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Narra Simón. 

El abrazo era muy reconfortante, desde hace mucho tiempo lo necesitaba. 

La puerta volvió a abrirse, pero esta ves el que se encontraba del otro lado era un señor, que estaba acompañado de Matteo, quien fue el que le abrió la puerta.

M: Veo que arreglaron las cosas, estoy feliz por eso. Miro de vuelta a el hombre como si por un momento hubiera olvidado la presencia de aquel tipo. Por cierto, Simón este buen hombre pregunta por ti. 

Debo admitir que desconfié de aquel tipo y aun mas cuando mi madre exploto.

Ms: ¡Tu!, ¿¡Que haces aquí!?, ni se te ocurra intentar ser un padre para tu hijo ahorita, son dieciséis años tarde. 

Ps: Anna, por favor solo déjame hablar con el. 

S: Perdona, pero ¿Se supone que tu eres mi papá? y exactamente ¿Por que quieres hablar conmigo?. 

Ps: Hola hijo, yo soy Adriano, tu padre.

S: Te equivocas, tu solo eres un extraño, ¿Que haces aquí?. 

Ps: Se que desaparecí de sus vidas por un largo tiempo, pero por eso volví, quiero pedirles disculpas.

S: ¿¡Crees que con eso toda cambiara y seremos una gran familia feliz!?, las cosas no funcionan así, un año, ni un ¡Puto! pudiste estar ahí, solo te enteraste y desapareciste, como por arte de magia, lamento decirte, en verdad no, pero tu no eres mi padre, tu no eres nadie aquí, quien vio día y noche por mi fue ella no tu. 

Ps: No pretendía ser un familia. 

S: Por que no sabes estar en una, lo entiendo. 

Ps: Simón yo. 

S: Adiós, espero no tener que verte nunca mas en mi vida y por si aun no te queda claro, no eres parte de ella. 

El solo bajo la mirada, agradeció a Matteo por dejarlo pasar y se fue, así desapareciendo nuevamente...

Los días han pasado, mas de una vez Simón recuerda a ese hombre que se hace llamar su padre, sin arrepentirse de nada. 

El mudarse con Matteo no fue necesario, ya que ahora como en los viejos tiempos cada uno vivía con sus madres, la madre de Simón decidió quedarse por siempre, de nuevo en Argentina, para que así no volviera a separarlos. 

Todo era bastante perfecto, las cosas estaban en su curso, la única persona que podría alterar aquello era Gaston, pero desde el accidente no ha vuelto a aparecerse en las vidas de aquellos chicos, nadie sabia su paradero, solo sus padres adoptivos, ya que después de haber confirmado eso el estallo en la locura una muy grande, así terminando en un hospital psiquiátrico.         

         

Te extraño | (Completa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora