de Harry. -¿Qué es esto de la ‘’ladrona misteriosa que ha cautivado al cantante de One Direction’’- dije recitando exactamente las palabras que tenía en frente de mí.

-Que puedo decirte nena, publicidad de la buena y gratuita. Management no te podrían estar más agradecidos. –la voz ronca de Harry me causaba escalofríos. A pesar de lo arrogante y engreído que podía llegara a ser,  tenía que reconocer que era muy sexy y su voz era hermosa.- Además, ¿Qué más quieres? Eres famosa. Ahora eres la misteriosa chica que trae loco al sexy cantante de la banda más conocida mundialmente.  

-Tu siempre tan humilde, ¿verdad Harry?- rodé los ojos suspirando al mismo tiempo.

-Así te gusto Queenie.- solté una sonora carcajada al mismo tiempo que juraba que Harry tenía una sonrisa muy amplia dibujada en su cara. Seguramente, también, tenía una ceja levantada y ya estaba pensando que estupidez soltarme a continuación.

-Mira, Styles, no me hagas perder el tiempo diciendo idioteces.

-Entonces, ven a perder el tiempo conmigo de otra forma…- su tono pícaro provocó que mi faz se sonrojara y mi pulso empezara a acelerarse. Tragué saliva y sentí como me sudaban las manos. Finalmente, fruncí mi ceño. No caeré en tus jueguecitos Harry, me aseguré a mí misma.

-Eres imbécil.- colgué rápidamente y lancé su móvil a mi cama. Tapé con mis manos enfurecidas mi cara y gruñí. ¿Por qué era tan difícil? Unos golpes suaves en la puerta de mi habitación me sacaron de mis pensamientos. Escondí el teléfono de Harry en unos de los cajones de la ropa interior antes de abrir. Era Kai. Ella llevaba colgada de su hombro la mochila con los libros para estudiar. Le había prometido repasar para el examen de latín de la semana que viene. Me gustaban las lenguas antiguas, como el griego y el latín, y de alguna manera se me daban bastante bien. Kai era más cercana a las ciencias. Le apasionaban la biología, a física y la química, pero no le gustaba admitirlo delante de los demás. ‘’Puedo perder mi reputación. Me tachará de nerd’’ repetía siempre cuando le aseguraba que no pasaba nada que le gustaran las ciencias.

-Tu parata es?- me sonrió. 

The Call- Harry StylesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora