“—Que esa era la clase de pensamientos que yo tenía cuando estaba con Choi Minho. —Sonrió con algo de tristeza y sintió sus labios temblar. —Me lastimaste, me decepcionaste y me rompiste. ¿Ya-ya estás feliz? —Rió y no pudo evitar que de sus ojos escurrieran más lágrimas. —¿Te-te sientes satisfecho por haber superado a alguien tan imbécil como él?”
El menor, bastante harto por no poder conciliar el sueño, se sentó en su cama y talló su cara.
No es que no lo tuviera presente, él estaba consciente de cómo se estaba comportando y sobre todo, de la forma tan fría y tosca con que trataba a su mayor. Sabía que Taehyung estaba intentando ser totalmente transparente con él, entendía en sobremanera sus razones; no quería que la relación terminase siendo un total fracaso, a pesar que Jungkook, desde un principio, ya la estaba viendo como uno.
Él pensaba de una forma sencilla; le gustaba Taehyung y eso era suficiente, no pretendía intentar hacer algo para que las cosas se dieran, mucho menos se iba a forzar a olvidar alguna de sus costumbres por ello. O por lo menos, de esa forma pensaba antes de los sucesos pasados.
Cualquier persona le hubiese insultado, le hubiese dicho hasta del mal en que se iba a morir y, ciertamente, a Jungkook le hubiese valido totalmente mierda. Después de todo, se había acostumbrado a vivir bajo las quejas de personas que le veían como inmoral y descuidado. Y es que era obvio, nada le importaba lo suficiente como para pensar de otra manera.
El azabache vivía con aquella frase común que caracteriza a muchos: “Aquél que me quiera, me va a querer como soy.”
Una vil y descuidada mentira.
Tú vas a ceder hasta donde el amor propio y el amor que sientes hacia la otra persona, te lo permita.
No es cuestión de obligarse o someterse a algo porque sientes presión en ello. Todo parte de cómo te gustaría estar con ésa persona y si comprendes hasta qué punto ésta se siente cómoda contigo y con todo lo que se refiere a ti. No es cambiar; es dar una versión de ti en donde los dos se sientan bien, y, hasta donde se quiera, totalmente satisfechos y a espera de adquirir cada vez más confianza. Regando ese sentimiento y volviéndolo algo tan fuerte, que hasta los defectos terminarán siendo parte de todo lo que ésa persona ama de tu ser.
Y ahí se encontraba Jungkook, totalmente inquieto y en ningún momento, objetando el hecho de que Taehyung le importaba hasta el punto de sentirse como alguien lo suficientemente miserable y grotesco para llegar a dañar a un chico, que desde un principio, nunca tomó decisiones malintencionadas hacia él.
El menor tenía miedo, miedo por saber que el pelirrojo podía llegar a odiarle por sus comportamientos ingratos y tratos despreciables.
Jungkook no lo pensó más, se colocó de pie y decidió arreglarse para salir de inmediato. Al momento de llegar a la sala, miró a la habitación de Joy y se acercó hasta ella.
El menor miró la oscura puerta por un rato, soltó un leve suspiro y la tocó despacio. —Joy… —Le llamó.
—Dé-déjame tranquila.
—Hablaremos en cuanto regrese —avisó.
—¡No-no quiero hablar contigo! ¡¿Qué es lo que no entiendes?!
—Hay comida para calentar en el horno —mencionó—. Come todo y… por favor —pidió preocupado—. Ni se te ocurra salir para evitarme. Nos vemos —se despidió y simplemente salió.
No tenía en claro qué pretendía decir, mucho menos si Taehyung iba a aceptar verle después de lo sucedido, pero lo peor que sí podía hacer, era ignorar todo aquello que estaba sintiendo por simple orgullo.
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Taehyung loves Jungkook [KOOKV - #2]
FanfictionEn donde Jungkook se comporta como todo un galán, pero no sólo lo hace con Taehyung. .。・゜・。..。・゜・。..。・゜・。..。・゜・。..。・゜・。..。・゜・。..。・゜・。. →Contenido homosexual →Mención de parejas secundarias →Capítulos cortos →TaehyungBottom/JungkookT...