Capítulo 5- Oliver

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Por un momento... Se sintió extraño. Como si... Alguien o algo estuviese siguiendo sus movimientos. Le daba escalofríos y su piel se erizaba. ¿Habrían cámaras en la habitación? Era lo más probable, tal vez por eso lo incómodo del ambiente.

Finalmente se vistió con sus shorts de pijama y la camiseta, estirándose un poco mientras dejaba escapar un largo bostezo. Todo iba bien... Al parecer sería mucho más tranquilo de lo que pensó...

Bueno, hasta que se sobresaltó al escuchar la voz ajena tras la puerta, girándose y reconocer al pelinegro. ¿Qué hacía ahí?.. ¡¿Le había estado espiando?!

—... ¿Qué--... ¡Hey!

Exclamó bastante sorprendido, saliendo tras él con un gran asombro y... Vergüenza. La puerta no había estado del todo abierta, incluso semi cerrada... Entonces, ¿por qué le estaba espiando? ¿Acaso los dos no eran hombres?

— Hey, espera... —Logró retenerlo tomando uno de sus brazos, mirando al pelinegro con total calma... Pensó que tal vez... Había ido a hablar con él y no quiso entrometerse. — ¿Querías hablar conmigo? Puedes pedirme lo que quieras.

Y nuevamente una sonrisa deslumbrante.
Al estar frente al chico pudo notar lo mucho de altura que éste le sobrepasaba. Diría que unos cuantoa centímetros más que él, bueno, Oliver medía 1.76. No demasiado alto, pero Minhyun sí que lo era.

— Si quieres hablar, eres libre de entrar en mi habitación cuando quieras.

Dijo finalmente, soltando al moreno para luego voltearse y entrar en su habitación. Ya era tarde, y mañana tendría que empezar por acostumbrarse y conocer cada aspecto de la ciudad, de su trabajo, de la universidad y de la casa, mencionando también a Minhyun.

— Bueno, iré a dormir. ¡Descansa!

Nuevamente, no cerró la puerta, sólo la dejó semi cerrada para que el moreno no tuviese problemas en entrar cuando quisiese. Dio otro largo bostezo, acostándose en la cómoda cama de aquella habitación y tapando su cuerpo con las mantas. Todo bien... Hasta que se le vino a la mente nuevamente el porqué el moreno le espiaba... Le tomó por sorpresa. Sólo esperaba que no le hubiese visto en ropa interior.

AFERRADOS (minoliv)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora