Black Soul [ SeHun y Tu ]

De un pasado ocuro a desiciones de mierda.

Que la bebé haya muerto fue un golpe muy fuerte para el matrimonio Kim.

JongIn se encontraba en la sala de estar, el bebé de casi un año se encontraba con su biberón mientras, el matrimonio, se llenaba en lágrimas. La Sra. Kim había concebido un bebé hace unas horas, lo lamentable de esta situación—susurraban las criadas— era que aquella niña había tenido la desgracia de morir a los pocos segundos de vida.

No se sabe la razón por lo cual sucedió esto, aún así su esposo la apoyó en todos lo que necesitara ya que ambos se sentían con el alma en mil pedazos. La bebé nunca la tuvieron en brazos, era demasiado el dolor para sufrir más, por esa razón no quisieron ver aquella desgracia. Su cuñado y esposa habían ido hace unos días antes haber como seguía en embarazo, de igual manera, nunca se imaginaron aquello. Ellos fueron los que se hicieron cargo de la bebé y todo el papeleo.

El cadáver de la bebé se encontraba aún en los brazos de el otro matrimonio camino a casa de los Kim.

A pesar de esta situación, el Sr. Kim decidió terminar con aquel dolor y por ello le pidió a su cuñado y esposa que le dieran un digno entierro, no habían pasado mucho del parto y el tener al pequeño cuerpo ahí le afectaría a su esposa más de lo normal.

Pero, cuando el otro matrimonio partió con la bebé en brazos, sabían que esa niña no estaba muerta, el matrimonio de los Kim había decidido no ver aquello pero si sólo hubieran tenido la cabeza fría sabrían que esa pequeña respiró el primer segundo que vino al mundo, sabrían que el matrimonio Bae había planeado aquello, sabrían que ahora Irene es su hija y, por ende, hermana de JongIn.

Se preguntaran ¿Qué acaso no lo notaron?

No lo hicieron, la anestesia fue muy fuerte y el Sr. Kim llegó después del parto, los únicos que estaban ahí era el matrimonio Bae y el cómplice en todo esto, el doctor.

Ahora, se encuentran nuevamente. Después del viaje de negocios de los Bae, se encuentran con los Kim, lamentable el Sr. Bae falleció y su esposa, desesperada sobre el futuro de su pequeña “hija” acudió por ayuda, la ayuda de los Kim.

Ellos no tenían ningún problema, ya que Irene era parte de si familia, su sobrina.

—Por favor, manten la calma — La Sra. Kim la tomó de la rodilla, estaba hecha un manojo de nervios

“¿Como reaccionarían?” se había preguntado antes de llegar al lugar.

—Irene… — comenzó hablando lo mas controlado posible, no era fácil, definitivamente no lo era pero todo tiene una explicación a sus actos.

Eso era lo que iba a aclarar, sus motivos, sus miedos.

—Irene, no sabemos a dónde ha ido — El Sr. Kim acomodó su perfecto traje y miró preocupado a la mujer que tenía enfrente— Lo siento tanto, en verdad lamento tu pérdida.

—Lo siento más yo. — El mar de lágrimas no tardó en llegar, el matrimonio se alteró al ver aquella reacción y la Sr. Kim de inmediato corrió con los brazos abiertos.

—Trata de ser fuerte, saldrás adelante. Lo haremos todos juntos como familia que somos — le sonrió

—No me refiero a ello, les tengo que confesar algo. Irene no es mi hija — la atmósfera se volvió incómoda, podía sentir la mirada de ambos en ella — hace unos años, cuando pensaron que su hija había muerto— comenzó a narrar aún con lágrimas— no fue lo que sucedió, robamos aquella niña.

—¿¡Como es posible!? —exclamó el hombre — ¡contesta!

—Todo fue planeado — respondió y sintió como los brazos que hace segundos la rodeaban se alejaban de  ella — El… el y yo intentamos tener un bebé pero era imposible ya que soy estéril, el no quería adoptar…

—¿Prefirió robarnos? — Cuestionó ahora la mujer — ¡Es estúpido!

—No saben cuánto asco me dan, ¡Nos robaron a nuestra hija! —grito lleno de irá— ¿Saben lo que tuvimos que pasar por todo eso? ¿Lo saben? ¿Ustedes pensaron que la adopción para nosotros era bueno? —El hombre se levantó molesto y la señaló culpable de todos sus actos— Nos traumaron, nos hirieron, nos hicieron perder la posibilidad de una nueva familia y sobre todo nos orillaron a llenar ese vacío con aquella niña que no es nada nuestro.

—¡Lo siento! ¡En verdad lo siento! — grito imposible a seguir con ese dolor —

—¡Cierra la boca, maldita arpía! — La Sra. Kim la abofeteó con odio— ¡Tu no sientes nada! — dijo entre dientes. — ____, ella siempre estaba ahí, en la habitación que sería para mí hija, ella estaba ahí en la sala ocupando el lugar de mi hija, ella estaba ahí pero nunca llenó el vacío que mi hija dejo — calló de rodillas al suelo, llevó sus manos al rostro empapado y grito de dolor.

—¡Largate de aquí, Bae!  — grito el hombre— sólo te diré que de ahora en adelante no me alejaré de mi hija, y pagarás por esto, maldita mujer.

Así es como fue corrida de aquella casa, con esas palabras hirientes, pero un peso se fue y de algún modo pudo respirar en paz, después de tantos años.

[•••]

—¿Piensas que casarla con el hijo de los Park será lo mejor?

—No lo sé —Contesto sincera la mujer bajando del lujoso auto negro— Ella de una u otra manera debe pagar por arruinar mi vida ¿No lo crees, cariño? — Cuestionó la Sra. Kim.

—Pero Irene…ella debe obtener todos nuestros bienes — dijo el Sr. Kim una vez entrando al lujoso lugar— Será lo mejor.

—No lo creo — se negó la mujer— ____, esa chiquilla lo deberá hacer, después de tantos años de vivir en lujos deberá sacrificar algo y tampoco es como un sacrificio, Park ChanYeol es un hombre atractivo en todos los aspectos.

Imposible lidiar con su esposa, el Sr. Kim la guió y posteriormente se encontraron con los Park.

Ahí es donde se encuentra la famosa cena que definirá el futuro de todos. Lo que les sorprendió a ambos es que el joven ChanYeol no se encontraba con ellos.

¿Donde estará?

Hola, les traigo un pequeño capítulo. Desde aquí comenzamos con el drama, era necesario agregar esto a la historia para traumarme a mi misma. Espero que lo hayan disfrutado, si es así ya saben que hacer.

Más tarde nos vemos❤️