Confesiones y secretos

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Luego de que me enterara de que mi brazo se había quebrado fue la noticia que colmó mi paciencia

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Luego de que me enterara de que mi brazo se había quebrado fue la noticia que colmó mi paciencia. Estaba rota por dentro, pero ahora lo que me faltaba era que me rompa el maldito brazo izquierdo.

A las horas siguientes la camioneta se puso en marcha hacia el pueblo más cercano desde. Muerdo la tela de mi bufanda con mucha fuerza debido al dolor de mi brazo, esta mierda era realmente insoportable pero me las tenía que aguantar de todos modos hasta llegar al hospital más cercano.

- Tranquila Jisoo ya estamos llegando -Dice Jinyoung con desesperación-

Asiento con lágrimas en los ojos. Maldito sea el lobo que me provocó esto, o tal vez yo fui la causante de esto...cosa que no debería culpar al animal por mis actos.

Cuando llegamos me ayudan a levantarme, dejan mis cosas en la camioneta y nos adentramos dentro del hospital, varias personas nos observan con una mueca extraña pero lo ignoro.
Se acercan hacia la recepción con desespero, no entiendo por qué quieren ayudarme... ¿quizá les caigo bien? ¿lo harán por pena? ¿me querrán?
No escuchaba nada de lo que le decían a la recepcionista, me centraba solo en pensar si ellos realmente se preocupaban por mí aunque en este punto ya lo tendría que saber.

Me llevan a los asientos separados de las personas que me miraron antes, era una habitación aparte y no había nadie.

- Jisoo, ¿no quieres quitarte la bufanda? Hace demasiado calor aquí aunque haya ventiladores -Dice Jinyoung y Jeong asiente concordando con él. El mismo toma mi bufanda pero rápidamente le quito la mano-

- ¡No! Digo... no, no quiero quitarla.

- Esta bien esta bien no tienes por qué alterarte.

Ni en un millón de siglos me la iba a quitar. Todavía se encontraba la herida que marcó mi vida, literalmente, y que los otros vean lo horrorosa que se ve no es bueno. Si no quería llamar la atención tenía que quedarme así, aunque haga calor y este sudando hasta el cuello.

De verdad necesitaba tomar un baño, hoy lo haría sin duda alguna.

- ¿Kim Jisoo? -Dice un hombre con bata blanca. Jeong levanta la mano señalándome y el doctor asiente para que lo sigamos- ¿Qué es lo que tiene la paciente?

- Creo que ella se ha quebrado el brazo -El doctor lo mira sorprendido y alza las cejas- Es que ni siquiera lo puede mover.

- Permíteme averiguarlo. Por favor señorita Jisoo, sientese aquí.

Jeong me ayuda a sentarme (aunque no se por qué si no tenía la pierna rota). El doctor prende un tipo de máquina rara, prepara unas cuantas cosas extrañas que no logro acordarme de los nombres y me dice que estire el brazo.
Como no podía ni levantarlo, utilizó un sostén para poder sacar una radiografía de este, admito que dolió un poco pero todo sea por curarme.

Cuando terminó, me ayudó a sacar mi brazo suavemente del sostén. Muevo mis piernas con nerviosismo porque era la segunda vez que venía a este tipo de consultorio, la primera fue con mi padre... no me gusta para nada.

The Princess and Her Wolf ;Jensoo G!PDonde viven las historias. Descúbrelo ahora