¡Oh, Qué noche!

Capitulo 13

Pequeñas charlas

Hay una vieja voz en mi cabeza.
Eso me retiene.
Bueno, dile que extraño
nuestras pequeñas charlas.

-Gracias por reunirse conmigo, Caroline- dijo Elijah después de sacar su silla para ella y ayudarla a moverse en la mesa una vez más.

Habían pasado dos semanas desde el incidente en la boda. Después de que Klaus le contara borracho sobre la confrontación y la intervención de Damon, decidió que era mejor darle a Caroline algo de tiempo para calmarse antes de hablarle sobre asuntos legales y averiguar exactamente dónde estaba su cabeza.

Elijah todavía estaba enojado con Klaus por todo el asunto. Ya era bastante malo que hubiera tomado el paso en falso en primer lugar, pero su falta de consideración por la situación hacía que el trabajo de Elijah fuera mucho más difícil. Incluso si Caroline había estado mintiendo, ella estaba embarazada y el comportamiento de su hermano había sido espantoso. En este punto, no culparía a Caroline por demandarlos, solo podía controlar los daños y esperar el mejor resultado de la situación.

-No hay problema, Elijah, pero como dije en el teléfono. No estoy planeando demandar a tu familia y no quiero nada- dijo Caroline, alcanzando el vaso de agua que ya estaba sobre la mesa.

-En cualquier caso, pensé que te debían una disculpa personal. El comportamiento de mi hermano era inexcusable. Me gustaría extender nuestras más profundas disculpas. Sé que nuestro nuevo cuñado y mi hermana menor te quieren mucho, odiaría que el comportamiento de Niklaus tenga un impacto negativo en esas relaciones- Elijah habló con sinceridad.

-Tienes razón. La forma en que tu hermano me ha tratado está completamente fuera de lugar, pero eso nunca afectaría mi amistad con Stefan y Rebekah. Quiero decir, Klaus nunca se presentó antes de todo esto- suspiró Caroline.

-Bueno, desafortunadamente, parece que Klaus será un elemento fijo en tu vida durante los próximos dieciocho años. Me temo que estás un poco atascado.

-No necesariamente- señaló, tomando un momento para mirar el menú antes de que llegara el camarero.

Estar embarazada era una espada de doble filo cuando se trataba de comida. Por un lado, todo parecía delicioso y tenía hambre constantemente, por otro lado, todavía estaba aprendiendo a trabajar en torno a sus nuevas aversiones a los alimentos y recordando lo que podía y no podía comer. No se dio cuenta de que su declaración había sido tan controvertida hasta que miró la expresión retraída de Elijah.

-Solo quiero decir que Klaus ha dejado muy claro que no quiere tener nada que ver con este bebé o yo, y estoy bien con eso. Le conté sobre el embarazo como una cortesía en caso de que quisiera estar involucrado. No lo excluyo de la vida de su hijo, pero tampoco lo haría involucrarse. Crecí con un padre que no quería estar allí y lo sabía. No quiero que este bebé sienta eso.

Elijah vio como su mano descansaba sobre su estómago. Se le ocurrió por primera vez que este niño del que hablaban como una transacción comercial era su sobrina o sobrino.

-Nadie querría que el niño se sintiera así, Caroline- le aseguró mientras el camarero venía a tomar su orden.

Dejó el vaso de agua a un lado y miró a Caroline por encima de la mesa. Tenía la intención de hacerle más preguntas sobre sus planes con la niña y si ella necesitaba apoyo monetario, pero luego se lo pensó mejor. En su lugar, decidió aprovechar esta oportunidad para conocerla mejor que sería el mejor uso de su tiempo. Independientemente de cómo se sintiera Klaus sobre el tema, Caroline ahora era parte de su familia, aunque inconexa.

-Entonces, ¿qué es lo que haces, Caroline? Hiciste el pastel en la boda de Rebekah, así que asumo algo en ese campo.

Estaba un poco confundida cuando él le hizo una pregunta que se centraba en ella y no en el bebé, pero optó por responderla. Ella todavía estaba un poco vigilada alrededor de él. Ella no podía evitarlo después de la forma en que Klaus le había hablado y las amenazas que había manifestado en su limitado tiempo juntos. Sin embargo, había algo digno de confianza en Elijah, ella no podía identificarlo.

-Tengo un bar de panadería con un amigo de mucho tiempo. El hermano de Stefan, Damon, maneja el bar, yo manejo la cocina y Elena se encarga del negocio.

-Bueno, eres excelente en tu oficio. El pastel que hiciste para la boda de Rebekah fue delicioso, por no decir encantador, tendré que tenerlo en cuenta la próxima vez que mi madre organice una de sus fiestas dolorosamente aburridas. Tus pasteles me darían algo que esperar - dijo, ofreciéndole una sonrisa.

El almuerzo comenzó en el mejor de los casos, pero se alivió con el paso del tiempo.

-Eso sería bueno de tu parte. Pensaría que tu familia me querría lo más lejos posible, dada la posibilidad de un escándalo. Klaus lo dejó muy claro- dijo, deteniéndose para darle otro mordisco a su pasta. -Por lo que valga, y no sé si me creerás ya que tu hermano no parece saberlo, no sabía quién era esa noche en el club. Ni siquiera sabía quién era cuando, le dije que estaba embarazada. Stefan fue quien me dijo que Rebekah tenía un hermano llamado Klaus. No lo armé hasta ese momento. No tengo intención de explotar a tu familia. Supongo que me invitaste a almorzar a descubre solo eso.

Elijah suspiró, dejando el tenedor que acababa de recoger. Era su intención, pero no quería que Caroline se sintiera como una responsabilidad. -Proteger a mi familia del daño a su imagen y reputación, así como a la explotación, es mi trabajo. Sin embargo, no creo que caigas en esa categoría, Caroline. Esta no es una situación en la que tú o mi hermano tuvieran la intención de aterrizar cuando ustedes participaron en su velada hace dos meses. Es injusto que la responsabilidad recaiga exclusivamente sobre usted. Entiendo que no está buscando nada de nosotros, pero todavía siento que, al menos, debe sentirse cómodo al pedir ayuda de nosotros si lo necesitas- metió la mano en su bolsillo y sacó una tarjeta, anotando otro número en ella antes de deslizarla sobre la mesa hacia ella. -Así es como puede comunicarse conmigo, a la oficina y al celular. Si necesita algo, no dude en llamarme. Y, si no le importa, podría mantenerme al día con el embarazo. Si surge algo importante o cualquier prueba debe hacerse, de esa manera puedo poner en orden la plena cooperación de Niklaus.

Caroline pensó por un momento mientras metía la tarjeta en su bolso.

-Supongo que podría hacer eso- ella estuvo de acuerdo un poco renuente.

-Además, planeo hablar con mi hermano menor sobre su comportamiento reprensible. Temo que haya actuado por miedo e ira por lo repentino de la situación. Ahora que ha tenido tiempo de sentarse con la idea, siento que manejará Las cosas mejor- le aseguró Elijah.

Ella sonrió, asintiendo -Gracias. Eso me hace sentir mucho mejor- comenzó a buscar en su bolso su billetera -No quiero comer y correr, pero en realidad tengo una cita médica a la que ir. Me reuniré con Stefan en el hospital- ella sacó su billetera.

-Es más que bien. ¿Diez semanas? ¿Entonces es cuando puedes escuchar el latido del corazón, verdad?- pregunto antes de agitar su mano -Guarda eso, ya he cubierto la cuenta.

-Bueno, no tenías que hacer eso- dijo ella, frunciendo el ceño por un momento para dejarlo ir -Sí, estoy muy emocionado por eso. ¿Cómo lo supiste?- preguntó ella con curiosidad.

-Nuestro hermano mayor Finn y su esposa Sage tienen varios hijos, un niño y dos niñas. Este no es el primer embarazo que ha tenido esta familia.

Caroline se puso el suéter sobre los hombros y se preparó para levantarse de la mesa.

-Bueno, gracias por el almuerzo. Le haré saber si surge algo en la cita de la que usted o Klaus deben estar al tanto- ella le ofreció una última sonrisa antes de salir del restaurante y meterse en el metro.

CarithoMorals

Aclaración este fanfic no me pertenece yo solo traduzco para los amantes del klaroline.