Renacer.

Capítulo 17.

Después de que Soo Chan dejara su casa hace casi un mes atrás, había tenido la esperanza de no volver a verlo, y si lo hacía, que lo más probable sería en un juzgado, en un juicio sin fundamentos válidos como tanto su ex esposa había dicho que podía suceder, y ciertamente aquello no le daba miedo porque él podría defenderse muy bien, y también tenía colegas muy buenos en su trabajo que no hubieran presentado inconvenientes en hacerlo.

Y a pesar de todo aquello, Min Ho no estuvo preparado cuando su secretaria le dijo que Lee Soo Chan estaba afuera de su oficina solicitando reunirse con él, y en ese momento hubiese deseado tener que estar en el juzgado, o una reunión con algún cliente para evitar al hombre, porque no se veía a sí mismo siendo muy amable, por mucho que se recordara que era el papá de su esposo.

Desde la última vez que estuvo a solas con Soo Chan el ambiente entre los dos fue incómodo entre los dos, y eso no había cambiado en nada, porque podían estar sentados uno frente al otro por más de cinco minutos, y luego de su saludo, no había salido nada de sus labios, y eso empezaba a desesperar a Min Ho, porque no sabía qué esperar para ese momento, sólo esperaba que no se hubiera presentado en su casa antes, no le gustaba la idea de Taemin y Dong Min a solas con su padre, aunque parecía que el hombre nunca le haría daño a su propio hijo.

—Señor Lee —su voz sonó más fuerte de lo que pretendía —quisiera saber a qué debo su visita inesperada.

Soo Chan lo observó en silencio por un momento antes de suspirar, y mirar hacia la ventana de la oficina, como si estuviera buscando los argumentos perfectos comenzar a hablar, porque para él también estaba siendo difícil estar ahí, le había tomado todo un mes antes de poder volver a ese lugar, con las intenciones de conversar sin cerrarse a lo que Min Ho tuviera que decir.

—Taemin.

Min Ho quiso gruñir ante la mención de su esposo, pero no podía esperar que su suegro sólo fuera a tomar el té en su oficina, al final de todo, ellos no tenían otro tema en común.

—Lo escucho.

—Primero —Soo Chan se acomodó correctamente en la silla —quería disculparme por lo sucedido semanas atrás, sé que no me estuve comportando correctamente.

»Pero... sabrá usted, Min Ho —el hombre se inclinó un poco y colocó sus codos en el escritorio —no es nada fácil si uno llega a creer que su hijo lo está pasando mal.

»Taemin es joven todavía, lo último que pensé era que cuando viniera a buscarlo para llevarlo a casa, estaría casado y esperando un hijo.

Porque era cierto, él no había esperado encontrar a su hijo de esa manera, aunque tampoco pretendía dejar la clínica todavía, si no hubiera ido Ah Rim a búscalo, él se habría tomado más meses en ese lugar, y desde la visita de su sobrina, no había dejado de culparse a sí mismo porque su hijo lo estuviera "pasando mal", porque fue él quien tuvo la idea de enviarlo con ella, ya que al parecer la relación que los dos tenían era lo suficiente buena para que él estuviera bien, pero ahora sabía que se había equivocado.

—Señor Lee...

—No voy a insistir que Taemin vuelva a casa conmigo, si eso es algo que él no desea —lo pensó un momento antes de hablar —pero quisiera verlo otra vez, quiero hablar con él.

Quería escuchar de sus propios labios que era feliz con Min Ho, que estaba siendo tratado bien, y que las cosas no eran como Ah Rim decía, en donde Taemin no estaba preparado para tener al bebé, para ese matrimonio, porque su sobrina seguía insistiendo en todo eso, en algo que él había estado de acuerdo en un principio pensando en lo joven que su hijo era para ser responsable de una familia, pero luego de escuchar que su sobrina tuvo mucho que ver en eso, necesitó explicaciones, demasiadas, las que lo llevaron a alejarse lo suficiente para pensar, y ahora estar ahí, porque él lo último que buscaba era hacer sufrir a su hijo.