Nunca llego.
Rose se quedo dormida sobre la encinera de la cocina.
Mark llego a eso de las 17hs y la imagen que encontro retorcio su corazon.
Su pequeña se escontraba dormida, su boca levemente separada, sus parpados pesaban, sus mejillas estaban levemente sonrosadas.
Hey! Rose- Dijo el muchacho en el oido de la muchacha-
La joven se retorcio en su lugar al sentir el leve rose del aliento en su rostro.
Ella entreabrio sus pequeños ojos.
Se notaba su tristeza. Estos se encontraban rojos. Habia llorado. Y en este momento juraba odiarse, por haber provocado eso.
La tomo en sus brazos y cargandola como si su peso se tratara de una pluma se dirigio escaleras arriba, para que su joven esposa pudiera estar comoda.
Su cabello se expandia por la almohada y parte del colchon.
Era hermosa, y era solo suya.
Aunque el demostraba todo lo contrario.
Peeeeeeeeeerdon.
Tarde demasiado no? matenme.
Gracias por todo.
-Barbi ♔