Una Stark.

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-Hola, vengo por Teddy.

-Oh, claro ¡Teddy! Ven cariño.- Llamó la maestra y el pequeño de tres años apareció frente a ambas.- Nos vemos mañana.

La adolescente recibió al niño en brazos mientras este gritaba alegremente.

-¡April! ¡Globo!- dijo enseñándole el objeto que traia atado con un cordón.

-¡Lindo globo! ¿vamos a casa?

-¡Si, casa!

La chica empezó a caminar con Teddy en sus hombros, mientras este señalaba las cosas que veía en la calle y las nombraba. Ese era un ejercicio que ambos habían adoptado desde hacía unos meses; cuando al niño, que era sordo de nacimiento, le habían colocado una prótesis para que pudiese escuchar. Debido a eso su ritmo para aprender a hablar era mucho más lento que el de los demás.

-¡Globo!- gritó el pequeño.

-Si, Teddy, ya vi tu globo, es lindo.- Contestó la castaña sin prestarle mucha atención. No se sentía bien.

-¡Globo! ¡Se fue!

-¿Eh?- Justo en el momento que vio alejarse el objeto redondo en el aire alguien pasó empujándola.

-¡Se robó mi cartera!-Escuchó a una mujer que venía detrás. Al volver la vista hacia el ladrón notó como este agarraba una bicicleta que estaba en la vereda y salía andando. Sin esperar nada más, April dejó a Teddy en el banco junto a ella y fue tras el asaltante; al paso tomó la tapa de un cubo de basura. Cuando notó que el chico se alejaba mucho apuntó y, sin dejar de correr, arrojó la tapa al mejor estilo Capitán América. Lo siguiente que supo el bandido fue que su cara se estampó contra el suelo. Acto seguido sintió el peso de alguien en su espalda, inmovilizandoló.

-Bonito bolso, una lástima que no combine con tus ojos.- Bromeó la castaña, sentada sobre él.

A los pocos minutos, el chico ya estaba esposado, la señora con su bolso y Teddy con su globo que, por esas cosas de la vida, se había enganchado en un árbol. Sin hacer mucho escándalo la adolescente regresó a su hogar. No tenia ganas de que la gente la bombardeara a preguntas. Antes de entrar notó un auto muy lujoso y similar al que había visto cerca del lugar del asalto, pero le restó importancia.

-Buenas tardes April, hola Teddy.- Saludó la cuidadora del orfanato, mientras el niño se alejaba a jugar con los demás.

-Hola Angélica ¿alguna noticia nueva?

-Sí, de hecho hay dos. La primera es que ya estan todos los papeles listos para que el matrimonio Blake pueda llevarse a Teddy.

-Oh, eso es... grandioso.- Esbozó una sonrisa triste.

-Ey, tranquila, ellos saben cuanto lo quieres, dijeron que puedes ir a verlo todas las veces que quieras.

-Sí, lo sé. Es sólo que... será raro no tenerlo aquí. Prácticamente nació en este lugar, al igual que yo.

-Tranquila, todo estará bien. Además, la otra noticia de seguro te gustará también.- Dijo la mujer con una amplia sonrisa.

-Ya, suelta la bomba.

-Hace solo cinco minutos vino un matrimonio. Quieren conocerte.

-¿Qué? ¿Quién está lo suficientemente loco como para querer adoptar a una adolescente de 15 años?

-Ellos.- La joven pensó un segundo.

-¡Oh no! ¿Y si solamente me quieren para vender mis órganos en el mercado negro?- puso su mejor cara de desesperación.

Marvel One-shots.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora