Black Soul [ SeHun y Tu ]

De planes a concluir a unas cuantas frustraciones.

Era estúpido.

ChanYeol miro por su ventanal, tenía un plan y no estaba seguro en aplicarlo. Toda esta situación lo tenía frustrado y a su vez cansado.

Era el momento de terminar.

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SeHun se había quedado estático. Vi como retrocedió un poco y su mirada esta pérdida, un vacío inmenso se formó en mi pecho. De una u otra manera tenía que confesarlo, la presión, el trauma, el dolor, simplemente no lo podía soportar yo sola pero tampoco quería que SeHun se sintiera culpable como ahora.

Las lágrimas no sólo adornaron mi rostro, si no también el de Hun. Colocó una mano en el cubriendo su expresión y, a su vez, sus sentimientos.

— Por favor, dime algo…

Pedí, cualquier cosa, una palabra, un abrazo o incluso que sólo me mirará a los ojos como acostumbra. Ver qué ninguna de esta acciones realizó me hizo darme cuenta del daño que había causado. Dicen que decir la verdad siempre es lo mejor pero… algunas veces esa verdad es tan dolorosa que lo preferible es ocultarla como en una caja y enterrarla lo más hondo posible.

— Soy un asco… — su respuesta me sorprendió — ¡Soy un maldito asco!

Se levantó molesto de la cama, su respiración era agitada y su rostro mostraba un expresión llena de furia; su comportamiento causó cierto temor en mi, de todas las facetas de SeHun, definitivamente esta es una que no quisiera volver a ver.

— ¿A dónde te diriges? — pregunté cuándo vi que se colocaba una sudadera —

Lo seguí cuando cruzó la puerta de la habitación, vi como tomó las llaves y se dirigió ahora a la puerta del departamento, tomó sus zapatos y de una salió del departamento.

Mi mano se quedó sostenida por el frío aire, mi posición era estática como la de una estatua; miraba al mismo punto, punto dónde había salido SeHun, y sólo pude soltar un sollozo.

Caí al suelo, sólo ese pequeño momento de vulnerabilidad presente, mi pasado, mi presente e incluso mi futuro será siempre lo mismo. Un mundo lleno de malas decisiones.

[•••]

SeHun guardó su celular en el bolsillo trasero de su pantalón, necesitaba golpear algo o alguien. Esperó que la persona llegara, necesitaba tenerlo cerca para desahogarse de todas esas malditas cosas que le sucedían ¡Maldita sea! ¿¡Por qué se sigue haciendo la víctima!? ¡Ella fue la que sufrió, ____ siempre fue la víctima!

SeHun se sentía como la más vil escoria, a pesar de todo el maldito tiempo que dedicó para tener un hogar y cambiar su vida, y todo esto a causa de Irene, ¿Como piensa cerrar este maldito círculo que lo único que le trae son problemas?

No lo sabe, hace unos días e incluso meses hubiese tomado decisiones con un sentido, joder. Se eso lo hubiera pensado en su momento nada de esto sucedería pero como bien dicen unas personas: “El hubiera no existe”

Miró como de la oscuridad emergía la figura alta de aquella persona. Lo tuvo enfrente suyo y sin el más previó aviso le saludó con un golpe en el rostro. La furia era más que notoria en su rostro y cuerpo; en este se veían sus cejas levemente fruncidas, su mandíbula tensa y sus ojos llenos de un dolor inmenso, el cuerpo se expresaba un poco alterado e inquieto, sus manos temblaban levemente pero con suficiente fuerza para hacer que los nudillos se tornarán blancos.

Lay lo miro de manera detallada, estaba dispuesto a devolverle el ataque pero cuando lo vio en esa condición sólo pudo hacer una cosa, lo abrazó.

—¿Que es lo que te sucede?

Sabía que esa pregunta era muy directa pero si quería ayudarle, tenía que saber por dónde empezar.