Loco Y Estúpido Amor || Stuart Twombly

Stalker

Previamente En Loco y Estúpido Amor

(…)

—Lyle amigo —Nick lo codeó amistosamente— ¿Quién es tu nueva amiga?

Tomé un beagle y empecé a comerlo

—Es Flynn.

Ambos adultos me miraron. Tragué mi beigle.

—¿Qué? —pregunté ante su mirada de desconcierto.

—¿Cómo es que eso... —Señaló a Stuart que aún seguía en su móvil— … pasó a ser esto?

Stuart y yo lo miramos mal.

—No nos parecemos en nada —dijimos ambos.

Los adultos rieron.

—Miralos Billy, son tan adorables.

Rodé los ojos.

—Claro que lo son —dijo el obelisco— tal para cual.

Stuart y yo suspiramos pesadamente.

—¿De qué va el reto? —le pregunté a Lyle tratando de omitir el otro tema.

—Deportes.

—¡Excelente! —habló Nick— algo en lo que Billy y yo somos bueno, ¿Qué haremos? ¿Fútbol? ¿Básquet? ¿Rugby?

Lyle divagó antes de contestarle.

—No exactamente, ¿Has visto Harry Potter?

—Claro, ¿Quién no?

Lyle sonrió.

—Perfecto.

(…)

—Dios, creo que estoy enamorado —dijo Lyle, le di un empujón de juego— estoy bromeando, estoy bromeando.

—Chico travesti, no tienen idea de lo que hablas —se refirió Neha hacia los adultos.

La miré mal.

—Escuchame bien, Sangre sucia inmunda, a menos que quieras que meta mi Nimbus 2015 por tu Cámara Secreta, te recomiendo que cierres la maldita boca.

—Chicas, chicas —Lyle intervino— ya basta. Hermione Grenyer, habla idioma Muggle para que Billy y Nick puedan entenderte.

—Me haces sentir como en clases de matemáticas —se quejó Nick— tienes a un par de idiotas sabios con coordinación ojo-mano, sólo Di ¡Comenzamos! Y dejanos jugar.

—Bien... —suspire pesadamente— versión 2.0: golpeenlos con las pelotas antes de que pasen el balón por el aro

—Monten sus escobas a las tres —ordenó Lyle— uno, dos, tres, ¡Hufflepuff!

—¡Hufflepuff! —gritamos al unísono.