Capítulo 3

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HOUND


Renée es una mujer de armas tomar, 21 años mis bolas, esta chica me tiene a cien mientras dispara como loca, y si, esta sobre mí. Tengo una vista demasiado tentadora, pero sé que debo concentrarme en la jodida carretera para no terminar matándonos, mientras más lejos del club estamos más inseguro me siento.

Lo peor de esto es que han empezado a aparecer autos de civiles, y yo no daño a gente inocente. La adrenalina me tiene flotando, de una manera bastante agradable, pienso por un momento en Renée, llevo con suerte 5 horas con ella y ya estoy al borde de la muerte. Valiente como la mierda y hermosa como ninguna, de tez morena algo pálida, un cabello ruliento y largo de un color algo parecido al caoba, curvas de infarto y con una fuerza monstruosa. Vamos, fue capaz de pillarme desprevenido y derribarme, y yo peso por lo menos unos 90 kilos de puro músculo. Una curva algo peligrosa para tomar a 150 km me hace volver a meter a Renée dentro del auto, su delicioso culo rebota por tercera vez contra mi entrepierna y me deleito con la sensación.

-Curva cerrada cariño- Ella se aprieta contra mí y cruza sus brazos con mi cuello.

-¿Hound me estás escuchando?-

-¿Qué?-

-Unos segundos antes de que lleguemos al final de la curva presiona el tercer botón, yo me voy a encargar de poner al último auto en posición- Asiento sin entender muy bien sus indicaciones, en el tiempo que llevamos escapando solo he hecho lo que ella me indica, llevo toda mi vida siendo parte del MC, pero nunca había estado en una persecución, menos una de jaulas, así que ella es la que manda.

Renée vuelve a sacar su cuerpo por el techo, pero no siento sus piernas a mis costados, levanto la mirada y alcanzo a ver su pie saliendo por el techo, esta mujer definitivamente esta loca. Me concentro en la curva y en sus indicaciones, no soy el mejor manejando jaulas, pero puedo calcular distancias en poco tiempo. Cuando queda menos de la mitad de la curva presiono el tercer botón y Renée salta sobre mi regazo nuevamente.

-Justo en el blanco- Sonrío de lado y ella se sonroja entendiendo el doble sentido -Rodea mi cintura y apoya tu brazo en la manilla de la puerta- Rápidamente hago lo que me indica y ella me sonríe mientras se gira, dándome la espalda -Sujétate de la puerta como si tu vida dependiera de ella Hound, y por lo que más quieras no te atrevas a soltarme- Renée mueve su brazo y antes de que mi mente lo procese estamos fuera del auto, agarro con toda mi fuera la puerta del auto mientras esta se desliza por la carretera y con el otro brazo mantengo a Renée pegada a mi costado.

Aún nos deslizamos, levanto la mirada y observo como el auto cae por la calzada de la carretera, el último auto que nos perseguía tiene ganchos de metal enganchados en el motor, ambos caen por la calzada. Cuando al fin la puerta deja de deslizarse Renée salta de esta y me apunta con una de sus pistolas.

-¿Qué mierda Renée?-

-Has visto demasiado- Me mira fijamente mientras quita el seguro.

-¿Cómo te llamas?- Una sonrisa extraña y algo malévola se crea en su boca.

-Renée Hourher Magorian Baeuchene- ¿Magorian?... Ese apellido... y Baeuchene, no lo había analizado antes, pero me suenan, sé que los he escuchado en el club.

-La mafia- Ella sonríe aún más.

-Mi padre se llama Krikor...-

-No...- Me levanto espantado, Krikor Magorian es el jefe de la Mafia Armenia, lleva desaparecido más de 19 años, sus negocios son sucios y pocas veces sales vivo de uno de ellos. Magorian le vendía la droga a un camello y este nos vendía a los MC de todo el lado Este. Observo a Renée, a pesar de todo se ve nerviosa, tanto, que su mano tiembla al apuntarme.

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