Playing With Fire

Oscuridad

"EMERGENCIA! EMERGENCIA!"

La pareja rápidamente despertó de su sueño, ambos se vistieron rápidamente y salieron al balcón de la habitación, y en el cielo observaron un montón de nubes negras, expandiéndose poco a poco, cubriendo toda Jubilandia.

-no puede ser, apenas esta amaneciendo!- exclamo Emily molesta, mientras se transformaba en Glitter Rosa y saltaba del balcón, Ulric se transformó en lobo y fue tras ella.

El resto del ejercito brillante llego en poco tiempo, y ahora, el equipo de héroes estaba en el centro del mundo de Jubilandia, y entre las nubes, un humo morado empezó a bajar hacia el suelo, seguido de una niebla azul, los habitantes de la tierra de los cuentos empezaron a gritar con desesperación, mientras que el Ejercito Brillante y compañía se ponían en guardia, cuando los gritos de los duendecillos empezaron a ser silenciados, poco a poco, lo cual hizo que la piel de nuestros protagonistas se erizara, algo raro estaba pasando, algo raro y que claramente, no era bueno.

El humo se fue desvaneciendo poco, entonces al ver alrededor se dieron cuenta de que cada habitante, cada ser viviente en aquella tierra de magia había sido congelado, a Rosa y Amarilla se les humedecieron los ojos, entonces Bruto grito.

-¡¿Qué les han hecho?! ¡Ellos no tienen la culpa de nada!- grito furioso, mientras se empezó a escuchar la risa de Rascal.

"Vaya, vaya, que adorables se ven, con miedo y ganas de llorar, sobre todo tu, Glitter Rosa"

-¡¿Qué demonios quieres?!- grito Emily furiosa.

"Tranquila cariño, ese no es lenguaje para una señorita"

-¿Qué es lo que quieres? ¿Qué hacemos para detener esto?- pregunto Ulric con un poco más de calma.

"Solo queremos tener visitas, no sentimos muy mal en las tierras oscuras"

-ni lo pienses Rascal, no somos tan tontos como para caer en tu trampa!- exclamo Verde de manera seria.

"Bueno, si no lo hacen la temperatura bajara y bajara hasta que cada ser vivo en Jubilandia no sea más que un simple cubo de hielo, ustedes decidirán"

Todos se miraron de manera seria.

-tenemos que ir- murmuro Rosa.

-¿Qué? ¿Acaso estás loca?- pregunta Ulric sorprendido- es un riesgo muy grande

-pero no podemos dejar que la gente Jubilandia muera- dijo Rosa de manera seria- no tenemos otra opción

-claro que la tenemos, bien, iremos a las tierras oscuras- dijo Ulric- pero primero debemos recibir su invitación- dijo el chico, poniéndose en posición de ataque.

"Si así lo quieres"

Rascal y Azul atacaron inmediatamente, entonces nuestros héroes se defendían, sabían que pelear en Jubilandia era un riesgo, pero pelear en las Tierras oscuras era suicidio ¿Por qué? por qué no era su territorio, porque sabían que tanto Rascal como Azul podrían jugar sucio, quien sabe qué clase de trampas podrían haber puesto, por eso y muchas más razones era mejor para ellos estar en Jubilandia.

La lucha inicio, patadas y golpes dejaban a nuestros protagonistas débiles, pero ellos continuaban en la lucha no se iban a rendir por nada del mundo.

En plena lucha, de un momento a otro, Azul se encontraba sola contra todos, Rascal se había ausentado y todos se habían dado cuenta de eso, de lo que no se habían dado cuenta de la ausencia de un miembro del Ejercito Brillante.

Tenían acorralada a Azul, algo herida y estaba en el suelo, Rosa estaba a punto de atraparla, pero entonces Azul rio, dejando a Rosa confundida.

-nos vemos en las Tierras Oscuras

Azul desapareció, dejando a todos confundidos.

-¿Por qué no la atrapaste?- pregunto Ulric con cierto grado de frustración.

-porque, por que, por que... argh! Deja de regañarme!- exclamo Rosa con molestia.

-no te regañe, solo te pregunte el por qué no la atrapaste- dijo Ulric entre dientes.

-bueno, tranquilos, relájense, aún tenemos la oportunidad de atrapar a Rascal- dijo Bruto de manera seria.

-Rascal ya se fue, idiota- dijo Brooha de manera seria.

-oigan ¿Dónde está Naranja?- pregunto Amarilla, mirando hacia todos lados.

Un par de segundos bastaron para saber que había pasado con Naranja.

-LOS ODIO!- grito Rosa furiosa golpeando una casa.

-tenemos que ir por ella- dijo Verde seria- tenemos que arriesgarnos, no podemos darnos el lujo de perderla

-estoy de acuerdo, perder a Naranja solo es un riesgo más- dijo Ulric.

-tenemos que hacerlo porque es nuestra amiga, no por nada mas- dijo Rosa de la misma forma- y viajaremos a las Tierras Oscuras, sin importar que- dijo Rosa, para después volar hacia el palacio, entonces todos fueron tras ella.

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-Argh! Suéltenme!- exclamo Naranja con molestia, estaba atada de manos y pies en una clase de silla- les juro que cuando vengan a rescatarme las van a pagar

-ow querida, en verdad que eres ingenua- dijo Rascal con una sonrisa burlona- si no se dieron cuenta de tu ausencia ¿tú crees que van a venir a buscarte?

Naranja no hablo.

-desde el inicio del Ejercito Brillante, esa chica Rosa les ha estado robando toda la atención tratando de ser la líder ¿no estas cansada de eso?- pregunta Rascal.

-¿Qué? eso es patético, ella es nuestra amiga, ella unió al equipo- dijo Naranja, entonces miro a Azul- ¿por eso te uniste a él? ¿Es en serio? Emily nos unió, lo sabes!- exclamo Naranja aún más molesta.

-si! nos unió, y nos mantuvo unidas mientras lo necesito, porque ella sabía que no podía sola, y cuando ganamos, nos dejó, nos separó ¿eso es amistad?- pregunto Azul de la misma forma.

-ya no pudimos estar juntas por la escuela, es diferente- respondió Naranja.

-escúchame Naranja, Rosa solo nos quiere para adquirir poder, de nosotras obtiene el poder, por eso yo ya no regrese, ella no es nadie sin nosotras, ella solo quiere poder y yo no le voy a dar el mío...

Naranja solo negaba con la cabeza.

-ella solo quiere acabar con nosotras para matarnos a todas, para acabar con nosotras, no vamos a permitirlo- decía Azul, tocando la frente de Naranja, entonces los ojos de esta pasaron de ser naranjas a un azul penetrante y frio- ¿o sí?

-no, no lo permitiremos- dijo Naranja, como si ya no fuera ella, mirando al vacío.

"NARANJA! NARANJA!"

La voz de Rosa fue escuchada en cada rincón de las tierras oscuras. Azul sonrió.

-llego la hora- dijo Rascal con una sonrisa.

Si, había llegado el momento que tanto deseaba Rascal.

El momento de acabar con Emily Anderson