Retirada

Cap 18: Prioridades.

Cap 18: Prioridades.

El rubio escocés oia atentamente al rubio menor, podia sentir cierto rencor en su voz... Y eso le entristecía ya que Ronald era uno de sus mas queridos amigos, incluso fue padrino en su boda... Pero al momento de oir que el menor sabia que el estado de William se debia a un intento de suicidio un nudo se le hizo en la garganta, para él no era secreto alguno lo que sentía por cierto azabache.

-Ron... Por favor cálmate, yo se que estas alterado, puedo notarte resentido, pero ahora lo que importa es que William se recupere, y claro a las 5 p.m. vamos a visitarte, ¿Has comido algo?... ¿Te llevo ropa limpia?...- Preguntaba con cierto instinto paternal había el menor.

El rubio-moreno soltó un suspiró, para tratar de calmarse, pero en eso sintió náuseas nuevamente, acerco el bote que le habían dejado una de las enfermeras y termino vomitando, sospecho que no era el alcohol el culpable por completo de su malestar.

-¿¡Ronald!?... ¿Estas bien?... ¿Que pasá?... ¿Estas vomitando?... No me importa que dijas, inmediatamente vamos hacia aya... Y le llamas a Madame Victorique para que te releve, se que quieres estar con él...-

-Eric... No... No pienso hablarle a la madre de William, y estoy bien, es solo cruda... Tome demaciado anoche mientras estaba esperando que saliera del quirófano. No te preocupes, y me gustaria un cambio de ropa, algo casual, tienes copia de las llaves de mi casa sino un portal no hay lio... Este me despido por ahorita, nos vemos al rato.- El menor de los rubios tenía un dolor de cabeza muy fuerte y sus náuseas continuaban, por lo que colgo, al estar ya sin el celular volvió a vomitar una vez mas.

Esto inmediatamente alerto al médico y enfermeras de terapia, por lo que volvieron a examinarlo, le pidieron algúnos laboratorios, al cabo de unos minutos regreso el doctor con él.
- Señor Knox... Me temo que usted no sólo traé deshidratación, trae una infección gastrointestinal fuerte, no ha comido nada bien, ¿Cierto? Bueno se quedara aqui con su pareja, enseguida las enfermeras le cambiarán su suero y administrarán el tratamiento que le he indicado, tiene que descanzar y comer algo, le diré a las enfermeras le pidan algo del departamento de nutrición.-
Y dicho y hecho, al pasar unos minutos las enfermeras habían acomodado a Ronald en el sillon, volviéndolo una cama para que el menor pudiera descanzar y puesto un suero medicamentado y antibiótico aparte.

El rubio-moreno solto un suspiro al verse ahi acostado, miro el suero con algo de tristeza, pero no queria descansar, por lo que jalo la cobija y la puso sobre sus hombros, se apego de nuevo a la camilla de William, se aferro a la mano del mayor mientras se acomodaba, bajaba la cabeza y comenzaba a llorar, cabe destacar que estába preocupado, triste, poco le importaba lo que no fuera William. A ratos acariciaba la mano de William, en otros la besaba, en otros simplemente veia su rostro, ya un par de horas después se levanto un poco y lo beso en los lábios, al menos tenia que aprovechar que el mayor estaba inconciente, ya que pensaba que no tendría otra oportunidad.

**Mientras tanto en Nueva York**

El pelirrojo ya había desperado, y estaba cargando a su pequeño bebé, cantándole una nana para que pudiera calmarse y poder darselo a Ann quien se había levantado al baño.

-Ya... Ya... Mi cielo, todo esta bien, se que tienes hambre, vamos a esperar que mamí salga del baño... ¿Si? Aww ese es mi niño, tranquilo y dulce... ¿Sabes que junto con tu mamí eres lo que mas amo?- La voz de grell era tersa, suave, masculina y sencillamente encantadora, la cual calmaba al pequeño Evan pero este no era el único espectador, Ann ya había salido del baño, por lo que se acerco a Grell y le beso lentamente en los labios, al cual el pelirrojo correspondió con mucho amor, más que siempre.