«I can't be perfect»
¡No! ¡No! y ¡No!
Se lo dije, más de mil veces, simplemente pareciera que le encanta verme fastidiada.
Él sabe que odio ese color y para colmo es en una falda, no es que las odie, sólo no me gusta ver ese color en las prendas que uso frecuentemente.
Sólo se ríe como si el mundo se fuera a acabar, lo odio y lo amo a la vez.
—No te rías, sabes que odio ese color e intentas que me agrade—ruedo los ojos—Sólo haces que más lo deteste.
Se cruza de brazos
—Sigo sin entender—posa su mirada en modo pensativo— ¿Por qué odias ese color? Si es el color más hermoso que he visto—. Estira sus brazos hacia mí
Mi semblante se ensombrece, después de tanto tiempo diré lo que guardo desde aquel fatal día.
—El día que falleció Samantha, fue encontrada con una playera de ese color. —una lágrima cae, duele hablar sobre ella, aún no la puedo olvidar. —Desde ese día saqué de mi armario toda la ropa que tenía de ese color.
Su abrazo es fuerte, ese tema es el que más evito hablar. Lástima que cuando ella partió a descansar, él estaba de vacaciones con sus padres. En ese tiempo no éramos amigos, ni mucho menos nos conocíamos.
—No sabía sobre eso—me sostiene—No elegiremos más ropa con ese color.
¡Cuánto te extraño Samantha!
Deja la falda en el estante y salimos hacia otra tienda, en las manos ya llevamos cerca de diez bolsas, por lo menos no saldremos del centro sin encontrar el vestido perfecto para la gala que viene en unas semanas.
—Ya te dije que tiene que ser el vestido, no andes con esa cara, parece ser que no te gusta estar aquí—refunfuña—Ya falta poco, sólo nos falta elegir el vestido que vas a usar en la Gala.
Ruedo los ojos, dijo lo mismo hace un rato, ya vamos como quince bolsas en las cuales no hay un traje de gala, ni vestido y ni qué decir del calzado.
—No hay nada que me agrade, la verdad es que estoy cansada, de todo. —Eso es cierto, tengo la impresión que algo fuerte va a suceder—Por último, lo puedes diseñar y confeccionar tú mismo—. Sonrío
—Puede ser—lo piensa—Pero queda poco tiempo—luce preocupado—Si empezamos mañana, puede que esté para el siguiente viernes—sonríe.
Me llena de felicidad poder usar un modelo exclusivo de mi mejor amigo, sería la segunda prenda que hace para mí, la primera fue para una de mis muñecas.
—Entonces... ¿Compramos la tela?— pregunto ansiosa.
—Llámame loco, pero tengo un diseño avanzado, sólo falta entallarlo a tu medida—sonríe como nunca—Vamos a mi departamento, ahí está el diseño.
—Vamos—urjo, ya me dolían los pies de estar caminando de una tienda a otra todo el tiempo.
Caminamos uno al lado del otro, salimos del centro comercial hacia el estacionamiento. Él abre el maletero para que coloque todas las compras que hizo, luego va a abrir la puerta del copiloto y me ayuda a acomodarme en el asiento. Él manejaba a gusto escuchando música desde sus auriculares, por mi lado también escuchando música, hasta que entra una llamada de la mansión.
— ¿Diga?—pregunto, nunca nadie me había marcado desde la mansión, a veces suelen comunicarse conmigo por medio de sus teléfonos celulares privados.
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THIS IS ME
Teen FictionEl fallecimiento de su hermana Samantha desencadenó el sentimiento de libertad de Camile. Su padre Michael, un exitoso productor musical le prohíbe cantar, ya que por ser cantante su hermana sufrió una "sobredosis de drogas" que le llevó a la muert...