Génesis 1: el levantamiento de los no muertos

la búsqueda

Me dirigí hasta mi tía para comentarle lo ocurrido, teníamos que adentrarnos en la ciudad mas cercana, tomar las armas de la armería, inclusive coger los suministros para así estar seguros por un buen tiempo, tendríamos que estar preparados para cuando tuviéramos que volver a salir, así que vacíe mi maleta en el mostrador de la tienda para poder meter toda la munición, armas y suministros que hicieran falta, cuanto mas metiera mejor, también cambié mi ropa me puse otra mas cómoda, aparte la que llevaba en ese momento estaba algo sucia.

Ya con mi bolera azul y mis vaqueros, cogí el arma le recargue el tambor de las balas, me la puse en la cintura entre la cadera y mi pelvis, Hassam antes de que nos fuéramos se acercó a nosotros:

Hassam: -tomar los dos, esto os hará falta a ambos-

Nos dio dos armas blancas exactamente unos cuchillos.

Hassam: -si podéis, usarlo antes que las armas de fuego así os ahorraréis balas, ah esperarse tomar las llaves del furgón-

Caroline: -gracias, cuida de Sam mientras estemos fuera, Roger necesita medicamentos también, la amputación de la pierna le ha hecho enfermar-

Cogimos las cosas, me ajusté la maleta a la espalda, me llevé una botella de agua fresca, algunos snacks y unas barritas energéticas, mi tía antes de ir al furgón, se dirigió al coche a coger su macuto de gimnasio, hay cabrían mas armamento, por el camino un caníbal se le acercó, ella sacó el cuchillo endiñandole una puñalada en seco sobre su cabeza, cogió su macuto, vino hasta el furgón yo veía todo de lejos ya que me quedé al lado del vehículo, abrimos las puertas, nos metimos en el vehículo, yo cogí nuestros macutos, mi tía metió la llave y arrancó el furgón.

Hassam se despedía desde lejos, cogimos la carretera principal hacía la ciudad mas cercana, íbamos pasando los campos de cultivos, cabe destacar que había varios caníbales comiéndose a otro cuerpo, pobre aquel que haya acabado de tan mala forma. Íbamos llegando ya a Vallecas, mi tía paró el furgón en seco me miró:

Caroline: -bajemos iremos a pie, aquí solo hay coches abandonados no podremos pasar-

Cogí los macutos, bajando al instante, saqué mi arma, íbamos avanzando, toda la ciudad estaba desolada no había ni un alma solo cuerpos despedazados, mi duda era que donde estaban todos los caníbales se supone que tendrían que estar cerca de allí.

Todas las tiendas estaban desoladas, estantes tirados, como suponía caos por todas partes, un sonido me llamó la atención, un cuerpo arrastrándose venía hacía mi, tenía aun las piernas unidas al cuerpo, sus vísceras repartidas por el suelo, no parecía que pudiera ponerse en pie, cogí mi puñal clavandoselo en su cráneo, pude escuchar un escalofriante sonido que hacía mi puñal al hundirse en su cabeza, seguíamos mirando y vigilando nuestras espaldas, nuestro objetivo era encontrar la armería, seguíamos buscando sin éxito, se escucharon unos tiros venidos del final de la avenida, despertó nuestra curiosidad, nos íbamos decididos a ver quien podía seguir aun con vida entre tanto caos, cuanto más nos acercábamos mas disparos se escuchaban, gracias a dios eran militares, les hacíamos señas desde la lejanía, eran 3 soldados, ya un poco mas cerca, uno de ellos gritó hacía otro de sus compañeros:

Soldado: -no ves que haces que no disparas tenemos orden de fuego-

En ese instante salimos a correr, comenzaron a tirotearnos, una bala alcanzó la pierna de mi tía, lo mas rápido que pudimos nos acercábamos a un local, los soldados nos seguían.

mi tía cojeaba demasiado, quedamos acorralados, en un minuto una ráfaga de balas rompía los cristales del local, Tumbé a mi tía al instante, todos excepto uno acabaron fritos a balas, este ultimo sobrevivió porque al igual que mi tía se llevó un disparo a la pierna acabando en el suelo, mucha suerte tuvo ese soldado, Tenía un aspecto fuerte de media estatura, barba de pocos días y de pelo rasurado.
La lluvia de balas cesó, una voz ruda e intimidante se escuchó poco después:

????: - no vais a quitarme las armas otros como vosotros lo intentaron y acabaron fatal -

Nicolás: -tía Caroline escuchaste eso, es el armero-

Caroline: -no somos amenaza, dejenos explicarnos.

Me levanté ayudando a mi tía a ponerse en pie:

Caroline: -venimos de parte de un amigo tuyo Hassam, necesitamos armas y suministros para aguantar 3 meses sin tener que salir a las calles devastadas, no nos dispares no venimos con malas intenciones-

???: -¿Hassam sigue vivo? No se hable mas pasar, y coger a ese del suelo, y llamarme Gallardo-

Mi tía se iba apoyando a la pared yo cogí al soldado esta vez a petición de mi tía, entramos en este lugar, Gallardo giró una manivela de encima del mostrador cerrando así la tienda con unas puertas metálicas,
Gallardo era alto robusto ancho, con una gran barba blanca, y iba vestido como un motero.

Entabló una conversación con nosotros:

Gallardo: -donde se encuentra Hassam-

Nicolás: -en una pequeña tienda esta  a un buen camino de aquí-

Gallardo:-en su curro, y tu soldado que insinuabais tu y tus compañeros persiguiéndolos a ellos, sabiendo como esta el mundo por estos momentos-

Soldado:- me llamo Ricardo pirelli, teníamos ordenes de acabar con cualquier ser sea persona normal o caníbal, teníamos que exterminar la ciudad, hay más como nosotros por todas partes, por cierto gracias por salvarme.

Gallardo: -coger las armas llenar las bolsas y salgamos todos de aquí hacia Hassam dejemos a tu tía y volvamos a los almacenes a por suministro-

Ricardo: - ¿¡ que pasará conmigo no me dejéis aquí por favor yo era obligado a acabar con ellos no quería hacerlo?!

Gallardo: -seré humanitario solo por supervivencia si fuera por mi te lanzaba a los caníbales-

Ya con todas las maletas llenas Gallardo abrió una puerta, que daba a la calle lateral, íbamos cargando a ambos a mi tía, yo a Ricardo, íbamos llegando al furgón, empezaron a salir caníbales Gallardo se dirigió hacia todos:

Gallardo: -disparar rápido, aceleremos sino atraeremos mas-

El sonido ensordecedor de las armas me dejaron sin sentido del oído solo podía ver como disparabamos a esos monstruos mientras nos acercábamos al furgón.

Gallardo:- dispara entretenlos mientras los meto en la parte trasera del furgón-

Les seguí disparando a diestro y siniestro, Gallardo una vez cerró la puerta empezó a abrir fuego, montamos el furgón, dimos marcha atrás corriendo seguidamente como pudimos para la tienda de Hassam..

(Buenas lectores quería pediros disculpas por el retraso del capítulo, donde vivo eran vacaciones y decidí relajarme un tiempo os pido disculpas y votar y comenten aportaciones y que os a parecido el capitulo )