¡Oh, Qué noche!

Capitulo 23

Quédate

No estoy seguro de cómo sentirme al respecto.
Algo en la forma en que te mueves.
Me hace sentir que no puedo vivir sin ti.
Me lleva todo el camino.
Quiero que te quedes.

-Estamos muy contentos de que pueda reunirse con nosotros Sra. Gilbert, Sra. Forbes, soy Dyson Thornwood. Hablé con la Sra. Gilbert por teléfono-dijo el Sr. Thornwood, sacudiendo ambas manos antes de invitarlos sentarse en la gran mesa de juntas.

-Sí, lo hicimos, pero no fuiste exactamente con detalles si no te importa que te diga- dijo Elena, alisándose la falda mientras se sentaba en la mesa.

Caroline hizo lo mismo, sentándose cuidadosamente en la mesa y deslizando su silla hacia adentro.

-Y lo siento por eso. No era mi intención ser tan vago por teléfono. Represento a una empresa de inversión, estamos buscando entrar en la industria alimentaria. Hemos investigado mucho en Washington DC área, así como las áreas circundantes y el nombre que surgió continuamente era suyo. Todos en la ciudad parecen tener su negocio en la punta de la lengua. Hemos investigado un poco sus cifras financieras. para ustedes mismos- explicó, tomando asiento detrás del escritorio -No me gusta andar por las ramas, así que lo dejaré todo sobre la mesa. Mi empresa está interesada en invertir en su negocio con la franquicia en mente. ¿Han pensado en la posibilidad de expandirse antes?

Caroline y Elena se miraron, ambas levantaron una ceja en una conversación silenciosa. Elena finalmente volvió a mirar al hombre.

-Lo hemos discutido, pero no con gran detalle. No tenemos planes actuales de expansión, pero no está fuera de la mesa.

-Desde nuestro punto de vista, usted es el candidato perfecto para la expansión. Nuestra maqueta inicial requiere un plan de cinco tiendas. Nueva York, Los Ángeles, Seattle, Chicago y Washington DC seguirían siendo su tienda insignia. Comenzaríamos con Nueva York y reevaluar en un año. Si las cosas siguen yendo bien en ambas tiendas, lanzaríamos las tres restantes durante el próximo año- explicó de hecho.

-Bueno, eso es mucho para digerir- dijo Caroline, con las manos cruzadas sobre su bulto mientras se recostaba en la silla.

Sabía que la posición del asiento la hacía parecer desinteresada, pero era tan difícil sentarse derecho sin cerrar por completo la circulación a su mitad inferior.

-Bueno, ciertamente no esperamos una respuesta hoy- hizo una pausa, abriendo su maleta y sacando dos copias perfectamente correlacionadas y encuadernadas de lo que parecía ser un plan de negocios. Puso uno frente a cada uno de ellos, colocando sus manos sobre ellos -Esto presenta todos los detalles del plan, así como la propuesta que estamos poniendo sobre la mesa. Es preliminar. Sabemos que habrá muchas preguntas y posibles cambios. Siempre hay espacio para negociaciones en ambos lados. Llévate esto a casa , revíselo, digiera todo. Hable con su abogado y nos reuniremos de nuevo cuando se sienta cómodo y responda cualquier pregunta que pueda tener al respecto.

Caroline y Elena recogieron los paquetes frente a ellos, hojeándolos a su propio ritmo. Elena ya estaba comenzando a leer cada página en detalle mientras Caroline la hojeaba con la intención de leerla más a fondo más tarde.

Cerrándolo, Caroline lo guardó cuidadosamente en su bolso antes de mirar al Sr. Thornwood.

-Nos pondremos en contacto, Sr. Thornwood. Fue un placer conocerlo- ella extendió su mano para estrechar la suya mientras Elena hacía lo mismo antes de detenerse para ayudar a Caroline a levantarse.

Las dos mujeres caminaron en silencio hasta el ascensor, esperando hasta que las puertas se cerraron para mirarse. Fue una mirada cargada, ambos tratando de evaluar la reacción del otro antes de dar a conocer sus propios pensamientos.