*Narra Dani*
Las 21:30
Llegué a mi casa después de estar con Mónica. Cada día la quiero más. Le conté todo lo sucedido y bueno, flipó.
Dejé las llaves sobre la mesita de madera de la entrada, y subí a mi cuarto.
Entré y no me esperaba lo sucedido.
Ví a Jesús, en la cama, llorando como nunca lo había hecho y con la almohada por encima de la cabeza.
Me acerqué lentamente a la cama, y me senté a su lado. Le quité la almohada de encima,para poder verle, y nunca le había visto así. Tenía los ojos desgastados de llorar, intentando aclarar la vista, ya que los tenía demasiado húmedos. Las lágrimas caían por su rostro, falleciendo en su boca.
-Ey,¿que te pasa?.-Me digné a hablar.
+Da-dani, déjame s-solo...
-No,venga,arriba, vete a lavarte la cara, a espabilarte, y a llenarte de energía,no te puedo ver así.- Y es verdad, no le puedo ver así,necesitaba ánimos y a alguien que le ayude, y quien mejor que su hermano gemelo.
Le costó hacerlo,pero por fín se lavó la cara, consiguió espabilarse y bueno,podía articular palabra.
-Pues a ver, Carla me dijo de quedar, pero yo tenía cosas que hacer, me dijo que era importante,muy importante, y una amiga, es una amiga y...fui. Y cuando estabamos hablando se lanzó a mi y de pronto apareció Eli...
La hostia.
+¿E-en serio?
-Totalmente en serio.
+Hostia... y... ¿qué vas a hacer?
-No lo sé, Dani, no lo sé, no quiere hablarme, me ha bloqueado en WhatsApp, y me dijo que no la volviera a hablar en su vida.
+Jesús.-Dije cojiendole de ambos hombros.-Habla con ella. Aunque tengas que remover cielo y tierra para que te escuche, pero vé a buscarla y explicaselo, que fue ell...-Entonces caí.-Hostia, hostia Jesús,por eso Rodrigo se quería quedar con ella a solas, para llevarla allí y que os pillaran así, lo tenía todo planeado.
A Jesús le entraron instintos asesinos contra Rodrigo, pero le tranquilizé, y le conciencé de que tenía que hablarlo con Eli.
*Narra Eli*
Me levanté hecha mierda.
Un malestar inexplicable, un ardor por dentro que me comía, que me desganaba, acompañado de un dolor de cabeza infernal.
No podía ni con mi cuerpo, pero tampoco me iba a pasar ahí el resto de mi vida. Salí y fui al baño. Si por dentro estaba fatal, por fuera estaba horrenda. Me dí una ducha fría,muy fría, de estas que despejan,que se agradecen y se necesitan a veces. Salí y me puse unos pantalones de chandal anchos hasta la rodilla,grises, con una nadadora color azul. A continuación me hize un moño, y ya tenía mejor pinta, pero no quitaba que por dentro siguiera igual de hecha mierda.
Bajé, y mi tía no estaba, la verdad es que fué algo que agradecí.
Aunque mi apetito era nulo, me digné a comerme un croissant, acompañado de un zumo de manzana.
Lo quité y me fui al salón, donde estaba Toño jugando con unas piezas de Lego.
Ya falta poco para que termine el verano, estamos a últimos de agosto, y eso me deprime más aún. Puta vida.
Pensé que mi estado de ánimo no tenía que afectar a mi hermano, el cual ya empezaría el colegio, así que decidí llevarle al parque. Le vestí, peiné y preparé. Yo me peiné mi largo cabello marrón, y me puse mis deportivas. Fuimos al parque y lo normal, estate pendiente la hora que estés en el parque de un crío de tres años sin parar,bueno,nada entretenido. El enano se lo pasó genial, y bueno, si él es feliz,supongo que yo tambien. Ibamos de camino, ya casi llegando a casa, cuando alguien me agarró del brazo.
Me cago en la puta de oros.
Un chico sofocado, al que era el último en el mundo al que me quería encontrar en ese instante me tenía agarrada del brazo y con unos ojos suplicantes.
-E-eli, por favor, déjame explicarte todo.
Le miré con una cara de asco mezclado con odio. Me solté de mala gana y con cierta fuerza y seguí mi camino.
Pero no, no se iba a dar por vencido.
+Tio, Eli, no seas tan cabezota, por favor. Mira, hacemos una cosa, te explico, y si quieres, cuando termine, o pasas de mi y no me vuelves a habalr o... o bueno, ya lo que sea.
-¡Que no, cojones, sueltame el puto brazo!.-Dije elevando la voz y soltandome.
+¡Eli, tio, que me dejes explicartelo!
-¡Que no quiero que me expliques nada! ¿Qué me vas a explicar? ¿Que lo mucho que tenías que hacer para no quedar conmigo era ir a liarte con esa zorra? ¡Paso!
Cada palabra que decía me dolía más, las lágrimas querían salir de mis ojos,pero no,esta vez no lo pienso permitir. Le miraba, y era como si quisiera pegarle un tiro, pero a la vez pararlo con mi pecho. No sé si me entendéis.
-¡PERO ELI QUE FUÉ ELLA!
+Claro, te obligó ¿no? Jesús, que dos no hacen nada si uno no quiere, y punto. Fin, déjame.
Esas palabras le dolieron más que nunca,lo sé por su expresión. Le conocía demasiado bien, o creía conocerle.
-E-entonces... ¿esto es un adiós?
+S-si... qu-que seas muy feliz.
Él no pudo articular palabra, y lo único que pudo hacer es soltar una lágrima, la cual caía por su rostro.
No podía más con esta tensión, era superior a mí. Me volví a mi casa con Toño, y llegaba la hora de comer. Pasó el día, y estaba fatal. No tenía ganas de comer, no tenía ganas de salir, y no tenía ganas de vivir.
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Chicaaaaaas, no me matéis. Siento no haber subido capítulo estos días, no he podido y bueno, aquí lo tenéis. Os informo de que el capítulo final se aproxima y le queda nada a esta historia. Gracias por leerme, y que no se os olvide comentar y dar mg. BESITOOOS.