I need a hero [Aizawa x Lectora x Toshinori]

El agujero en la manzana

Cuando Aizawa decía que era un hombre práctico, no te lo habías tomado tan a pecho como ahora: El edificio donde vivía quedaba a sólo unas pocas cuadras de la escuela U.A, e incluso podías ver parte de la fachada al asomarte por el balcón.

Su apartamento era pequeño, pero ordenado y cómodo. La vista que tenía era maravillosa, y la única decoración que tenía era un par de cuadros y una linda estatuilla del gato de la suerte en su sala.

Sólo hubo un pequeño inconveniente que notaste al terminar de examinarlo: Había una sola cama en todo el lugar, y del tamaño preciso para una persona.

- Tu duerme acá- Dijo Aizawa apenas notó tu expresión de incomodidad al entrar a su dormitorio.

- Pero Shöta, es tu cama

- Yo estoy bien en mi saco de dormir.

- Umm, está bien

- Te dejo para que te pongas cómoda- El pelinegro te dejó para irse a la sala.

Tantas atenciones te tenían un poco abrumada, especialmente considerando que Aizawa no era más que prácticamente un compañero de trabajo que con el que te habías llevado maravillosamente bien...y te atraía mucho, por supuesto.

Mientras te preparabas para ir a dormir, no pudiste evitar pensar en Toshinori.

¿Qué estaría haciendo ahora? ¿Cómo sería si tú y él no hubieran terminado? Probablemente ahora mismo dormirías en su casa en vez de la de Aizawa. Y no habría timidez de tu parte en pedirle que durmiera contigo. Simplemente lo harías, y el aceptaría con una hermosa sonrisa.

Kami-sama sabía que si había algo que necesitabas ahora era dormir abrazando a alguien. No sabías explicarlo, pero sentías que todo lo que te había pasado últimamente te estaba congelando por dentro.

Pero no estaría bien pedírselo a Aizawa. No después de haber terminado otra relación tan recientemente. Y el pelinegro te gustaba muchísimo, pero no sabías si él disfrutaba tu presencia tanto como Toshinori.

Luego de un rato, ya estabas casi lista para irte a dormir.

De pronto, escuchaste un par de golpes en la puerta de la habitación y la abriste para dejar entrar a Aizawa. Te cohibiste un poco al ver que el pelinegro se había quitado su uniforme de héroe y ahora usaba sólo una musculosa blanca con unos pantalones de pijama negros.

- Mañana le contaré al director lo que pasó ¿Vienes conmigo?- Te preguntó mientras se sentaba a tu lado en la cama.

Te quedaste sin saber qué responder. Con toda sinceridad, ahora te provocaba un miedo irracional volver a la escuela.

- Si te sientes más segura aquí está bien- Dijo comprensivamente al notar tu indecisión.

- Preferiría quedarme acá. Al menos por mañana- Contestaste algo avergonzada ante tu cobardía.

- Es entendible- Dijo él con resignación- Te dejo las llaves por si necesitas salir

- Gracias

El pelinegro se levantó para irse.

- Hey, Shöta

Se volteó y te miró, expectante.

"Quédate a dormir conmigo". No, no podías decir eso.

- Muchas gracias por todo, Shöta. No se cómo agradecerte

Sonrió levemente al escucharte y se acercó para palmear tu hombro

- Todo va a estar bien, ya verás- Dijo mirándote cálidamente- Por ahora trata de estar bien

Asentiste tímidamente.

- Buenas noches- Dijo cerrando la puerta suavemente detrás de sí.

Te fuiste a dormir sintiéndote mucho más tranquila. La situación podía ser difícil, pero al menos Aizawa parecía tener toda la voluntad de ayudarte.

Al menos podías decir una cosa: por el momento estabas segura y bien.

Notas al margen:

Eo, eo, eo...(8)

Se extrañaba actualizar.