Amigos con derecho a roce - Cap 14.

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Nero.

Era hora de volver, mi viaje había terminado ¿Qué cómo lo había pasado? Puedo decir que bien, si no fuera por el viejo pervertido sería aburrido y muy normal.
-¿Qué estoy pensando?-pregunté enojado mientras cerraba la maleta.
Inhalé y exhalé profundo, sabía que no volvería a ver a Dante y cuando vuelva a mi ciudad todo va a ser normal pero sin su compañía que a pesar de ser molesta, me agrada.
-Basta-dije firme.
¿Algo entre dos hombres? Claro que no, es un vejestorio molesto con solo imaginar si vivieramos en la misma ciudad me estaría molestando todos los putos santos días.

Pero sería divertido.

Se oyeron aquellas palabras, fruncí el ceño enojándome conmigo mismo.
-Se terminó-tomé la maleta, me acerqué a la puerta y agarré el picaporte.

Desde ahora todo volverá a ser como antes.

Pensé mientras abría la puerta y veía del otro lado al responsable de mis pensamientos.
-¿Qué haces aquí?-pregunté de mala gana.
-Veo que ya te vas-evitó mi pregunta desviando los ojos hacia mi maleta.
-Si, mi descanso terminó-dije y no noté que llevara la suya-¿Y tú?
-Me quedaré por unos días más-respondió cruzándose de brazos y soltando un suspiro-no me viene mal.
-Ya veo-dije asintiendo apenas. Voltee para cerrar la puerta y fue cuando sentí unos brazos que se envolvían en mi y un cuerpo que me cubría, me tensé hacia la acción sabiendo que era de su parte.
-¿Qué haces?
-No te vayas por favor-susurró aferrandose más a mi-no quiero perderte.
Sentí el corazón acelerado y mi rostro calentarse poco a poco, tragué fuerte y hablé.
-Ya te dije, mi descanso acabó, debo volver a mi ciudad.
Me parecía extraño no rechazar aquel cariño que estaba recibiendo de su parte, supongo porque era real y le salió de la nada.
-Llévame contigo-dijo como si nada.
Pero ¿Qué decía? ¿Estaba loco?
-Dante-nombré entre suspiro,nse apartó de mi y lo vi sonriéndome pero de una manera triste.
-Al menos... ¿Puedo acompañarte hasta el aeropuerto?
Asentí como respuesta, era la última vez que nos veríamos y esta vez se notaba que no tenía malas intenciones o estaba de broma.
Fuimos hacia el aeropuerto, me contaba chistes, se reía y se notaba diferente al Dante pervertido que había conocido, me sorprendía y a la vez me...
-Bueno-dijo deteniéndose ante la entrada del aeropuerto, me detuve y lo observé-ha sido un gusto pasar las vacaciones contigo-agregó sonriendo.
Correspondí al afecto observándolo a los ojos, los notaba diferente ¿Acaso estaba triste?
-Cuidate ¿Si?
-Si-respondí-nos vemos-agregué despidiéndolo con la mano, hizo lo mismo y voltee para irme.
A paso lento entraba sintiendo algo dentro de mi que nunca había presenciado ¿Qué era?
-Nero-me llamó, voltee a observalo y me asombré al verlo ante mi abrazándome con fuerza. La maleta se me cayó al suelo de la sorpresa pero no me importó en aquel momento, solo pensaba en lo que Dante hacia.
-Cuidate mucho maldito mocoso-dijo-si te sucede algo malo yo... no se que haría-agregó por último aferrándose más.
Mis brazos reaccionaron a aferrarse a él también ¿Qué era lo que sentía? ¿Qué me sucedía?
Se apartó y ¿Tenía lágrimas en los ojos? Oh... Dante.
Iba a hablar pero una voz avisaba que el avión el cual iba a tomar en unos minutos iba a partir.
-Nero yo...
Se detuvo ¿Por qué lo habia hecho? ¡Dilo!
-Dan...
Me detuve en cuanto tomó mi rostro y depositó un beso sobre mi frente, mi corazón latía con fuerza y mi rostro estaba de seguro rojo como un tomate.
-Ve mocoso, se te irá el viaje-dijo apartándose.
No sabía que decir, solo tomé la maleta y vi como volteaba y se iba sin antes alzar la mano como despedida. Se fue y no sabia cuando volvería a verlo.
Subí al avión y me quedé mirando por la ventanilla pensando en todo lo que había pasado y en la forma que me había sentido ¿Qué me estaba sucediendo? ¿Qué es esta sensación? ¿Qué debo hacer?
Ya era tarde para arrepentirme, el avión habia despegado, ya no habia vuelta atrás.
Suspiré dejando apoyar la cabeza sobre el asiento acolchado y cerré los ojos.
-Dante-susurré viendo la imgen de él besando mi frente.
Solté una ladeada y diminuta sonrisa y me dejé llevar por el sueño.

ᴀᴍɪɢᴏꜱ ᴄᴏɴ ᴅᴇʀᴇᴄʜᴏ ᴀ ʀᴏᴄᴇ.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora