Capitulo 10

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Nosotros tuvimos una venta en el trabajo, eso no es normal. Papá transportó una gran caja de vitaminas fuera del almacén y pegó un manuscrito de venta con un símbolo.

—Yo no sé por qué no podemos atraer más clientes —dijo hace unas pocas horas atrás—. Realmente estoy sorprendido.

No estuve sorprendida que la gente no quisiera comprar una caja de cartón de vitaminas etiquetada con un andrajoso signo hecho a mano, porque yo tengo dieciséis y soy racional, y él es mayor y deja su trabajo porque su escritorio se rompió.

Todo el tiempo que estuve allá, solamente vendimos tres botellas, y dos de ellas eran a un tipo que argumentó sobre el precio conmigo y luego con papá hasta que él cayó y las vendió por la mitad porque estaban peladas atrás en una esquina. Todd, había pasado la mayoría del día libre, haciendo lo que haya hecho, y cuando debía haber estado trabajando, probablemente coqueteando, había vendido la otra botella y luego le pregunta a papá si él puede irse, papá le dice que sí, por supuesto, y yo caigo en la silla de nuestra caja registradora, deseando tener un auto y salir, o al menos permitirme conducir uno propio

Cuando el centro comercial finalmente cerró, papa cogió la caja de ventas y la reorganizó, añadiendo botellas a partir de la inundación que recientemente había comenzado a almacenar en el pequeño armario de debajo de la caja registradora.

—Las cosas están un poco apretadas aquí, ¿no? —dijo—Sabes, creo que voy a tomar algunos extras ahora, y una vez que tengamos un poco mas de dinero voy a alquilar más espacio para almacenar en el centro comercial.

Y fue entonces cuando yo sabía exactamente por qué la abuela iba a venir. Ella tiene dinero, mucho dinero y las cosas realmente deben ser malas para que mamá lo tome en cuenta, porque durante el tiempo que yo puedo recordar, la abuela siempre soltó indirectas acerca de que mamá no vive de la forma que debería, y mamá siempre le dice, ―yo vivo como quiero‖, y luego ella sale de la habitación y la abuela sigue hablando.

Miré hacia las vitaminas de papá y me di cuenta que se añadirán los gastos de todas las botellas que pude ver en el mostrador y en los estantes. Sí, era sin duda por qué la abuela iba a venir.

—¿Quieres ayuda? —papá sacudió la cabeza.

—Tengo un sistema ¿ves? Voy por el tipo de suplemento, no el nombre.

—Está bien papá —él era tan extraño.

—Voy a necesitar otra caja, sin embargo —dijo—¿Quieres ir a los contenedores de basura y encontrar una?

—Claro —porque nada supera el trabajo en una tienda de vitaminas con su padre, excepto todos los que además al final tienen una visita a la basura.

Los contenedores de basura están a las afueras de la sección del centro comercial, escondido detrás de una pared de ladrillos y el muelle de carga. La única manera de llegar a ellos es a través del corredor del centro comercial, un largo pasillo que serpenteaba detrás de cada tienda y estaba lleno de armarios como el de alquiler de papá.

Cuando salí, un tío con una camiseta café estaba tirando la basura. Él asintió con la cabeza hacia mí.

—Lugar de Vitamina, ¿verdad?

—Bueno —dije con cautela, él no era hermoso ni nada por el estilo, pero era lindo en un estilo desalineado de alguien que vende café y probablemente toca la guitarra.

—Tú trabajas en el lugar de café ¿no?

—Sí. Oye, ¿puedes decirle a tu jefe que deje de hablar acerca de las vitaminas cuando está en la tienda? Mi jefe me odia, pero no quiero decir nada porque...

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