A veces simplemente me pierdo en ti, a veces simplemente pienso que esto no tiene remedio, me sumerjo en un mar de llanto incontenible, sin saber porque, sin saber cómo, me voy desvaneciendo lentamente, sabiendo que esto nunca volverá, sabiendo, que algún día me verás y recordarás que fui tuya y de nadie más y que, más allá de mis neblinas, era tuyo mi corazón...