El Rey León: Un nuevo amanecer

16. El dolor de Vitani

P.o.v. Narradora

–No pudiste hacer una PEQUEÑA Y SIMPLE TAREA?!–exclamó Janja

–Y según tu lo entrenaste bien–dijo Zira con los brazos cruzados

Zev había regresado a la guarida de Janja, cabizbajo y avergonzado de haberle fallado a sus padres, sobre todo a su madre.

–Discúlpame madre–dijo él–pero es que...

–Es que si yo hubiese ido la princesita estaría más que muerta–dijo Nuka con un tono de orgullo

–Nuka!–dijo Vitani entre dientes

–Que?! Es la verdad!–exclamó Nuka

–Nuka cállate!–exclamó Janja

–Tu no tienes derecho a callarme!–le respondió él

–Ah no?–preguntó Janja retándolo

–El hecho que seas mi padrastro no te da derecho de nada!

–Silencio Nuka!–exclamó Zira

–Por qué tuviste que conseguirnos otro padre?!–exclamó Nuka

–Ay pareces un bebé!–exclamó Zira

–En realidad, concuerdo con Nuka–dijo Vitani con los brazos cruzados

–Ahora lo vas a apoyar a él?–le dijo Zev–pensé que ya éramos hermanitos!

–Tu y yo jamás vamos a ser hermanos idiota!–exclamó Vitani

A pesar de que Zev era el hermanastro de Vitani, no lo quería como tal. Ella creía que Zira simplemente lo había aceptado de nuevo como su hijo solo para remplazar a Kovu.

Vitani adoraba a Kovu como su hermano pequeño, aunque supiera que no lo fuera de sangre, ella siempre dijo que haría lo que fuera por cuidarlo y apoyarlo, pero cuando se enteró de la traición que le hizo al clan, no sabía qué pensar; no sabía si enojarse con él por haberla dejado atrás o alegrarse por él por haber encontrado una familia.

Una familia

Vitani no conocía en verdad que era eso.

Zira era su madre biológica, pero nunca la quiso como una, no cuando supo que ella asesinó a su padre.

Mucho menos cuando asesinó a Kopa.

Su único amor en la vida

Vitani vivía con ese rencor a Zira, pero no tenía opción, era vivir con ella, o que la asesinara.

–Qué pasa?–dijo Zev–sigues prefiriendo al fracasado de Kovu como tu hermano en vez de a mi? Él nos traicionó ingenua, nos cambió por una princesita mimada, ¿y tú crees que un día simplemente vendrá por ti como si nada a sacarte de este infierno? Pues te dire algo: te quedarás en este infierno el resto de tu vida, y cuando sea rey, me aseguraré de que te pudras en este lugar y que veas sufrir a tu pobre y débil "hermanito"

Vitani enfureció y le dio una bofetada a Zev. No iba a permitir que nadie hablara de Kovu de esa manera, ni mucho menos que le hablaran así a ella.

La adrenalina se adueñó de su ser y estuvo a punto de darle un segundo golpe cuando sintió un codazo en su espalda que la hizo caer. Volteó hacia atrás y se dio cuenta que había sido su madre.

–No le faltes al respeto a tu hermano!–exclamó Zira

–P-pero... qué hay de mi?!–exclamó con furia–soy tu hija!

–Tu no eres mi hija!–exclamó Zira con rabia–tu solo eres un accidente que el imbecil de tu padre aceptó con un amor que jamás recibí de él