Taehyung loves Jungkook [KOOKV - #2]

15 | Final

   Tres semanas con exactitud habían pasado, los días empezaban a volverse repetitivos desde la vez que intentó contactar a Jungkook y terminó por enterado de que se había ido. Le preguntó a Yugyeom el motivo y éste sólo supo decirle que no tenía ninguna respuesta clara de aquél azabache.

¿Y qué pasaba ahora? ¿Por qué razón?

Nuevamente, sin avisar.

El pelirrojo hizo un puchero, miró la hora y se dio cuenta que todos en aquella clase ya se habían ido. Tomó sus cosas y simplemente salió.

¿Era una especie de castigo? ¿Jeon Jungkook nunca iba a estar para él?

¿Lo había lastimado nuevamente?

Miró de reojo el lugar y notó a su rubio amigo; se mantenía bastante tranquilo y no apartaba su vista de su celular. El menor se acercó a él y se sentó a su lado.

—Estoy pensando seriamente en que al momento de repartir el amor, yo estaba en la fila de la comida esperando porque tenía hambre —mencionó e hizo un puchero.

Jimin rió debido a eso y le miró. —Vamos, Tae. El amor no lo es todo~ —canturrió, notándose de muy buen humor.

—Lo dice la persona que lleva casi siete años en la misma relación. —Achicó sus ojos, mostrando ligera envidia a la buena suerte de Jimin.

—¡Está bien! ¡El amor es algo precioso e irremplazable! Pero también hay otras cosas; el trabajo, la estabilidad que podrías conseguir junto a esa persona y sobre todo, la buena convivencia. Cosa que también tengo, pero bueno.

—El rico humillando al pobre —bufó y miró hacia el frente.

Jimin volvió a reír. —No debe ser tan difícil. ¿Qué te parece Chanie, hm?

—Yo no quiero a Chanyeol ni a nadie a quien se le parezca. Quiero a Jungkook. —Hizo un puchero.

—No es que te vaya mal en el amor, querido amigo. Eres tú y tu mala suerte.

—¡Gracias, Park Jimin! ¡Ni me había dado cuenta que tenía mala suerte! —Alegó con mucho sarcasmo en cada una de sus palabras.

—Dicen que la tercera es la vencida.

El menor se quedó en silencio por un momento y apretó sus labios en finas líneas. —¿Eso quiere decir que no lo volveré a ver en años?

—O quizá no lo veas nunca más.

—¡Jimin! —Lloriqueó.

—¡Ya, ya! ¡Está bien! —Empezó a reír. —Vamos a la casa de Yugyeom.

—¿Para qué? —Volvió a pucherear y miró sus manos—. Quiero ir a mi casa para poder lamentarme del por qué la vida es así.

—Quizá y Jungkook ya le haya dado señales de vida. Son amigos —recordó.

—¿Tú crees? —Preguntó.

—No descarto la posibilidad —respondió—. Así nos damos cuenta si te odia y debido a eso prefirió irse.

—¡No-no estás siendo gracioso! —Volvió a alegar y talló su cara con sus manos—. Yo-yo… realmente me siento mal —admitió—. Quería verle, Jimin, quería que supiera que ya no tengo ninguna duda. —Hizo una mueca y bajó su cabeza. —¿Por qué… siempre termino arruinándolo?

El rubio lo miró por unos segundos y revolvió su cabello. —No tienes la culpa de nada —aseguró—. Las cosas por algo suceden y debes tener eso en cuenta. Si Jungkook se va y prefiere no volver, créeme, lo peor que puedes hacer en toda tu vida es lamentarte hasta que las lágrimas lleguen.