Hug me.- Double B.

XVII.

Bobby.

No sabía cómo expresar lo que estaba sintiendo. quería poder encontrar las palabras exactas, pero ninguna servía.

Mi cabeza reposaba sobre su abdomen desnudo, mientras él acariciaba mis cabellos violáceos.

— Me gustaría ir de vacaciones a una isla.— dijo, entre eso que fantaseabamos para pasar el rato.

— ay, Mino. a mí me gustarían tantas cosas.—

—¿cómo por ejemplo?—

— Me gustaría que lo nuestro sea algo más.— dije desde mi lugar. Mino, quien yacía con sus ojos cerrados, se enderezó, mirándome un tanto sorprendido. el hecho de que enderezara su postura, quedando sentado en la cama, hizo que me mueva hasta quedar apoyando mi cabeza en sus piernas.

—¿qué dijiste?—

— sí. que seamos algo más que amigos. pero no como ahora, algo serio.—

— ¿y crees en YG estaría de acuerdo con eso?— rió alto.— terminaríamos peor que Hyuna y E-dawn.—

— ¡Mino! no digas eso. No fue lindo. además, ellos nunca habían dicho que eran pareja y tampoco eran de YG.— conecté nuestras miradas, la suya por rara vez se encontraba nerviosa.— si lo nuestro fuese más allá, al menos yo no podría ocultarlo por mucho tiempo.—

— ¿lo nuestro?—

— sí...— me levanté lentamente, quedando sentado frente a él, era extraño que respondiera eso.

— no existe, bobby.—

—¿qué?—

— tú eres el único que está viendo flores donde siquiera hay tierra.—

pude sentir como un nudo dentro de mi pecho comenzaba a hacerse presente a medida de que él hablaba. me gustaría que fuese otra de sus bromas pesadas.

— Mino, tú dijiste que te gustaba.—

— oh por dios Bobby, ¿es en serio? estaba borracho. no me refería a eso.— mis ojos estaban cristalizados, sentía que a una palabra más terminarían por desbordar e inundar mis mejillas.— ¿acaso nunca aprendiste a diferenciar entre gustar, atraer y enamorarse?—

— jugaste conmigo.— susurré, con todas las cosas que Hanbin me había dicho cruzándose por mi cabeza.

— no, yo no hice absolutamente nada. tú te ilusionaste solo.—

— pero, yo pensé que...— me interrumpió.

— Jiwon, no tengo tiempo para esto. si lo que quieres es una relación seria con quién salir de la mano y ver flores de colores, ahí tienes a Hanbin. de lo contrario.— se señaló.

— ¡no funciona así!—

— oh sí, créeme que sí.—

Me levanté enfurecido, triste, decepcionado. no sabía cómo definirme en ese momento.
Estaba roto. Había discutido con Hanbin y defendido a Mino quien terminó haciendo todo aquello que Hanbin dijo que haría, sin dejar pasar nada más que una semana.

Fue sorprendente como en pocos minutos me hizo mierda con simples palabras. sin demostrar ni el mínimo afecto, todo lo contrario a mí.

— te puedes ir a la mierda.— él era una mierda.
Mientras las lágrimas caían en picada deslizándose por mis mejillas, me retiré de su casa para volver a la empresa. destruido.