Querido Michael,
No, no escribí esta carta con metáforas para decirte cuánto te extraño. O de cuánto significan tú y nuestros recuerdos.
La escribí para decir adiós.
Mi avión a Estados Unidos sale en unas tres horas, y sólo necesitaba decirte adiós. No sé por cuánto tiempo me iré o dónde me quedaré, pero lo que si sé es que no puedo seguir haciéndote pasar por esto.
Te escribiré cada día, Michael. Ni siquiera me importa que no quieras responderme. Te escribiré cada día hasta que regrese.
Soy un bastardo egoísta por irme. Sé que lo soy. Pero tienes que entender que no puedo hacer esto ya. He sido tan dañado que cuando alguien trata de darme lo que merezco, no tengo idea de cómo responder.
Sólo quiero que sepas que te amo. Te amo con todo mi jodido corazón de mierda.
-Luke