La persona que mas admiro: Darius, la mano de Noxus

Capitulo 15: El camino hacia el progreso

Marcus

Hasta hace tan solo unos momentos, la mañana transcurría de forma normal.
El implacable sol matinal se colaba por toda la habitación de enfermería, recibía visitas constantes de Darius y del medico que me atendía...
Lo típico.

Al menos hasta que llegaron un par de guardias a sacarme de mi cama para llevarme a mi y a Darius hasta la oficina principal de Swain.

Darius estaba un poco desconcertado, no por la forma poco amable de arrastrarme, sino que se debía al extraño comportamiento de Swain.

En palabras del mismo Darius: "No tengo idea de como es que siempre logra impresionarme, pero estoy seguro de que esta planeando algo grande, ya lo verás"
Me encogí de hombros y una vez en pie otra vez, llamé cortésmente a la puerta, ambos entramos apenas oímos que Swain nos concedía permiso para ello.

—Ah, Darius y Marcus... Adelante, pasen y tomen asiento— Nos ofreció Swain, sentado tras su escritorio lleno con un monton de papeles.
Accedimos, cada quien tomó su sitio en una de las sillas enfrente de él.

Swain dejo de lado su papeleo, inhaló un poco de aire y comenzó:
—La situación es está, debido a que ahora contamos con un Invocador entre los nuestros...— hizo una pequeña pausa en la que me señaló.
—... Hemos de prepararnos para un periodo de tregua "Oficial" para con nuestras regiones vecinas—
—Y para ello es necesario hacerles ver que, al menos por un tiempo, no somos su principal amenaza, no hasta que se resuelva lo del "Terror de las sombras" en el mejor de los casos.

Darius mantenía un semblante serio mientras Swain hablaba, pero conforme el viejo cuervo continuaba su explicación, fruncía el ceño como señal de desaprobación.

—Lo que les pedire no es algo que deban decidir a la ligera, pues una vez que comencemos este plan no habrá marcha atras, ¿Entendido?

Swain decidio hacer una segunda pausa, nos miró directamente a Darius y a mi, luego yo dirigí mi mirada hacia Darius, quien aún se encontraba ofuscado.

Al principio no entendi mucho a lo que se referia Swain, pero luego comprendí que, al menos ya no sería el único en pensar que pudiera haber mas Invocadores.
Con mayores animos, golpeé ligeramente a Darius en su hombrera llamando su atención.
Estiré mi brazo hacia el y cerré el puño de mi mano.

La mente de Darius capto la idea en un momento, me dio una sonrisa de dominación y chocó su puño con el mio.

Swain parecia algo perdido, asi que me limite a soltar una pequeña risa, para luego pedirle que continuase.
Asintió.

. . .

—Ustedes dos viajaran hasta Piltóver, cruzaran la ciudad incógnitamente y llegaran al distrito zaunita lo mas pronto posible—
Explicó Swain una vez se levantó de su escritorio, caminando hasta el borde del ventanal en su oficina.
Aún era el mediodía, un tarde brillante con pocas nubes en el cielo se podia sentir con solo alzar un poco la mirada
Mas a pesar de esto, el bastión en el centro de Noxus lucía imponente, fuerte e imbatible.

—Señor Swain, ¿como viajaremos hasta alla sin ser reconocidos? Digo, no hay muchos problemas por mi parte, pero siendo sinceros, Darius no pasaría muy... Desapercibido—
Quise sonar lo menos ofensivo posible para que mi cabeza no rodara apenas dijera eso, pero Darius no se inmuto.
Podria decir incluso que él mismo me estaba dando la razón.

—Detalles sin importancia, una vez que hallan llegado a Zaun, deben encontrar a Viktor y escoltarlo para traerlo en su regreso a Noxus.
—¿Viktor?— Darius arqueó una ceja, no le agradaba mucho la idea.
—Asi es, les advierto que no sera sencillo sacarlo de ahi cuando es perseguido en Piltóver por la señorita Caitlyn y su bruta compañera pelirrosa, pero estoy seguro de que podrán arreglárselas por si solos.