Capítulo 2-Minhyun

16 4 0
                                    

Movía la cabeza al ritmo de la música, aunque no era la suya. Odiaba escucharse a si mismo, por lo que prefería bandas de otros géneros musicales.
Había bastante ruido en el piso inferior para que sólo estuviese su padre y él, así que decidió ir a echar un vistazo, sólo asomándose un poco por el pasillo con cautela. Traía puesto un bóxer negro y una camisa abierta pero poco le importó, después de todo solo sería una miradita.

A medida que se iba acercando fue oyendo una suave voz, delicada y casi aguda que le dio escalofrío esperando que se tratara de una chica. Pero su expresión de ilusión desapareció cuando vio de quién se trataba, un chico. Rubio de ojos coloridos, se notaba que era extranjero por el idioma en que se comunicaba era el Coreano, aunque le salía bastante fluido a pesar de su otra nacionalidad. Quería oírle hablar más.

— ¿Un asistente? ¿Trabajar para una estrella? Están cada vez más locos. — Chistó para él mismo y siguió escuchando. —

— Bueno Oliver, tú te hospedarás aquí, puedes elegir entre 5 cuartos que hay disponibles, porque los otros los ocupamos como bodegas. Tómate éste trabajo como tu práctica, ¿bien? Y, sé fuerte. —  Dijo aquello último en voz baja, lo que cabreó al espía porque no logró oír.

->>>>-

— Sí, iré a buscarlo. —

Cuando su padre salió en su búsqueda, corrió por el pasillo de vuelta a su cuarto, donde se vistió a toda velocidad con unos pantalones de gimnasia plomos cerrados del tobillo y una camiseta holgada blanca, que era algo corta pero lo suficiente para cubrir hasta su ombligo, dejando ver una leve línea de piel a la vista. Se alborotó el cabello y se vertió pasta de dientes en la lengua. Si su padre le veía en bóxer lo mataría, porque desde temprano le dijo que debía estar presentable durante la tarde, eran eso de las 5pm para variar y él seguía igual.

El hombre como de costumbre no golpeó he hizo saltar del susto al muchacho que se encontraba poniéndose calcetas negras cortas.

— Mocoso, te necesito ahora. Abajo.—

— ¿Qué quieres, anciano? — Le reclamó molesto, o fingiendo, estaba confundido y quería saber el porqué había un gringo en su recibidor.

— Sólo ven conmigo. — Le ordenó, firme, a lo que este asintió sin dar tiempo a que se pusiera un calzado, y sólo lo sacaron de la habitación.

Ambos iban bajando las escaleras, cuando se siente firmemente observado. Sí, unos profundos ojos le observaban, hermosos de pestañas largas y claras como su cabello, pero a la vez no le gustaba, primera vez que no se sentía halagado aunque le mirasen  detenidamente.

— Él es Minhyun, mi hijo y tu cliente.  Trátalo con firmeza, tiene que obedecerte en cada consejo que le des, y si no es así, me avisarás. Minhyun, él es Oliver Kyler, viene de Londres, Inglaterra. No seas un idiota y compórtate con él. —

"Aún esa mirada brava que le hacía sentir la incomodidad, ¿Éste era su nuevo prototipo de niñera de su padre? Como a avanzado el mundo." — Dijo sarcástico en su mente el pelinegro.—

— Te explicaré sus deberes para que sepas porque está el jóven Oliver aquí. Es él mejor estudiante en su ciudad natal y en todas las que le rodean, estudia periodismo y eso te ayudará con tu comportamiento ante las cámaras. No quiero que vuelvas a colapsar entre tantas preguntas y malas respuestas, está acá para hacerte reaccionar, hijo.

— ¡Entonces es una niñera! —

— ¡No hombre, que no! Te pondremos a su cargo, tú sabes bien el porqué y no quiero que lo intentes despedir o que se vaya como los otros, entendido? —

Cansado del sermón decidió que las cosas acabaran fluyendo solas.

— Como quieras, anciano. Yo nunca me he portado mal. — Le dedicó una voraz y sensual mirada al rubio. — Un gusto, Oliver.—  Le dijo, para luego irse de allí dándoles la espalda, marchándose,  cuando su padre lanzó el último ataque.

—  Y vivirá aquí, con nosotros.

— Espera... ¡¿Qué?! — Reaccionó, como si le hubiesen lanzado un balde de agua fría,  girándose hacia ellos.

~~~~
No olviden dejar sus votitos y comentarios para seguir con esto!! 💞🎃

AFERRADOS (minoliv)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora