Capítulo 16:
Cena y desastreMi abuela ha elegido un vestido color granate que compré y nunca usé, aún tenía la etiqueta puesta. Cuando lo compré pensaba en un momento romántico con Jhosep, fue hace cuatro meses, esperaba usarlo para nuestro reencuentro en Perú. Por eso no lo he usado, y ahora ella quiere que me lo ponga para cenar con Asier. Es un vestido hermoso, me cautivó en el momento en que se lo vi puesto al maniquí. Verme al espejo hace que un nudo en mi garganta se forme de la nada.
La tela se ajusta a mi torso definiendo mi pecho y cintura, la falda es suelta y cae a mis pies, con una abertura en la pierna derecha que deja entrever parte de mi muslo. A mi abuela le parece el vestido perfecto para la ocasión, yo, en cambio, pienso que es demasiado, sin mencionar los sentimientos que acarrea. El que elegí era uno en tono crema, muy formal. Pero ¿quién la hace cambiar de parecer? En vida fue muy terca y en la muerte lo es aún más.
He tejido mi cabello en una trenza que nace desde el retiro a medio lado, dando vuelta a mitad de mi cabeza para reposar sobre mi hombro izquierdo por debajo de mi pecho. Unos diminutos pendientes brillan en mis orejas. Mi abuela ha hecho que me maquille, pero después de tanto discutir conseguí que aceptara un sencillo delineado en mis ojos con lápiz negro, un poco de máscara de pestañas y un brillo labial. Mis ojos azul verdoso se ven profundos con el delineado.
—¿No crees que te hace falta un poco más de color en el rostro? —sugiere mi abuela.
—El vestido ya es llamativo por sí solo, no necesito más maquillaje —expreso mientras busco el calzado adecuado para el vestido. Me decido por unas sandalias negras de tacón medio. Son las siete y cincuenta y cinco de la noche, ya él debe estar por llegar. Y no tengo idea de cómo voy a abordar el tema de los huesos.
Me doy un último vistazo al espejo antes de abandonar mi habitación. Una vez en la sala tocan la puerta. Mi abuela va inmediatamente y atraviesa la madera para ver de quién se trata. Es desagradable ver la mitad de su cuerpo en mi sala.
—Es tu amigo Lorenzo —dice estando completa frente a mí nuevamente.
Me apresuro a abrirle, no soy la única que saldrá a cenar hoy. Él se queda sorprendido al verme. Se ve muy guapo con su traje clásico en color negro y camisa blanca, en las manos lleva dos corbatas: una de rayas en tonos violetas y la otra en un tono verde esmeralda.
—¿Tú a dónde vas? —pregunta escudriñándome con la mirada.
—Iré a cenar —le quito la corbata de tono verde de la mano. Es la indicada, combina con sus ojos. Además, a Simone le gusta mucho ese color, o por lo menos es lo que he asumido al verla siempre con ese color en su vestuario, así sea una pulsera—. Esta es la que debes usar.
Paso la corbata por su cuello, y dejo que mis dedos trabajen en ajustarla.
—¿Con quién? —pregunta, no muy seguro de querer oír mi respuesta. Seguramente se está imaginando que se trata de Jhosep. Arreglo su cuello, y está listo. Me dispongo a responder cuando alguien más lo hace.
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Médium. Espada de hueso (libro 1)
ParanormalPortada diseñada por @Austrova La perla es una pequeña isla del caribe, uno de los lugares en el mundo con epicentro mágico. El mundo se rige por las leyes humanas en coexistencia con seres portadores de magia: , brujas, psíquicos, médium... Hace oc...