To All The...Boys?... I've Loved Before // (Warmi)

1.

"El beso prohibido. Sabíamos que estaba mal, que estaba prometido a mi hermana. Pero si no era lo que él quería, ¿por qué vino al campo del deseo? Fue el destino quien hizo que nos conociéramos así."

Noté como un cojín me daba -¡Oye!- levanté la cabeza y vi a Aitana en el marco de la puerta. 

-¿Vienes conmigo o qué?-.

Me incorporé de la cama y la miré -Quiero terminar este capítulo- cogí el libro y volví a leer. Pero escuchamos el ruido que estaba haciendo nuestro padre abajo mientras Miriam, nuestra hermana mayor, se unía a Aitana en el marco -¿Deberíamos bajar y ayudarle?-

Miriam suspiró -Quiere hacerlo él pero ayudadme a poner la mesa- se dio la vuelta junto a Aitana mientras bajaban, yo guardé el libro y bajé también. Estábamos llegando a la entrada cuando alguien tocó a la puerta y Roi entró.

-Hola- entró sonriendo dejando los zapatos al lado de la puerta -No llego muy tarde, ¿no? Intentaba meditar pero me he quedado sopa- Yo le miraba embobada desde la escalera hasta que saludó a mi hermana mayor con un beso en los labios devolviéndome a la realidad. Pero sonreí cuando se dio la vuelta a chocarme los cinco.

El resto de la cena nuestro padre se la pasó intentando cortar el pollo que previamente había hecho y que, claramente, no muy bien porque Miriam terminó usando un cuchillo eléctrico.

-No puedo creer que Miriam se vaya a ir de Erasmus y no la veremos hasta vacaciones- Aitana habló cuando Miriam se llevó el pollo para cortarlo.

-Hasta navidad. Nueva York está demasiado lejos para venir a principios de vacaciones- corrigió nuestro padre a mi hermana pequeña.

-Espera- le miré sorprendida -¿No la veremos hasta Navidad?-.

-Mira el lado positivo, Miriam no cogerá el coche todos los días y podrás practicar-

-Se me olvidaba que ahora tendré que ir a la uni con Ana- Aitana rodó los ojos y yo la miré ofendida. Tampoco conducía tan mal, ¿no?

-Eres completamente libre de coger el autobús, Aitana-.

Roi intervino -Yo os puedo llevar. No voy a desaparecer. Vivimos en el mismo barrio-.

-O...yo puedo conducir y si nos para la policía nos cambiamos de sitio rápido-.

-Una gran idea, cariño- se rió mi padre.

-Bueno, dejemos de hablar de esto, también estábamos hablando de aviones- Roi metió la mano en el bolsillo -Lo que me recuerda que tengo una sorpresa- sacó un papel que le dio a Miriam, parecía un billete de avión -Como en vacaciones no vas a venir, iré yo a verte, es un billete de avión, para ir a Nueva York-

Miriam se quedó un poco cortada -¿Ya...ya lo has pagado?-

-Eh...sí, tengo hasta una alerta en google cuando decidiste que te irías allí, ¿por qué?-.

-¿Podemos hablar fuera?- Miriam cogió de la mano a Roi y salieron de la casa.

Creo que debería deciros cosas sobre Roi. Él y Miriam llevaban saliendo dos años, pero antes de que ella supiera de su existencia, era mi mejor amigo. Podía hablar de todo con él. Nos entendíamos. No dejamos de ser amigos cuando empezaron a salir, pero era diferente. No querían dejarme de lado así que me invitaban a todas partes, incluso a sus citas. Intentaban hacerlo como si fuera lo más normal del mundo pero siempre me sentía Loumiere de la Bella y la Bestia. No es que quisiera robarle el novio a mi hermana. Estaba superfeliz por Miriam, se merecía un chico genial como Roi. 

Así que le escribí una carta. No iba a enviarla, era sólo para mi. Para entender cómo me sentía. Pero supongo que trataba sobre todo de cómo a veces me imaginaba que hubiera pasado de haber sabido lo que sentía por él.