No me arrepiento KSB

CAPITULO 6 (como suena el primer amor)

Masaki Junya el perro fiel de su hermano mayor, el chico más lindo que alguna vez ha visto, tranquilo, amable, dulce, era como el agua en el desierto, todo él es un oasis que lo sacaba de su gris vida, su primer encuentro fue casi mágico. Tetsuhiro tenía 14 años, acaba de tener una rabieta, estaba ya cansado de discutir con sus padres, que molestia, su hermano era un omega y él tenía que hacerse cargo de todo.

Como todos los días en que sus sentimientos se desbordaban, iba a canalizarlos en su piano de cola, tenía una habitación en un ala apartada de la mansión, un lugar donde todos tenían prohibido entrar, incluso sus padres le permitían recluirse hay, sabían que necesitaba un lugar para él, y sabían que en la completa soledad podía tocar las notas más hermosas, sino fuera porque era muy talentoso le quitarían ese hobbie, porque para ellos solo era eso, un medio de entretenimiento fuera de sus verdaderos deberes.

-Arrg- grita lleno de impotencia lanzando las partituras lejos, ¿que tenia de bueno ser un alfa?, no le encontraba ningún provecho, más que ser el heredero de las empresas- a mí me basta con la música, ¿Por qué no lo entienden?

- ¿y porque no haces ambos? - oye una vos al fondo de la habitación y se sobresalta, ¿quién lo interrumpía en su lugar privado?, le hace una mueca a lo que el intruso se intimida respondiendo - lo siento, escuché algo maravilloso en los pasillos y no pude evitar entrar, tocas maravillosamente.

- ¿Por qué no ambos?, ¿Qué querías decir? – Tetsuhiro no era de los que mandaban al diablo a los demás, pero si lo que le respondía este chico no le gustaba lo haría.

-Bueno- dice tímidamente- es que te oí, y pensé que no tiene sentido dejar la música solo por estudiar y tomar la empresa de tus padres, a menos que tu único interés sea la música, ¿quieres vivir de ello?

Era la primera vez que se había planteado vivir de su música, lo medito unos segundos dándose cuenta que no tenía sentido, odiaba que lo oyeran tocar, era su modo de poner pausa y olvidar todos los problemas ajenos. Mediante el piano expresaba sus emociones, que alguien lo oyera era como entregar una parte de si, exponiéndose al mundo, era cierto vivir de la música no era opción.

El joven Junya se había acercado, entonces Tetsuhiro podía apreciar su figura, para ser un chico tenia facciones hermosas, su cabello es de un color cenizo, su sonrisa amable lo hacía sentir bien, se sentía acompañado y comprendido, decidió pasar esa tarde con él, escuchando como el chico confesaba su deseo de estudiar arte, por mucho que su padre se opusiera, era una decisión tomada, una vez saliera de preparatoria no habría marcha atrás, conversaron tanto que el más joven no pudo evitar pensar en lo maravilloso que sería compartir más tiempo con él, y como si el cielo lo escuchase resultaba que sería el protector de su hermano mayor durante la preparatoria, eso significaba que lo vería seguido, Masaki era simplemente perfecto, amaba el arte y la buena música, también conocía un poco, por ello amablemente le ayudo a tocar su canción favorita, ya al llegar la noche habían podido tocar una parte de clair de lune sin equivocarse, no era la favorita de Tetsuhiro, pero empezaba a amar el melodioso sonido del piano cada que la escuchaba, le recordaba a esa tarde... tarde en la que se enamoró por primera vez.

Después de ese día el cortejo del chico se hizo intenso, solía acorralara Masaki en los pasillos de la mansión, en otras ocasiones lo encerraba en unahabitación robándole besos furtivos, pero su maniobra favorita era esa excusade ir a la sala del piano para que lo oyese tocar, puesto que solo lo podíahacer frente a él, cuando los besos y las carisias empezaron a hacerse másintensas, el mayor intento poner un alto a todo, con la excusa de que era muyjoven, que ni siquiera sabía a qué casta pertenecía, "¿si soy un alfa serás mío?",Masaki no respondió, esa osadía lo dejaba sin palabras, pero para él fue másque suficiente su silencio.