Mentiste tú, mentí yo, mentimos los dos. Un amor correspondido convertido en un amor que no correspondió. Te escribí, supongo que ya está claro por qué no respondiste. Al parecer lo que temía pero a la vez sabía fue lo que hiciste. Si en una historia los dos cometen el mismo error, el malo no existe. Yo a otra desvestí y tú que con otro te desvestiste. Un día me pasaste un mensaje y no lo ví, otro día fui yo el que un mensaje envió pero tampoco lo viste. "Te extraño", eso fue lo que entre esos mismos días me dijiste. No se puede ser infiel si nada fuimos, nada hemos sido. No se puede ser infiel pero como una infidelidad lo sentimos. Fabricamos historias para engañar a nuestros oídos. ¿Que tál si mañana despiertas y finges que nada ha sucedido? Pero sucedió, lo que se temía que pasara pasó. El corazón por ti latió, pero quizás por primera vez al latir se equivocó. Quizás tu forma de ser fue lo que lo provocó. Tál vez lo que nunca se dijo fue lo que sentimientos invocó. Pensamientos de un futuro a tu lado, eso fue lo que me motivó. Quizás oculté lo que sentía mientras con otras yo dormía, pero al dormir solo el insomnio tu rostro me mostró. Mi corazón al otro día te recordó. "Hogar, dulce hogar", me susurró. Quizás no dolió tanto como sorprendió, pero dolor es dolor. Que ignorante yo culpando después de haber cometido el mismo error. Tantos lugares para visitar juntos, pero tú visitaste a otro y yo fui el que a otra visitó. ¿La historia culminó o será que nunca empezó? La brisa del verano en brisa de un invierno se convirtió. Uno siempre vuelve a dónde se siente seguro pero la seguridad de que esperaríamos nos falló. El tiempo fue sinónimo de traición y tus ojos seducción que llevaron a la perdición. Que increíble, un daño echo al parecer no es un daño corregible. No se puede abrigar si la otra persona al momento no es tangible. Quizás eso fue lo que nos llevó a cometer actos tan terribles, pero al momento no lo fueron. Al momento quizás pensamos pero detenernos no intentamos. Al momento lo hicimos y ahora pensando en eso mismo nos acostamos. No todas las sorpresas son buenas y al pensar que fuimos buenos nos engañamos. Otros labios besamos, otras manos agarramos, otros cuerpos acariciamos, otros ojos miramos. En el camino que se suponía que recorrieramos juntos, rumbos distintos tomamos. Terminamos en el mismo lugar pero con diferentes personas, somos los mismos pero al parecer no quienes pensabamos ser. Lo vimos venir pero no quisimos ver. Sospechamos pero evitamos entender. Ahora sabemos, imposible será el tiempo retroceder.
-Adrián Enrique Beer Medero🥀
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No son poemas, es poesia
PoetryEn ocasiones nos encontramos solos. Queremos expresar lo que sentimos y sin embargo no tenemos a quién expresarle dichos sentimientos. Tristeza, felicidad, desilución y coraje son algunas de las cosas que encontrarás a continuación. Te invito a que...