Una Aventura Con Los Dorados.

Capitulo 41: La Emboscada De La Mandrágora.

Los dorados avanzaban sigilosamente por el bosque para no ser detectados por el enemigo. Después de algunas horas, Dohko abrió la cesta y saco uno de los pastelillos que Yin había hecho para ellos.

Dohko: Esto esta delicioso- dijo comiendo de un bocado el resto del pastelillo- Tienen que probarlos!

Los demas se aceraron, tomaron uno y lo comieron.

Shion: Parece que se esforzó bastante al hacerlos.- miro los detalles del pastelillo en sus manos.

Kardia: Son... buenos en verdad.

Todos disfrutaban los deliciosos bocadillos hasta que un sonido  los alarmo.

Shion: Vayamos a revisar.

Así, los dorados se separaron en busca de algo extraño. Comenzaba a amanecer cuando se reunieron nuevamente.

Dohko: No encontramos nada.

Degel: Nosotros tampoco.

Sisifo: Supongo que fue algún animal...-suspiro- Vayamos al santuario a descansar, ya esta amaneciendo.

Sus compañeros asintieron y se retiraron. Ya en el santuario, cada uno se retiro a su respectiva casa a descansar.

En el coliseo...

Tenma estaba llegando cuando vio a Tay y a Marion estirando.

Tenma: Es muy temprano para entrenar, no lo creen?- bromeo.

Marion: Tal vez, pero iremos a hacer guardia en el bosque con algunos caballeros de plata.

Tenma: Ustedes?

Tay: Si. Mientras reponen energía los caballeros de oro, nosotros ayudaremos.

Tenma: Quiero ir.

Mey: No, tu te quedaras haciendo guardia aquí en el Santuario.

Tenma: Tu también iras?

Mey: Si. Yin se quedara para ayudar.

Tay: -tomo del hombro al chico- Volveremos antes del atardecer. Manténganse alerta.- fue lo ultimo que dijo y el y las otras se marcharon.

Algo decepcionado, Tenma se puso a entrenar un poco hasta que Yato llego corriendo.

Yato: Hey Tenma.

Tenma: Que pasa? Por que la prisa?

Yato: Yin hizo unos panes deliciosas para todos!

Tenma: No entiendo aun.

Yato: Eres tonto o que?- le dio un golpe en la cabeza- Si no nos damos prisa, nos quedaremos sin probarlos!

Tenma: Hubieras empezado por eso, tonto!- dijo sobándose la cabeza- Vamos!

Transcurrió el día en el Santuario y la tarde comenzó a caer. Los dorados se estaban preparando para salir nuevamente a cumplir su deber y Mey y los demás volvían del bosque.

Tenma: Como les a ido?- pregunto el chico.

Mey: Aburrido. No vimos nada fuera de lo común, y ustedes?

Yato: Normal. Entrenamos y vigilamos un poco; aunque a decir verdad comimos bastante bien- froto su estomago con su mano.

Tay: Veo que Yin preparo comida, por cierto, donde esta?

Tenma: Esta aun preparando comida. No ah parado desde entonces.

Tay: Ya veo. Bien, nosotros iremos a descansar un poco.

Un poco mas tarde...

Aldebaran: Ya que estamos todos listos, marchémonos...

Yin: Señor Aldebaran! Espere! - gritaba la chica mientras corría hacia los dorado- Esperen un poco! 

Shion: Yin, que trae de nuevo aquí?

Yin: Yo...- decía agitada- ... les traje... tarta de frutos-les dio la cesta- Los recolecte yo misma.

Dohko:- miro las manos vendadas de la rubia- Gracias, oye, que te ha pasado en las manos?- todos la miraron.

Yin: Que?- miro sus manos- Ah, esto!- las oculto- me eh puesto las vendas solo para entrenar- sonrió nerviosa.

Dohko: Esta bien, supongo.

Sisifo: Tenemos que marcharnos pequeña.

Yin: Oh, esta bien- sonrió y se marcho.

Dohko: Es muy gentil.

Los dorados partieron hacia el bosque. La tarde comenzó a tomar un tono rojizo cuando el sol se estaba ocultando.

Dohko: Vaya!- abrió sorprendido la cesta- De verdad adora a esta niña!

Todos se acercaron y vieron la bella tarta adornada con fresas y otras bayas. Era tan buena, que se termino muy rápido. Justo cuando terminaron, nuevamente un sonido llamo su atención, esta ves el sonido venia desde los arbustos cercanos. Cuando se acercaron a examinarlo, vieron a un hombre arrastrándose.

Hombre: Por favor... ayúdenme- decía débilmente.

Rápidamente Shion y Dohko lo ayudaron a ponerse de pie.

Sisifo: Que es lo que paso?

Hombre: Un espectro, esta atacando mi aldea... tienen que ayudarme... mi familia.

Sisifo: Por donde?

El hombre guió a los dorados muy al este de bosque. Cuando estaban cerca, el cielo ya estaba obscuro, pero una luz naranja se lograba ver no muy lejos e donde estaban. Llegando a la aldea, vieron que esa luz provenía de la aldea que se encontraba ardiendo en llamas. Algunos aldeanos yacían en el suelo sin vida y otros se encontraban gravemente heridos.

?: Veo que recibieron mi invitación.

Aldebaran: Muéstrate.

Fyodor: Me dijeron que unas ratas del Santuario se encontraban en el bosque pero, no crei que fuera cierto.- sonrió.

Shion: Quien eres tu?

Fyodor: Yo soy Fyodor de Mandrágora, y vengo a mostrarles una muestra del poder de mi señor Hades. Grito estridente estrangulador!

Salio esa onda de sonido de su sapuri, moviendo considerablemente a los dorados. Después salieron mas espectros.