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Volvi a trabajar el viernes y desgraciadamente no vi a Hyungwon, por lo que no pude hablar con él.

El sábado por la mañana también fui a trabajar, pero solo por la mañana, ya que por el atardecer comenzaría la fiesta.

Deseaba ver allí a Hyungwon y por culpa de estar pensando en eso, no pude trabajar y el tiempo pasaba muy lentamente.

Mas que llego la hora me marche a casa, almorcé con mi madre.

Por suerte, ya no estaba insistiendo que me case con Hyungwon, creo que habrá entendido que sucede algo, ya que no lo he traído nunca a casa, y se le ve desanimada. Aunque no tanto como lo estoy yo, me da la sensación que no me ama ahora.

Me quite esos pensamientos de mi cabeza, si no me ama, lo recuperare, como sea. De nuevo esos pensamiento, sacudí mi cabeza y me fui a mi ropero, para elegir que ponerme.

Decidi ponerme un traje sencillo, negro, con camisa blanca y corbata negra.

-¡Que hijo mas guapo tengo!-dijo mi madre al verme.

Se acerco como toda madre a arreglarme un poco mi cabello.

-Seguro que todas las chicas caen a tus pies-comento.

-Mama...-proteste.

-Si Hyungwon no cae de nuevo, no lo entiendo-añadió sin echarme cuenta.

-Ya debo irme, ¿segura que no quieres venir?

-No tengo ganas de fiestas. Y seguro tu madre estorba si quieres hablar con Hyungwon.

Sonrei y negué.

-Adios, mama.

Después de despedirme me fui al garaje a por mi coche, y conduje hacia donde seria la fiesta, ya que obviamente no seria en el hospital.

Llegue allí y al aparcar, me fije como Hyungwon bajaba de un autobús

¿Aun no tenia su propio coche?

Hyungwon iba con un traje negro con camisa blanca también, pero sin corbata. Con aquel pelo gris, peinado.

¿Por qué me parecía tan sexy?

Sin dudarlo fui hasta él, ya que nuestros caminos se cruzaban hasta llegar al lugar del evento.

Él me sonrio al verme, y yo no dude en hacer lo mismo.

-Viniste-dije.

-Te dije que vendría-me dijo- te ves bastante bien-añadió- muy bien.

¿Estaba coqueteando conmigo ahora? No lo entiendo.

-Tu te ves...-lo mire de arriba abajo con una sonrisa- muy sexy

-Wow, creo que tendre que cambiarme. Esto es algo muy formal-me dijo.

-Estas perfecto-y el sonrio.

Continuábamos caminando hacia el lugar, no estaba lejos, pero caminábamos lento y había una fila para entrar.

El silencio que ahora apareció era muy comodo.

Y yo me estaba preguntando donde estaría viviendo Hyungwon.

Por fin entramos, y todo el momento de entrada y ahora hacia nuestros asientos, quise agarrarle la mano, pero no me atrevia, y creo que ni siquiera eramos novios.

Aunque quizás no me sienta, pero se veria feo y se me aprovecho de eso.

Cada uno fuimos hacia nuestra mesa asignada, que por lo visto era la misma, compartida con varias personas mas.

Se que le organizadora fue mi madre, además se aseguro que nos sentáramos juntos en la mesa.

Como aun era temprano decidimos dar una vuelta, y saluda a las diferentes personas, aunque esto ultimo lo hacia solo yo

Él se mantenía al margen con una bebida en la mano, al igual que la mia.

-¡Hyungwon!-exclamo una chica, y no dude en girarme a ver quien era.

-Hola-le saludo.

Esa chica aun no la había entrevistado asi que no la conocía.

-Tengo algo que decirte-dijo mirándome-en privado- aun seguía mirándome, pero parecía que me estaba desnudando con la mirada.

-Él se puede enterar- no se como describir lo que sentí

Ella suspiro

-Hyungwon, ¿recuerdas la reunión que hubo cuando entraron los nuevos internos?

-La recuerdo-respondio- no fui, pero se que la organizasteis.

-Si, fuiste, solo que estabas demasiado borracho como para recordarlo-dijo ella, pero él puso un gesto confuso y un poco enfadado- esa noche todos nos emborrachamos-dijo riendo, pero se puso seria- esa noche tuvimos...ya sabes... y ahora estoy embarazada.

Su expresión no cambio, pero por lo contrario, la mia no podía creer lo que estaba escuchando.

-Es mentira-dijo él enfadado- Wonho, es mentira.-dijo mirándome.- mira,-le dijo a la chica- yo jamas he ido a la fiesta, jamas me he emborrachado, nunca me he acostado con una mujer, por que me gustan los hombres-dijo irritado, yo intentaba creerle- además, si me he emborrachado alguna vez, jamas lo suficiente para acostarme contigo-le dijo mirándola de arriba abajo, la chica estaba de piedra, y para que mentir yo también- además, me hice pruebas hace un tiempo, soy completamente estéril no puedo tener hijos. Asi que busca otro idiota.

Dicho eso, solto la copa que tenia en la mano, en la bandeja de un camarero y se marcho.

Yo sali fuera buscándolo, ¿Cómo puede ser tan rápido?

Finalmente, lo encontré en una escalera solitaria, con la cara entre las manos. Supongo que llorando.

-Hyungwon-lo llame suavemente

-Es mentira, es mentira. Creeme-me dijo-sin mirarme, pero ya no tenia las manos en la cara.

-Te creo, Hyungwon-le dije.

Él me miro, ya no lloraba.

-¿Porque lloras?-le pregunte.

-Porque duele-lo mire extrañado- me duele aquí-dijo señalando su pecho- cada vez que te veo, y ahora mas, pensando que la creías a ella.

Yo no dude en abrazarlo.

Cuantas ganas había tenido de sentirlo entre mis brazos.

-¿Porque no me lo dijiste?

-Quiero estar bien, para estar contigo.

-Yo quiero que estes bien. Pero te necesito. No te alejes. Pense que ya no me amabas.-le confese

Hyungwon se alejo de mi y me miro.

Se llevo sus manos a su cuello, y saco un colgante que llevaba.

Era el anillo que le regale.

-Jamas me lo quite, pero en las operaciones no puedo llevar nada en las manos.-me dijo, volvió a ponérselo y saco su llavero y me lo dio.

-Esta es la llaver de tu antigua casa- aun tengo esa llave en mi casa

-No es mi antigua casa, vivo allí. Quizas esperando que algún dia aparecerías de nuevo

Yo sin dudarlo, le bese en los labios, los cuales sabían salados por las lagrimas.

-Si no me lo dices, no podría ir. Ya no vivo en ese barrio.-le dije- ¿volvemos a ser novios?

Hyungwon asintió y lo volvi a besar.

Después con mis dedos y delicadamente, le limpie el rastro de lagrimas.

-Creo que deberíamos volver, la fiesta va a comenzar y va a ser extraño si el anfitrión no esta-le dije ayudándole a levantarse y ahora si, caminamos agarrados de la mano hacia la fiesta.

Debo de darle las gracias a aquella chica, después de una carta de despido.


Espero que no tengáis quejas 1013 palabras.


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