No había dormido en toda la noche. Son las cinco y cuarto de la mañana y mi tía sale a las seis de aquí. No puedo,no puedo quedarme joder, es...es mi padre, y hace mucho que no le veo,joder, yo le echo mucho de menos, y es mi única oportunidad para verle. Así que he decidido hacer la maleta,sí. No me iba a marchar por mucho tiempo, era una semana, y en esa semana vería a mi padre,puede que deprimido, o puede que le vea feliz,pero le veré. Cogí ropa para una semana, zapatos...etc. La terminé, eran las seis menos cuarto. Me puse una camisa de Los Ramones , unos vaqueros y mis Vans negras. Bajé con la maleta y mi tía ya estaba metiendo su maleta en el coche. Se quedó sorprendida al verme bajar.
-¿Qué haces?
+Que me voy contigo,no pienso quedarme aquí mientras mi padre puede recibir visitas.
-Que no Eli,que no puedes venir,tu padre esta para recibir visitas pero al verte se e puede caer el mundo encima con tanto recuerdo y volver a recaer.
+Pues yo lo levantaré. Ya lo hize una vez.
Ella me abrazó. Sabía que era muy importante para mí estar con mi padre.
-Venga anda,sube.
+Muchas gracias tita, de verdad.-Le dí un beso en la mejilla y me monté en el coche. Cuando íbamos a arrancar me acordé.Jesús. Él no sabía nada.
-¡ESPERA TITA NO ARRANQUES! ¡UN MOMENTO!
+¿Qué? ¿Por qué?
-Enseguida vuelvo.
Llamé a Jesús por teléfono, pero comunicaba. Así que me fuí debajo de su ventana:
-¡PRINCESO DESPIERTA! ¡VAMOS LEVANTA!
Se asomó una cabeza por la ventana, era él.
+¿Que hacws gritando a las seis de la mañana?
-¡Corre baja! ¡Que no tengo todo el día!
Bajó enseguida,antes de lo que yo pensaba.
-Mira, voy a faltar una semana ¿vale? Luego te llamo, descansa y besitos.-Y le dí un beso en la mejilla y me merché corriendo.
+¡PERO ESPERA! ¡A DONDE VAS!
-¡Luego te llamo! ¡Adiós!
Me monté en el coche y me puse los cascos, y regresaría a Madrid,mi ciudad tan querida.
Me quedé totalmente dormida, entre lo que no había descansado es noche y lo agotada que estaba,caí rendida.
-Eli,Eli,Eli despierta,que ya hemos llegado.
Ahí estabos,Madrid,mi gran ciudad,la que tantos recuerdos me traía,tanto buenos,como malos,bueno,más malos. Y fuimos directamente a la casa. Mi tía tenía llave y abrió. Joder, era mi casa,otra vez estaba aquí. Dejamos las maletas y decidimos ir a comer algo, ya que en el centro solo se podía visitar por las tardes. Pero,un momento... me acordé de Natalia, no lr había dicho nada de que venía. Como era la hora de comer, mi tía me dejó irme a su casa, y así le daría una sorpresa.
Ding DongAbrió la puerta esa chica morena, de ojos oscuros, con aspecto se recién levantada,pero se le abrieron los ojos al verme.
-¡ELI! ¡E-ERES TU!
Se abalanzó sobre mí a darme un abrazo y miles de besos,dios,como la echaba de menos.
+La misma
-Pe-pero ¡Qué haces aquí!
+Vengo a ver a mi padre,ya sabes,ya le dejan que le hagan visitas.