A Quien Decidí Amar.®

Capítulo 9 Una tarde de besos y café

—¿No se molestarán tus padres? ya sabes un chico a solas con su hija —dijo por lo bajo a su compañera.

—¿Piensas hacerme algo malo? —preguntó curiosa y sonrojada a su amigo.

—Claro que no, no te haría nada malo ¿Tan poca confianza me tienes de que me acabas de conocer hace apenas una semana? —

—jajaja tal vez «Una semana para mi fueron meses»—

El chico se puso serio tornándose más amable y aceptando la invitación.

—Bueno pero es bajo tu propio riesgo —Aceptó bromeando y mirando a la chica por el rabillo del ojo ofreciéndole pasar —Primero las damas —

—Jajaja que gracioso —dijo ofreciéndole a seguirla, ya dentro de la morada de la chica se produjo un silencio incómodo —emm... ¿Quieres algo de tomar? Agua, té o café lo que gustes. —

—Me gusta el café «de tus ojos» oscuro...Eh digo... —

—Café será entonces, esperame —sonrió la chica a pasos largos a su cocina. Después de preparar todo tomo unas galletas de amaranto con miel junto con la azúcar y el café para vertir al agua caliente de las tazas.

—Está algo caliente, aquí está el café, perdón si es descafeinado pero... Me altera el café puro soluble... —

—Eh no te preocupes está muy bien «hace calor para tomar café en realidad nose que dije» —El joven se preparó su café con nerviosismo ya que Melina no le quitaba el ojo de encima mirando cada cosa que hacía.

—No tengo pan y nos tomaría tiempo comprarlo así que traje estás galletas que apenas compré con mis padres, están ricas —Melina sacaba de una bolsa de celofán unas galletas delgadas de amaranto y miel.

—Oh muchas gracias, nunca había visto este tipo de galletas se ven cool jajaja —bromeaba el de cabellos rizados.

—es por que las compramos en un mercado orgánico, rara vez lo visitamos pero esa vez fue por curiosidad jeje —

—oh... —se produjo otro silencio entre ambos por ya no saber que tema sacar.

—Y...Ángel, tienes novia o algo así, enamorada yo que sé. —preguntó aminorando su ánimo.

—No, la verdad es que no soy un chico de muchas novias, a veces las mujeres son malas malas y peligrosas  jajaja —se carcajeó el muchacho junto con Melina.

—A veces eres muy serio pero otras te pasas de gracioso. —

—Yo no me paso de gracioso lo que pasa es que eres una chica de buen humor y te debo de cuidar — al escuchar esto Melina se sonrojó dedicando una tierna sonrisa a su contrario.

Los jóvenes se miraron por un segundo sin dejar de mirarse acercando su rostro sin llegar a concebir un beso siendo ángel quien se alejaba.

—jajaja sí claro... —avergonzada por lo anterior se dispuso a tener una tarde agradable con aquel chico por el que se moría y deseaba conocer más.

La tarde pasó volando con temas graciosos, casuales, privados de vez en cuando y con un buen ambiente, al caer el atardecer Ángel se dispuso a irse para evitar malos entendidos con los propios vecinos.

—Son las seis veinte creo que lo mejor sería ya irme... Gracias fue una tarde muy linda y agradable, adiós Melina —dijo depositando un dulce beso sobre la mejilla de la mencionada.

—A-adiós e igualmente gracias — tartamudeó la joven que sin dejar de mirar los labios que antes habían impactado en sus mejillas hacía un ademán de despedida al chico que se iba dejando atrás a una mujer enamorada y sonrojada. «Joder que hermoso»

Capítulo corto💎💖