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Hace unas semanas que me echaron de mi trabajo por un error que ni yo misma había cometido.
El imbécil de Peter me echo la culpa de que unos gilipollas empezaran a discutir sobre quien era mejor en la WWE y allí empezó la pelea.
¿Y por qué Peter me echa la culpa? Porque supuestamente yo tenía que mantener todo controlado cuando ni siquiera estaba en mi turno. El muy carbón estaba de turno y me echo la culpa y yo furiosa de lo que estaba empecé a gritarle y le estampe la comida en la cara.
Y desde entonces llevo buscando trabajo. Hoy justamente tengo una entrevista con el gran multimillonario Tony Stark. No es que vaya a tener un gran puesto en su empresa pero al menos será, algo.
Empiezo a recoger mis cosas y todo lo que pueda necesitar para la entrevista. Me acerco a mirar por la venta para mi mala suerte el cielo está lleno de nubes grises y otras negras, mi vida va de mal en peor, hoy será divertido andar por la lluvia, ni siquiera tengo para comprarme un paraguas.
Termino de recoger todo, cojo mis llaves, que por cierto tiene el peluche de Winnie The Poo que es precioso, y cierro con llave el departamento.
Cuando me doy la vuelta me encuentro con mi vecino y súper soldado el Capitán América, Steve Roger.
-Steve, ¡¡¡buenos días!!! - Digo feliz al verle.- Hace semanas que no te veo...
-Jejeje.... he estado un poco, ya sabes misiones y eso.- Dice resacándose la nuca.- ¿Has... has pensado lo que te propuse?
Cundo Steve se entero de que me habían echado, en las últimas semanas no ha dejado de insistir de que si tengo problemas por conseguir trabajo que no le importaría ayudarme en cualquier cosa que necesitara.
Lo que más me gusta de Steve, no es que sea el Capitán América, es su gran corazón por ayudar a cualquiera sin necesidad de decírselo o sin que necesites ayuda realmente, le hace ser muy atractivo, hoy en día no se suelen encontrar hombres así.
-Steve, de verdad, estoy bien.- Le sonrío para tranquilizarle.- He encontrado trabajo, más o menos voy a una entrevista.
-¿De verdad?- Dice feliz y parece feliz de que su vecina y amiga encuentre trabajo o al menos tenga una entrevista.
-Sí, el señor Stark necesita una asistenta para ayudarlo en su laboratorio y ese rollo de secretaria y eso.- Digo feliz.
Al ver la cara de Steve mi corazón empieza a latir con fuerza, tiene una expresión de sorpresa.
-No.... No me lo esperaba.
- ¿Por qué no te lo esperabas?- Le miro con el ceño fruncido y extrañada.
